En Los arrianos del siglo IV, la primera investigación sistemática de envergadura publicada por Newman cuando aún era un joven clérigo anglicano, aborda la génesis, el desarrollo y consecuencias de la herejía arriana, la primera gran crisis de la Iglesia después de la época de las persecuciones. Aunque la obra se sitúa casi al inicio de la evolución del pensamiento de Newman, contiene algunas importantes intuiciones que el recientemente proclamado santo retomará en sus estudios posteriores. Planteada inicialmente como una historia de los concilios, el autor terminó abordando, con un enfoque más teológico que histórico, la evolución del grupo arriano en el periodo anterior al Concilio de Nicea y la actividad de san Atanasio. A lo largo del texto Newman combina la exposición sistemática y la narración histórica, al tiempo que va estableciendo una analogía entre el siglo IV y la situación contemporánea a partir de los temas y personajes que trata, comparando en varios capítulos la Iglesia anglicana de su época y aquella de los primeros siglos. En la reconstrucción histórica del arriansmo, destaca su aportación personal acerca del origen de la herejía en Antioquía, liberando así a la escuela de Alejandría de la acusación de ser en ella donde surgió. Sostiene también que el arrianismo estaba estrechamente relacionado con la escuela aristotélica de su época y, en especial, con los sofistas. John Henry Newman (Londres 1801 – Birmingham 1890) es sin duda uno de los pensadores cristianos con mayor influencia en la actualidad, especialmente en el mundo anglosajón. Ordenado sacerdote anglicano en 1825, durante los años siguientes fue uno de los principales impulsores del Movimiento de Oxford, cuya aspiración principal era que la Iglesia de Inglaterra volviera a sus raíces católicas. Tras un largo proceso, sus estudios sobre los Padres de la Iglesia le acaban llevando a convertirse al catolicismo en 1845, siendo ordenado sacerdote católico en 1847. En 1879 fue nombrado cardenal por el papa León XIII. Considerado por muchos como uno de los inspiradores del Concilio Vaticano II, en 1991 fue declarado Venerable por san Juan Pablo II. En 2010 beatificado por Benedicto XVI y el 13 de octubre de 2019 canonizado por el papa Francisco en Roma. Encuentro ha publicado en español buena parte de su extensa obra, de la que destacan Ensayo para contribuir a una Gramática del Asentimiento, Apologia pro vita sua, Suyo con afecto y los Sermones parroquiales (ocho volúmenes).
Perder y ganar (1848) es una novela autobiográfica escrita por el beato John Henry Newman, una de las figuras religiosas y teológicas más relevantes del panorama europeo del siglo XIX, que en su búsqueda de las raíces del anglicanismo terminó por descubrir la Iglesia Católica bajo una nueva luz. Publicada poco después de su conversión, Perder y ganar nos permite adentrarnos en la fascinante personalidad de Newman a través de su protagonista, Charles Reading, y descubrir en toda su hondura las cuestiones que tuvo que afrontar este inglés extraordinario en su búsqueda de la verdad. En Perder y ganar comparece en vivo retrato --y por primera vez en la literatura-- el mundo universitario de Oxford con sus peculiaridades, sus polémicas y sus pintorescos personajes. Encantadora por su lenguaje, sorprendente por su lirismo y sus tonos satíricos, admirable por el rigor de sus ideas, Perder y ganar es ante todo una conmovedora historia de conversión que quedará para siempre en el recuerdo de sus lectores.
La traducción ha sido completamente renovada para la presente edición. Las notas explicativas, muchas de ellas también nuevas, hacen todavía más accesible la lectura de la novela al público hispanohablante.
Al igual que en el tomo anterior, los 18 textos reunidos en este último volumen de los Sermones parroquiales no formaron parte de la primera edición de 1842, previa a la conversión de Newman al catolicismo, sino que fueron incluidos en la reedición de 1968. Al ser reeditados el propio Newman pudo comprobar, con gran alegría, que podía suscribir como sacerdote católico todo lo que había predicado como clérigo anglicano.
Los sermones de este volumen abarcan diversas épocas y temáticas, aunque únicamente cuatro de ellos son posteriores al decisivo verano de 1839, en el que Newman tuvo la visión intelectual de que «después de todo, Roma tiene razón». Siendo los asunto de los que tratan muy variados --la conciencia, la verdad, la primacía de lo sobrenatural frente a la mundanidad, los milagros y la fe, el pecado, la conversión-- el tema más recurrente es el de la obediencia, pudiendo ser interpretados algunos de los sermones dedicados a ella en clave biográfica.
La idea de la Universidad es, como el propio concepto que da forma al título, una extensa y muy completa obra en la que Newman aborda tanto la enseñanza universitaria como todos los temas que en ella se tratan, prestando especial atención a las letras: la literatura inglesa, su relación con la ciencia, la religión, los clásicos? En este libro se traduce la segunda parte de esta gran aportación newmaniana a la cultura y el catolicismo, la referente a la temática universitaria, a través de sugerentes reflexiones, lecciones y ensayos.
Los sermones de esta sexta entrega de los Sermones Parroquiales fueron predicados a lo largo de seis años, entre 1836 y el decisivo 1841. La impresión es que Newman seleccionó con mucho equilibrio los veinticinco sermones de este volumen. Por un lado, se advierte una media de cuatro sermones por año, con la excepción de 1840 que cuenta con cinco, 1836 solo con tres, más un imprevisto sermón de 1831 sobre la Trinidad. Y por otro, se percibe una clara línea temática y litúrgica: los primeros siete sermones se dedican a la Cuaresma; los siete siguientes a la Pascua; los cuatro siguientes a la Ascensión; los cuatro siguientes a Pentecostés, y los tres últimos a la Trinidad. En efecto, el cristiano comienza con la áspera humillación de la Cuaresma y termina en la gloria del Dios Uno y Trino, pasando por la Muerte del Hombre-Dios, su Resurrección y su marcha al seno del Padre y al amor del Espíritu.
En estos treinta y dos sermones, John Henry Newman vuelve a poner de manifiesto su fuerza, frescura y audacia. Fuerza en la verdad de su mensaje, que es el mensaje de Dios; frescura en la palabra, con un lenguaje cercano y familiar que se aleja del empleado en sus estudios teológicos; y audacia para acercar al hombre a lo verdaderamente esencial del cristianismo. En este segundo volumen de la serie completa de los Sermones parroquiales, un clásico de la espiritualidad cristiana, Newman demuestra nuevamente la coherencia de su trayectoria, que comenzó con su ordenación como pastor anglicano en 1825 y terminó, tras su conversión en 1845, como cardenal de la Iglesia católica.
Edición revisada y anotada de la obra cumbre del Cardenal Newman. Dedicada a investigar el tipo de asentimiento propio de las certezas religiosas, y a medio camino entre el ensayo filosófico y apologético, la Gramática del asentimiento sigue siendo hoy en día una referencia original e ineludible para comprender la razonabilidad de la fe cristiana.
Calixta es una novela histórica centrada en el África de mediados del siglo III. En ella pretendió John Henry Newman retratar la vida de los primeros cristianos y sus relaciones con el mundo pagano a través de personajes que representan una familia media: Agelio, Juba Jucundus; sus amigos, la bella Calixta y Aristón, fabricantes de ídolos y objetos de culto paganos; y la decaída comunidad cristiana, con san Cipriano y los cristianos, amenazados y vigorizados por la persecución de Decio.
Pero no es la peripecia lo que interesa a Newman, sino el fenómeno de la conversión, que ya había tratado en su anterior novela autobiográfica Perder y ganar. La conversión aparece como un proceso lento y sinuoso que exige un compromiso irremediablemente personal. Al describir esta evolución interior, Newman prefigura con viveza su concepción de la conciencia y aporta una revolucionaria visión del misterio de la Iglesia, dos de sus más destacadas aportaciones al pensamiento cristiano moderno.
En este ensayo, inédito hasta ahora en español, J.H. Newman quiere responder a la acusación de escepticismo que le atribuían ciertos intelectuales. Para ello expone su característico modo de entender la razón, de modo que este breve escrito puede considerarse un documento-guía para la comprensión de uno de los conceptos clave de su obra. Newman aparece ante nosotros como un filósofo que trató de comprender la realidad concreta del creyente desde su propia vivencia intelectual, volitiva y emocional. Sin embargo, las intuiciones plasmadas especialmente en este escrito dejan constancia de un trasfondo metafísico sólido, el trasfondo que delata un sistema consistente en el que toda facultad, y señaladamente la razón, tiene su lugar, pero también sus límites.
John Henry Newman, una de las figuras religiosas más destacadas del siglo XIX, cuya influencia llega hasta nuestros días, tuvo también una exitosa carrera como novelista. Perder y ganar, su primera novela, relata la historia de Charles Reding, un joven en búsqueda de la fe en el Oxford victoriano. En gran medida autobiográfica, fue la primera obra que Newman publicó después de su conversión al catolicismo. Esta conmovedora obra se sitúa enteramente por primera vez en el mundo universitario de Oxford, y refleja con ironía, lucidez y delicadeza el ambiente social y cultural de la época, junto a la evolución intelectual y religiosa de su protagonista.
Desde su ordenación como pastor anglicano hasta su muerte como cardenal católico, la figura de Newman no deja de sorprender por la coherencia de su trayectoria. En estos Sermones parroquiales, un clásico de la espiritualidad cristiana que ha inspirado a todas las generaciones de cristianos desde su predicación entre 1825 y 1833 hasta hoy, se encuentran ya las semillas de todos los grandes temas que el teólogo inglés desarrollará durante su vida y obra. Desde la cercanía del párroco y no desde la distancia del teólogo, demostrando su enorme conocimiento de la psicología humana, de la Sagrada Escritura y de las tentaciones y pruebas que atraviesan los cristianos en el mundo, nos introduce en los temas centrales del cristianismo y la salvación. El presente volumen es el primero de la serie completa de los Sermones parroquiales. Con la fuerza, frescura y la audacia en él habituales, Newman vuelve a desafiar nuestra razón y conmover nuestro corazón.
El año 2000 celebramos el segundo centenario de la muerte de John Henry Newman, efemérides que -como todo centenario- invitaba a introducirse en el campo de la biografía. Así pues, siguiendo el gusto del propio Newman, quien en una carta escribió: «Un método mucho más perfecto que el de la Biografía corriente es, si se puede llamar así, el Método de la Correspondencia», presentamos aquí una peculiar «Autobiografía» del gran cardenal inglés, excrita por él pero concebida por otros: no hay mejor testimonio de su vida que las cartas que escribió a lo largo de la misma, acompañadas, cuando es oportuno, de las anotaciones de sus diarios. Queremos, de este modo, acercar todavía más al lector la figura de uno de los más importantes pensadores de la historia contemporánea europea.