Nicolas Diat aborda en este libro la cuestión del final de la vida. De una manera sensible y delicada, gracias a su admirable pluma, abriendo las abadías, nos descubre cómo afrontar la muerte en un lugar tan especial. ¿Cómo morir? ¿Cómo responder a nuestros miedos? Detrás de los muros de los monasterios, los hombres de Dios pasan sus vidas preparándose para el gran paso. ¿Pueden ayudarnos a comprender el sufrimiento, la enfermedad, el dolor y la soledad de los últimos momentos? De la abadía de Císter a Lagrasse, de la Grande Chartreuse a Solesmes, Nicolas Diat recogió las confidencias de los monjes al final de sus vidas. A través de entrevistas excepcionales en ocho monasterios con los "hijos del silencio", entendemos que sus muertes son simples, felices, hermosas y agonías brillantes, aunque en ocasiones sean lentas o dolorosas. Aunque indudablemente cada una de sus experiencias es única, a la vez, los dolores de los monjes, nos resultan familiares. Son los de todos los hombres. PREMIO CARDENAL LUSTIGER, GRAN PREMIO DE LA ACADEMIA FRANCESA, 2018.
A lo largo de la historia, la expresión de los sentimientos se ha reservado al ambiente íntimo de las personas. Sin embargo, últimamente el imperio de la sensiblería ha desbordado a la razón, la cultura y la tradición, convirtiéndose en el factor decisivo de nuestras elecciones, y afectando seriamente al hombre y a la sociedad actual.
Basándose en los criterios de la bioética, este libro explora y reflexiona, sin anestesia, las consecuencias de dejarse llevar por un sentimentalismo tóxico en cuestiones relacionadas con el inicio de la vida, la gestación, el nacimiento, la enfermedad, la investigación en medicina o la muerte. Temas que nos atañen a todos y sobre los que deberíamos pensar, porque corremos el riesgo de vivirlos de una forma frívola, irresponsable e ingenua por falta de información.
Blanca López-Ibor es doctora en Medicina y especialista en Pediatría y Hematología-Oncología Pediátrica. Miembro de la Academia Pontificia para la Vida, del consejo asesor científico de la cátedra Tomás Moro y de la Fundación Lejeune y patrono de la Fundación Curarte. Profesora del máster de psicooncología de la UCM, del máster de medicina paliativa de la UAM y del máster de musicoterapia y oncología de la Fundación Edo Ed Elvo Tempia. Profesora de la Universidad CEU/ San Pablo. Ha impartido múltiples conferencias y participado en publicaciones de ámbito nacional e internacional. En la actualidad ejerce como jefe de la Unidad de Hematología y Oncología pediátrica de HM hospitales/ CIOCC en el hospital HM Montepríncipe.
El Concilio Vaticano II afirmó que "el misterio del hombre solo se esclarece en el misterio del Verbo
Encarnado" (GS 22). En efecto, acercarnos a lo que la fe cristiana dice sobre los primeros instantes de la vida del Hijo de Dios en la tierra, se convierte en una poderosa ayuda para profundizar en el misterio de los orígenes de la vida. Desde este presupuesto, el Dr. Martínez-Sellés desarrolla su argumentación científica acerca del valor incalculable de toda vida humana desde el mismo instante de su concepción.
Cuando, hace unos años, muchos países se preparaban para legislar sobre técnicas de reproducción asistida, experimentación embrionaria y células troncales, se generaron sofisticadas argumentaciones con el objetivo de debilitar el estatuto ético del embrión humano, de modo que el público se convenciera de que esos embriones no eran propiamente hablando seres humanos. Se forjó así la imagen de un embrión ficticio. El autor realiza en este libro un análisis brillante y documentado de los principales argumentos biológicos que se emplearon: la irrelevancia de la fecundación, la inexistencia de embrión en las primeras fases del desarrollo, la gemelación monozigótica, la formación de quimeras tetragaméticas, la totipotencialidad de los blastómeros, la masiva pérdida de embriones muy jóvenes. Y concluye que tales argumentos no solo son endebles y no prueban lo que afirman, sino que constituyen en su conjunto un ejemplo paradigmático de cómo una biología débil lleva necesariamente a una bioética engañosa. Gonzalo Herranz, Catedrático de Histología, Embriología general y Anatomía patológica, ha sido Profesor de Ética Médica en la Universidad de Navarra y es uno de los principales representantes de la ética profesional de la medicina en España y Europa.
La experiencia docente del autor y su detallado conocimiento del mundo actual de la bioética confieren a este texto un valor indudable. La perspectiva actual de la bioética se afronta en tres partes: fundamentos teóricos, dilemas éticos y dimensión institucional y social.
Proporciona una visión amplia y sintética del panorama actual de la bioética estructurada en tres partes. La primera aborda los fundamentos teóricos desde una perspectiva personalista en diálogo con otras fundamentaciones: principalismo, ética del consenso, de las virtudes, etc.; la segunda trata algunos dilemas éticos clave como el inicio de la vida, el aborto, la reproducción asistida, eutanasia, voluntades anticipadas, etc.; y, la tercera, la dimensión institucional y social: justicia, ecología, feminismo. La experiencia docente del autor y su profundo conocimiento del mundo actual de la bioética confieren a este texto un valor indudable.
Francisco Javier León es un reconocido especialista internacional en Bioética sobre la que ha publicado numerosos artículos y libros. Actualmente es Profesor del Centro de Bioética de la Universidad Católica de Chile, Presidente de la Sociedad Chilena de Bioética y Presidente de la Federación Latinoamericana de Instituciones de Bioética (FELAIBE).
El libro presenta de modo serio, pero accesible, los problemas bioéticos. Con un lenguaje claro y preciso, con dibujos y diagramas explicativos, el autor ofrece una bioética para todos.
Los problemas de la bioética no son solo, en la actualidad, un coto privado para especialistas. Suscitan interés en diputados, catedráticos, médicos, periodistas, empleados, amas de casa y estudiantes; la bioética hoy es para todos. Quien ese sensible al valor de la vida no puede evitar las preguntas cruciales: ¿Es el hijo un don que se acoge o un producto que se fabrica? ¿Todo lo que es técnicamente posible es también moralmente admisible? ¿El fin bueno de curar una enfermedad como el Alzheimer justifica la experimentación con embriones humanos y su destrucción? ¿Por qué no poner fin al dolor con una buena muerte?
El libro presenta de modo serio, pero accesible, los problemas bioéticos. Con un lenguaje claro y preciso, con dibujos y diagramas explicativos, el autor ofrece una bioética para todos.
2ª edición actualizada
Texto completo y sintético de los grandes temas de bioética, desde los fundamentos teóricos a las cuestiones más actuales como la clonación, las células madre, etc.
Este texto aborda todos los temas que plantea la bioética, y lo hace con claridad, competencia científica, profundo conocimiento de la doctrina del Magisterio de la Iglesia y de las fuentes normativas nacionales e internacionales.
El manual está divido en dos partes: la primera trata cuestiones de ´Bioética general y fundamental´, junto con indicaciones sobre el origen histórico de la ciencia bioética. La segunda, ´Cuestiones particulares´, analiza los temas de mayor actualidad e interés: la ingeniería genética, los transplantes de órganos, el SIDA, la clonación, las células madre, la inseminación artificial, la experimentación con animales, la experimentación con embriones, etc.
Acercamiento multidisciplinar a una realidad científica que tanto puede importar y afectar a la dignidad de la persona en un futuro muy próximo y ya actual.
Asistimos en los últimos años a múltiples acontecimientos o simples noticias sobre posibles descubrimientos revolucionarios que habrían de alcanzar, o pretenden haberlo ya conseguido, hasta los secretos más recónditos del origen de la vida, incluso de la humana.
El año 2005 el Consejo Pontificio para la Pastoral de la Salud eligió el Genoma Humano como punto de mira de la Conferencia Internacional celebrada en la Ciudad del Vaticano en el mes de noviembre. El Santo Padre Benedicto XVI, en la audiencia que concedió a los participantes, recalcó el principio irrenunciable de cualquier verdadero progreso: reconocer la presencia de la altísima dignidad humana en todas las fases de la vida.