Cuatro profesores universitarios más un investigador especialista en la eclesiología del Santo Maestro Juan de Ávila, y la postu­ladora de su Causa de Doctorado, ofrecen en este libro renovados enfoques y sugerentes perspectivas de acercamiento al nuevo Doctor de la Iglesia universal. Es mucho y muy valioso lo que se ha estudiado y publicado sobre él, pero este gigante del Siglo de Oro español, que ha atravesado qui­nientos años de perenne actuali­dad, guarda todavía ricos filones por explorar. A ellos se acercan estos autores, que proponen dis­tintas vías de acceso a este notable evangelizador de ayer y de hoy. Completan el libro doce de los mejores poemas presentados al Certamen de Poesía «San Juan de Ávila» que se convocó con motivo de su Doctorado. Es también este un modo original de traer a nues­tro presente a este gran santo de ágil pluma y verso fluido al expre­sar la Doctrina cristiana.
Edición preparada por Mª Encarnación González Rodríguez, Postuladora de la Causa del Doctorado de San Juan de Ávila.
«Este libro es una obra de colaboración nacida del reconocimiento, el afecto, la admiración e incluso el seguimiento del Maestro Ávila. Porque, sin duda alguna, Juan de Ávila atrae. Atrajo mucho en su tiempo, hasta el punto de ser consejero y maestro no solo de grandes santos, sino también de un buen número de hombres y mujeres entre los que escuchaban su palabra, anclada siempre en la Palabra de Dios. Atrajo entonces, ha continuado atrayendo a lo largo de los siglos que nos separan de él y atrae también hoy. En todos los artículos habla el cariño, el afecto, la admiración y, por supuesto, el conocimiento de este Doctor de la Iglesia que supo aunar en magnífica concordia la más sólida y exquisita preparación académica con la más auténtica llaneza y sencillez. Que propuso un camino de santidad a todo género de personas tanto en el recogimiento de las iglesias y los conventos como en el bullicio de las calles, los mercados o las plazas. Que acertó a poner adecuadas palabras a la única Palabra que invariablemente transmitía en su enseñanza. Que hizo oración y vida su consejo y su predicación. Que fue maestro de santos, instrumento de sonadas conversiones, orientador de conciencias y guía seguro para todo el pueblo de Dios» (M.ª ENCARNACIÓN GONZÁLEZ RODRÍGUEZ, Postuladora de la Causa del Doctorado de San Juan de Ávila).
<br/