Del libro de Job dijo J. W. Goethe que «funde poesía, religión y filosofía». Para Lord Byron es «el primer drama del mundo». G. K. Chesterton, a propósito del carácter alegórico de toda gran literatura, escribió: «La Ilíada es grande sólo porque toda vida es una batalla, la Odisea porque toda vida es un viaje, el libro de Job porque toda vida es un enigma». Y, más contemporáneamente, también se han referido al libro de Job estudiosos de la literatura como G. Steiner: «Job el edomita grita pidiendo sentido... Pide a Dios que se dé sentido a Sí mismo», y N. Frye: «Quien se interese por la Biblia y la literatura acabará dando vueltas en torno al libro de Job como un satélite».
Job ofrece una nueva versión en castellano del libro bíblico más moderno y provocador. Esta nueva traducción transmite su lirismo y fuerza espiritual recuperando su carga simbólica y literaria a partir del contexto religioso del Antiguo Oriente. En ella vibran las diversas voces que resuenan en el texto —las de Job, su mujer, amigos y enemigos, Yahvé y Satán— en un castellano actualizado, que sigue las normas de la restauración: limpiar sin ocultar. En la segunda parte se hace un extenso recorrido por las numerosas y encontradas interpretaciones que la obra ha suscitado en el judaísmo, cristianismo e islam, así como su reflejo en la literatura, iconografía y pensamiento de cada época.