Sinopsis: Este volumen presenta los últimos libros de los Stromata de Clemente de Alejandría (h. 150-215), una de las obras más originales y profundas de los primeros siglos de la literatura cristiana. Siguiendo la mejor transmisión editorial, se incluye también estas páginas el llamado libro octavo, aunque este escrito presente contenidos y metodología distintos al resto de los libros que componen la obra magna del escritor Alejandrino.
Tanto el libro sexto como el séptimo ofrecen al lector «el discurso ético», como le gusta decir al Autor paleocristiano; es decir, el modo de vida del auténtico cristiano, aunque cada escrito lo enfoca desde perspectivas diferentes. En el libro sexto Clemente se referirá al comportamiento o vida del cristiano en sus relaciones con los demás hombres, mientras que en el libro séptimo expone la conexión del cristiano con Dios. Ambos aspectos, ya tratados someramente en los libros anteriores, son los que delinean los trazos más importantes del programa del cristiano perfecto, del gnóstico verdadero, conforme al vocabulario clementino. Así en el libro sexto se completa el tema del plagio iniciado en el anterior escrito, la cuestión del origen de la filosofía y finalmente la actitud gnóstica fente a la contemplación, la ciencia, la Escritura, etc. En el libro séptimo Clemente señala la tarea del cristiano con los objetivos que éste debe alcanzar, explicando con detalle algunos aspectos importantes de la vida cristiana como son, por ejemplo, la oración, el trato con Dios, los grados de perfección, etc.
Respecto al libro octavo de los Stromata llama la atención su contenido, tan diferente del que aparece en el resto de los libros. El que se ofrece en los otros libros es fundamentalmente teológico, mientras que estas páginas presentan un tema filosófico, y más concretamente sobre materia de lógica: la necesidad de investigar para lograr la verdad, la incongruencia del escepticismo y la última parte sobre las distintas clases de causas.