Valeroso testimonio de un destacado teólogo y comprometido pastor de almas a favor de una Iglesia más humana. Ideas no pasadas por la censura, que cuestionan, con espíritu constructivo, el tipo de relaciones vigente en las estructuras intraeclesiales.
La interpretación de las «tentaciones de Jesús» y de la «purificación del templo» de Bernhard Häring pone ante la Iglesia el espejo de las tentaciones a que ella misma está siempre expuesta. De la mano de ejemplos concretos, el autor señala en qué puntos esta Iglesia se está distanciando cada vez más del espíritu de Jesús y corre el peligro de no cumplir su misión.
Bernhard Häring describe el sueño de una Iglesia fraterna, capaz de recuperar la confianza perdida si se pone radicalmente, como Jesús, al servicio de los hombres. El autor indica que donde están las grandes tentaciones, allí se encuentran también las grandes oportunidades de renovación. Una defensa apasionada, constructiva y esperanzada.
Esta obra se suma a las respuestas que, desde diversos ángulos, pretenden esclarecer el misterio de la existencia humana: ¿Qué es el hombre? La antropología, en sus diversas ramas, aporta materiales para acercarnos a esa realidad, cuyo hondón se escapa a la investigación humana, porque siempre hay un más, cuya clave interpretativa sólo es posible, según el autor, si se considera al hombre en su dimensión más profunda y misteriosa, en su relación con el Dios Creador y Salvador.
En ese plano teológico se sitúa la obra del Dr. Ponce Cuéllar, El misterio del hombre, que estudia los albores de la existencia del hombre, cuyos aspectos fundamentales -creación, llamada de Dios en Cristo y pecado original- conforman la vida y el ser del hombre.
El autor estructura cada parte del libro en un triple capítulo: en primer lugar, un estudio amplio y ajustado del tema de la Sagrada Escritura, de acuerdo con la investigación actual; sigue después, con el mismo rigor científico, un panorama de la historia de la Tradición y del Magisterio acerca de esa problemática, y termina, en tercer lugar, con una profunda reflexión a la luz de los datos positivos y de la teología actual, presentando diversas soluciones para asumir aquella que el autor cree más ajustada a los textos escriturísticos y magisteriales, y con mayor significatividad para el hombre.
La temática del libro es ciertamente actual en cada una de sus partes. El tema de la creación adquiere hoy una importancia coyuntural por la conciencia de los peligros derivados de una explotación ilimitada de la naturaleza y de sus energías, por las experiencias negativas de una técnica hipertrofiada, atentatoria en su uso contra la dignidad de la persona, y también por el miedo a una aniquilación atómica. Pero el teólogo, que en todo momento debe ser consciente de la importancia fundamental del dogma de la creación, no ha de apoyarse sólo en razones coyunturales para el estudio de este dogma, convirtiéndolo en un recurso pasajero. Sólo una visión amplia y profunda de la creación puede prestar al hombre el conocimiento y la fuerza necesarios para dominar su situación en el tiempo y poner remedio a sus necesidades.
Este Diccionario enciclopédico de los santos recoge 2250 artículos de la tercera edición de la obra de referencia Lexikon für Theologie und Kirche (1993-2001), sobre miles de personas que la Iglesia veneró y venera como santos y como beatos y agrega 80 entradas sobre su culto en los aspectos histórico, teológico-sistemático, litúrgico, jurídico-canónico y de la historia de la espiritualidad. La entrada por artículo nos aclara de la condición de santo o de beato de alguien según la nueva edición del Martirologium Romanum del año 2001 así como la fecha en que lo conmemora la Iglesia católica. El índice desglosado por personas o por temas permite un acceso rápido y ágil a la información deseada. Esta edición tiene especial interés para las Iglesias y para los lectores de habla hispana pues incorpora nuevos artículos sobre santos y beatos de auto referencia y con la misma intención amplía y actualiza su bibliografía.
De interés para teólogos, estudiantes de teología, ciencias religiosas, congregaciones religiosas y también para novelistas, escritores, guionistas, coleccionistas, curiosos en diccionarios…
Ha llegado el momento de poner en práctica en la teología el lema de la Ilustración: “¡Atrévete a pensar!”
Religiones, teología, espiritualidad, ética y política: he aquí los temas centrales de este libro, que replantea y reformula los núcleos fundamentales de las religiones y, especialmente, del cristianismo. Juan José Tamayo intenta dar respuesta a algunos de los desafíos de nuestro tiempo: la diversidad cultural, el pluriverso religioso, el feminismo, la nueva conciencia ecológica y la lucha contra la pobreza. Y lo hace en diálogo interdisciplinar, desde el lugar hermenéutico de los movimientos sociales que trabajan por “Otro Mundo Posible”.
Las religiones ya no pueden elaborar un discurso universalista que surja de la cosmovisión occidental. Querer imponer los conceptos de igualdad y libertad que surgen de la Ilustración europea se convertiría en imperialismo intelectual. Para evitarlo, Tamayo incorpora la categoría de la interculturalidad, que va más allá de la inculturación de la fe y del multiculturalismo, y elabora un nuevo paradigma: el de la teología intercultural e interreligiosa de la liberación en perspectiva de género Ahí radica la originalidad de este libro.
Este libro, continuación de La formación permanente, intenta definir el modelo formativo en torno al cual se puede construir un proyecto de formación permanente. En la primera parte, presentan algunos de los modelos formativos más habituales del pasado. En la segunda parte, el autor presenta un nuevo modelo, que desde su visión, es más adecuado para la formación inicial y permanente: el modelo de la integración. La tercera parte ofrece una síntesis metodológica de este modelo, incidiendo en sus aspectos pedagógicos