Espero que este libro pueda transmitir algo de la alegría por la encarnación de Dios, una alegría que me ha inspirado siempre a mí mismo en la proclamación del mensaje»
Joseph Ratzinger (Benedicto XVI)
«En el gesto de las manos que bendicen se expresa la relación duradera de Jesús con sus discípulos, con el mundo. En su ascensión Él viene para elevarnos por encima de nosotros mismos y abrir el mundo a Dios. Por eso, los discípulos pudieron alegrarse cuando volvieron de Betania a casa. Por la fe sabemos que Jesús, al bendecir, tiene sus manos extendidas sobre nosotros. Esta es la razón permanente de la alegría cristiana».
Joseph Ratzinger / Benedicto XVI
El concepto de pueblo de Dios en la eclesiología de Agustín de Hipona es el concepto central de este libro, redactado como tesis doctoral por Joseph Ratzinger y que supuso su brillante entrada en el mundo de la investigación teológica. En relación con ese tema, el libro aborda también otras cuestiones: el problema del Antiguo Testamento, el de la relación entre derecho y sacramento, y la relación entre el cristianismo, el estado pagano y el paganismo como tal. En palabras del propio Ratzinger: «En la primera parte trata el doble apriori en el concepto de Iglesia agustiniano: su propia filosofía y la teología africana. En la segunda, se desarrolla el concepto de Iglesia propiamente, y no sólo en su aspecto dogmático, en lucha contra el donatismo, sino igualmente también desde la perspectiva apologética, en lucha contra el paganismo». Es este un estudio que no solo ha marcado una etapa en la investigación sobre el santo de Hipona, sino que también desarrolla algunas afirmaciones que se insertan con plena actualidad en el debate teológico postconciliar sobre el concepto de Iglesia. Un libro esencial para conocer el pensamiento sobre la Iglesia de quien hoy, bajo el nombre de Benedicto XVI, tiene la tarea de dirigir esa misma Iglesia
*****ENVIOS DESDE EL 10 MARZO 2011
La segunda parte (de un total de tres tomos) de la vida de Jesús de Nazaret por Benedicto XVI se centrará en la
madurez de Jesús, desde la entrada a Jerusalén hasta su Resurrección. Este libro recoge la parte más importante
de la vida de Jesús y, por tanto, la reflexión más esperada del Papa.
El lector tiene en sus manos la tesis de habilitación para la libre docencia que en su día redactara Joseph Ratzinger, hoy Benedicto XVI. La cuestión de si el cristiano puede pensar en una plenitud intramundana, de si sería posible algo así como una utopía cristiana, una síntesis entre utopía y escatología, puede designarse, quizás acertadamente, como el núcleo teológico del debate en torno a la teología de la liberación y a los movimientos espirituales milenaristas que empiezan a surgir en la Iglesia a partir de la figura y la obra de Joaquín de Fiore. Una cuestión íntimamente vinculada a su vez con la del papel que les correspondería a las órdenes religiosas (a las órdenes mendicantes) como portadoras de la dimensión pneumatológica de la existencia cristiana en su camino hacia una nueva época de la historia. Buenaventura las aborda ambas con maestría escolástica, con evangélica equidad y con franciscana sencillez. Su teoría del conocimiento teológico, su teología de la historia, su postura ante el aristotelismo y su concepción del pensamiento científico forman parte de los logros teológicos más importantes de todos los tiempos.
Benedicto XVI es el sucesor de Pedro, a quien Jesús encomendó la tarea de guiar la Iglesia como primer Papa. Este libro ilustrado recoge algunos fragmentos de los encuentros que el Papa tiene los miércoles en Roma con los peregrinos, que se llaman «Audiencias generales», dedicadas a los doce apóstoles y a san Pablo. El Papa nos toma de la mano y nos acompaña a descubrir quiénes eran los primeros compañeros de Cristo, cómo lo encontraron y cómo los conquistó hasta llegar a decidir que no lo abandonarían nunca. Hablando de Juan, el discípulo más joven y el predilecto, el que en la Última Cena tenía su cabeza apoyada en el hombro de Jesús, Benedicto XVI nos dice: «Que el Señor nos ayude a aprender de Juan sentirnos amados por Cristo ‘hasta el fondo’ y a entregar nuestra vida por Él». (Julián Carrón)
En los tiempos convulsos del Postconcilio una radio alemana invitó a catorce teólogos para comentar los artículos del Credo, destacando más allá de las modas teológicas el elemento permanente del patrimonio de la fe, radicando tales afirmaciones en los acontecimientos que narran los Evangelios y subrayando su significado para el individuo y para la comunidad. Muchos de aquellos hombres son hoy considerados los mayores teólogos del siglo XX, y algunos de ellos (destacadamente Joseph Ratzinger, actual Benedicto XVI) han sido llamados a servir a la Iglesia universal. Aquellas intervenciones han dado lugar a un libro de plena vigencia para comprender nuestra fe, escrito con espíritu divulgativo por los mayores especialistas. «No sólo siguen siendo válidos los motivos que llevaron a la preparación de este libro, sino que resultan cada vez más actuales. Sigue siendo urgente expresar en lenguaje actualizado y hacer accesible a todos el contenido de la fe cristiana, y más en una época en que crece rápidamente su desconocimiento y en que múltiples presentaciones, apoyadas en la fuerza de grandes medios de comunicación, distorsionan la imagen de Cristo y de la Iglesia a los ojos del gran público. Y, por otra parte, se hace necesario hoy día justificar incluso el acto del hombre creyente, la rotunda afirmación de la propia persona y de las propias convicciones profundas implicada en las breves palabras `yo creo`» (del prólogo de Mons. Alfonso Carrasco)
Este libro reúne conferencias y entrevistas que Joseph Ratzinger -hoy Benedicto XVI- realizó durante su labor como Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe. En ellas, en diálogo con la tradición e igualmente con las ideas y los acontecimientos de nuestro tiempo, se percibe con claridad su apego a lo esencial y su libertad respecto de lo contingente de la Iglesia, así como la alegría y la esperanza propias del cristianismo. Un libro que aborda con maestría los variados temas de que trata (el reformismo, la laicidad, la liturgia, el ecumenismo, el poder...), pero que ante todo testimonia el estilo cristiano de nuestro actual Pontífice.
«Hemos creído en el amor de Dios: así puede expresar el cristiano la opción fundamental de su vida. No se comienza a ser cristiano por una decisión ética o una gran idea, sino por el encuentro con un acontecimiento, con una Persona, que da un nuevo horizonte a la vida y, con ello, una orientación decisiva».
La primera encíclica de Benedicto XVI, introducida y comentada, apartado a apartado, por uno de los teólogos más próximos al Papa: el cardenal Angelo Scola, patriarca de Venecia.
Nueva edición. La vida de la Iglesia siempre ha sido rica en personas cuyo amor por Cristo definía la totalidad de su existencia. Es también el caso de Joseph Ratzinger, protagonista de excepción del cambio de milenio, quien pone de manifiesto en esta autobiografía, plena de sentido del humor, inteligencia y pasión, que toda su vida ha estado y está marcada por le lema que escogió para su escudo episcopal: «Cooperatores veritatis». Como no podía ser de otro modo, al hilo de su historia personal, el autor repasa los grandes problemas de la Iglesia en este siglo, dando una visión plena de lucidez e inteligencia. Más allá de otros libros también de corte biográfico ya publicados, generalmente en forma de entrevistas, Su Santidad Benedicto XVI abre su corazón de par en par en esta obra al lector