En los años 60 K. Rahner hablaba de la necesidad de una “pericóresis permanente entre los tratados” de la dogmática, cuyo centro debía ser el misterio trinitario. En ello, el jesuita veía la condición necesaria para que el discurso trinitario saliese de su aislamiento y pudiese convertirse en el centro vital de la teología. Era la condición sine qua non para una teología trinitaria. ¿En qué medida ha tenido lugar esta “pericóresis entre los diversos tratados”? ¿Cuáles han sido los ámbitos de la teología más beneficiados por la inspiración trinitaria? ¿Es posible rastrear un hilo conductor entre los distintos capítulos teológicos? ¿Es posible hablar de progreso, coherencia y continuidad? ¿En qué medida se ha dado una inspiración trinitaria de la escatología? La fe trinitaria, ¿impregna y define claramente el discurso sobre la consumación de la historia humana y del cosmos? Dicho en breves palabras: ¿es trinitaria nuestra esperanza? En esta obra, el autor se propone acercarse a estas problemáticas dialogando con uno de los autores más significativos del siglo XX. En el pensamiento de Jürgen Moltmann encuentra una aportación creativa y sugerente en la que la escatología no es un simple apartado final del tratamiento dogmático, sino que aspira a ser la culminación de una teología trinitaria.
Adrián J. Taranzano nació en Balnearia (Córdoba, Argentina) en 1974. Cursó sus estudios filosóficos y teológicos en Córdoba y fue ordenado presbítero en 2001 para la diócesis de San Francisco. Tras años de dedicación exclusiva a la tarea pastoral, prosiguió sus estudios académicos en centros europeos. En 2011 obtuvo la licenciatura en exégesis bíblica por el Pontificio Istituto Biblico de Roma y en 2015 culminó el doctorado en teología dogmática en la Ludwig-Maximilians-Universität de Múnich. Actualmente se dedica a la tarea docente en diversos centros teológicos de su país de origen. El diálogo entre exégesis y teología dogmática es uno de los focos de su interés y de su tarea de investigación.