Este libro viene a ser una reedición corregida del Nuevo Testamento que, unido al trabajo del Profesor F. Cantera, apareció en la Sagrada Biblia de la BAC Maior (n.10), pues conserva de él muchos elementos; pero cerca de veinte mil cambios y correcciones hacen que con más verdad deba considerarse como «edición nueva», como otra edición.
Sobre este nuevo texto el Profesor Iglesias dice: «En la traducción he tenido interés en asemejar más el orden de las nuestras palabras al orden en la frase del texto griego; dicho de otra manera: mayor literalidad, aunque eso suponga dar más campo al hipérbaton. Esa mayor literalidad deseo que sirva de mayor ayuda para los primeros destinatarios de esta obra (estudiantes de Teología y del Nuevo Testamento); en contrapartida, al intentar corregir inexactitudes o imperfecciones anteriores, habré cometido otras nuevas; además de que nunca queda uno satisfecho... He revisado las referencias bíblicas, que ocupan ahora su espacio natural antes de las notas, al acabar el texto de cada página; así serán un poco más útiles para quien desee usarlas, y no rompen la secuencia de un capítulo a otro» (Prólogo).
«La dificultad aparece con toda nitidez si aceptamos que la Sagrada Escritura es palabra de Dios expresada en palabras humanas. El obstáculo del Nuevo Testamento no es sólo el que ofrecen unos escritos de hace dos mil años, redactados en griego tal como los tenemos, aunque pensados por semitas, sino que, si Dios se comunica en esos escritos, nos comprometen, y los matices del lenguaje pueden ser también reveladores de Dios; por tanto, no despreciables. Un exegeta bíblico —y, en su medida, un traductor bíblico— no debe menospreciar ningún aspecto del lenguaje humano en el que se transmite la revelación del Dios vivo y verdadero. No debe ser el traductor quien dice, sino que ha de disimular su propio estilo, y sus gustos y prejuicios, a fin de llegar a ver qué pensaba y quiso decir el escritor humano (y, detrás de él, Dios) al redactar el texto sagrado, para poder decirlo simplemente en otra lengua» (Introducción).
Contiene índice analítico, glosario de términos y mapas.
Siguiendo el orden alfabético castellano, el presente libro reúne los comentarios breves del autor sobre algunas palabras hebreas del Antiguo Testamento, indicando matices o detalles de su uso que no suelen captarse a primera vista. Se trata de un pequeño muestrario de vocablos elegidos un poco al azar, quizás no llamativos ni especialmente ricos para la teología o la vida espiritual, pero que pueden ser de gran utilidad para conocer mejor la Palabra de Dios tal como se escribió en los libros bíblicos que resultan más lejanos.
Manuel Iglesias es sacerdote y pertenece a la Compañía de Jesús. Estudió en el Pontificio Instituto Bíblico de Roma, donde también impartió clase. En Madrid trabajó en la revista Reino de Cristo y en gran número de obras apostólicas con una inmensa labor de dirección espiritual. Su prestigiosa y cuidada traducción crítica al español de la Sagrada Biblia, realizada junto a Francisco Cantera, le ha valido un renombre internacional en el campo científico.