Gran parte de los cristianos se encuentran hoy en un estado de “analfabetismo religioso”, según una expresión bien gráfica de Benedicto XVI, que se corrige no solo mediante la enseñanza espiritual: es necesaria también una alfabetización litúrgica.
Cincuenta años después del Concilio Vaticano II todavía quedan en él riquezas por descubrir. Su reforma litúrgica no pretendía simplemente cambiar unos textos, sino más bien renovar una mentalidad: hacer de la Misa el centro y la raíz de la vida cristiana. El autor ofrece en estas páginas una ayuda para lograrlo, partiendo de cada palabra y de cada gesto de la celebración.
Juan José Silvestre Valor (Alcoy, Alicante, 1973) es licenciado en Derecho por la Universidad de Valencia y en Historia de la Iglesia por la Pontificia Universidad de la Santa Cruz, donde es Profesor de Teología Litúrgica. Sacerdote, Doctor en Liturgia por el Pontificio Istituto Liturgico Sant’Anselmo de Roma, fue consultor del Ufficio Celebrazioni Liturgiche del Sommo Pontefice y en la actualidad es consultor de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos.