
Traducción del original italiano (La Chiesa all´alba del terzo millennio. Riflessioni teologico-pastorali) por Arantxa Aguado.
La Iglesia siente la necesidad de renovarse continuamente, y de un modo especial en estos momentos de comienzos de un nuevo milenio. En estas circunstancias, el autor, después de definir con claridad el sentido y los límites de la reforma o renovación eclesial, reflexiona sobre lo que es el presupuesto indispensable de este ejercicio: la naturaleza de la Iglesia y sus diversas dimensiones. Así, se abordan temas capitales como la sacramentalidad de la Iglesia en cuanto Cuerpo místico de Cristo, su dimensión pneumatológica y eucarística, su naturaleza de comunidad reconciliada y reconciliadora o su dimensión misionera, entre otros. En la obra de renovación ocupan un lugar especial los presbíteros, los cuales deben recibir una formación teológica adecuada, con una auténtica apertura ecuménica.
El cardenal José Saraiva Martins (Portugal, 1932), claretiano, es Prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos. Se doctoró en Teología y ha sido docente durante treinta años, llegando a ser Rector de la Pont. Univ. Urbaniana. Es autor de más de una veintena de libros y multitud de artículos, y ha organizado diversos congresos internacionales.
Dios ha decidido entrar en la historia como un ser que viene desde la pequeñez de un niño y envuelto en el profundo secreto de la misma vida. La existencia del Verbo Encarnado está presente en todas las páginas de la Escritura. En ellas Dios reitera una y otra vez su mensaje. La Palabra divina es la manifestación sublime de que el Señor ha llegado a los hombres, más aún, ha venido a través de la sencillez y la naturalidad con que cada ser viviente llega a este mundo, mediante el alumbramiento de las entrañas maternas. Así quiso Dios incorporarse a la historia, desde el silencio y la humildad, desde la sencillez y la ternura, casi desde el anonimato, en un lugar perdido de un pequeño país de la costa mediterránea.
Antonio Llamas Vela es licenciado en Ciencias Bíblicas por el Pont. Instituto Bíblico de Roma, doctor en Teología Bíblica por la Univ. Pont. Comillas y doctor en Filología Bíblica Trilingüe por la Univ. Pont. de Salamanca, profesor de Sagrada Escritura en el Seminario Diocesano de Córdoba y Director del Centro Bíblico María Madre de la Iglesia.
La teoría estética se organiza a partir de la estructura metafísica del ser que muestra su esplendor por medio de las formas. La multiplicidad de formas nos remiten a la suma perfección del Ser absoluto y trascendente. El hombre busca esa realidad misteriosa y soberana que, en la naturaleza y en la historia, se revela como suma verdad, bondad y belleza. La belleza y la revelación, el arte y la fe, las imágenes sagradas y su culto, son las cuestiones que se tratan en este libro. En la comunidad cristiana, «el arte con su capacidad recreativa puede integrar, en el diálogo divino-humano, los más bellos significados de la historia de la salvación». La iconografía cristiana es una de las manifestaciones más emotivas de la vida de la Iglesia. La imagen sagrada representa la dimensión gloriosa del misterio divino, lo que la convierte en medio eficaz para la unión con Dios. Ciertas diferencias entre la Iglesia oriental y occidental pueden encontrar una vía de aproximación en el culto iconográfico de la única Iglesia de Cristo.
Jesús Casás Otero es doctor en Teología por la Fac. de Teología de Cataluña y licenciado en Historia del Arte por Univ. Complutense de Madrid. Actualmente es profesor del Instituto Sup. de Ciencias Religiosas a Distancia «San Agustín» y director del Museo Diocesano de Tuy.
Los trabajos de este volumen fueron publicados en 1961 y 1962 y, al recopilarlos para su edición en este libro, Rahner se refirió a ellos como "reflexiones dogmáticas". Sin embargo, el propio Rahner advierte que ese término debe tomarse siempre "muy ampliamente: la teología ha de servir a la proclamación del Evangelio y la mayoría de las veces progresa sólo si procede la urgencia y la tarea de dicha proclamación, cuando no estima, por tanto, el impacto pastoral como disminución de su rigor".
El Credo comienza con esta afirmación: Creo en Dios Padre, es decir, creo en el Padre que, en su eternidad divina, está en el origen del Hijo y del Espíritu Santo y de todo cuanto existe. Toda la oración cristiana, especialmente la oración litúrgica, comienza haciendo la señal de la cruz "en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo", y suele terminar "por nuestro Señor Jesucristo que contigo vive y reina en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos".
Todo el ser y toda la vida de Cristo estuvieron filialmente vueltos hacia el Padre hasta tal punto que su alimento consistió en hacer la voluntad del Padre (Jn 4, 34). Este libro ha sido concebido como una ayuda para recorrer nuestro itinerario hacia el Padre, exponiendo con cierto detalle lo que la teología dice en torno a la Persona de Dios Padre. Se trata, en definitiva, de considerar detenidamente la "paternidad" del Padre y nuestra filiación divina en Cristo.
Lucas F. Mateo Seco es Doctor en Teología por la Universidad de Santo Tomás de Aquino (Roma). En la actualidad es profesor de Teología Dogmática en la Facultad de Teología de la Universidad de Navarra y Director de las Revistas Scripta Theologica y Scripta de Maria.
El autor, profesor de Teología Moral en la Facultad de Teología de la Italia septentrional, en Milán, pretende comprender los aspectos capitales del documento pontificio y afrontar las cuestiones más recientes sobre el carácter telológico de la moral (autonomía) y sobre el método para formular la norma y el juicio moral (teología). Como requisito para cumplir esta tarea, Bonandi reconstruye el debate de los últimos años, indicando su origen, su desarrollo y sus representantes.
Hans Urs von Balthasar nació en Lucerna (Suiza) en 1905. Realizó estudios de música, filología germánica y filosofía en Viena, Berlín y Zurich. En 1929 entró en la Compañía de Jesús. En su formación teológica son decisivas las relaciones con Erich Przywara y Karl Barth, pero sobre todo destacan dos encuentros en particular: con Henri de Lubac, su maestro en teología, y con Adrienne von Speyr, junto a la que comenzó una experiencia de vida religiosa centrada en una visión trinitaria de la vida cristiana y en una presencia activa en el mundo. Al mismo tiempo funda y dirige la editorial Johannes Verlag, que se propone publicar los escritos de los Padres de la Iglesia y de algunos teólogos que situaron como centro de su reflexión a Cristo. Su pensamiento teológico está dominado por la idea de que sólo el amor es creíble. Sobre este fundamento von Balthasar construyó su vasta obra teológica cuya forma más acabada se encuentra en la trilogía Gloria, Teodramática y Teológica. En reconocimiento a su persona como punto de referencia para toda la teología católica, fue nombrado cardenal por el papa Juan Pablo II pocos días antes de su muerte, acaecida el 26 de junio de 1988.