El libro de las fundaciones es el de mayor atractivo humano escrito por la Santa. En él podemos contemplar a la autora recorriendo largos caminos, a pesar de sus enfermedades y de sus años, esforzándose en cumplir la voluntad de Dios entre abundantes tribulaciones. Fundará monasterios en Ávila, Medina del Campo, Valladolid, Toledo, Pastrana y Salamanca, y un convento de frailes en Duruelo. Poco después lo hará en Segovia, Sevilla, Caravaca… En vísperas de su muerte seguirá con su empeño, esta vez en Villanueva de la Jara, Palencia, Soria y Burgos.
Teresa de Cepeda y Ahumada, más conocida como santa Teresa de Jesús, nació en Ávila el 28 de marzo de 1515. Ingresó en el convento de la Encarnación en esa misma ciudad. Años después llevó a cabo una reforma en el Carmelo y fundó las carmelitas descalzas. Muere en Alba de Tormes el 4 de octubre de 1582. Junto con san Juan de la Cruz, se le considera la cumbre de la mística cristiana y una de las grandes maestras de la vida espiritual en la historia de la Iglesia. En 1970 Pablo VI la nombró Doctora de la Iglesia. Además de sus escritos místicos, cultivó la poesía lírico-religiosa y los escritos breves. Toda su obra y epistolario ha sido traducido en todo el mundo.