Edición preparada por Juan Antonio Martínez Camino.
Colaboradores: Joaquín Martín Abad, Luis Manuel Velasco Sáinz, Ana Patricia Moya Rueda, María Benito Sánchez, Mónica Rascón Risco, Isabel Angulo Bujanda, Maria Dolores Fúster Sabater, César García De Castro Valdés, Daniel Alberto Escobar Portillo, Alberto Fernández Sánchez
San Isidro Labrador fue canonizado en 1622. Este libro es fruto duradero y sabroso del Año Santo de 2022-2023 que conmemoró el acontecimiento.
¿Por qué se da culto a los santos y se cultiva su memoria? ¿Por qué una de las primeras canonizaciones después de Trento fue pensada para un campesino madrileño venerado ya desde siglos por el pueblo cristiano? ¿Quién era aquel hombre? ¿Cuál su apariencia y procedencia? ¿Se conserva incorrupto? ¿Cómo ha sido y es venerado, especialmente en Madrid?
Expertos en teología, historia y ciencias forenses responden de modo profundo y nuevo. Aplican técnicas actuales al cuerpo del Santo que confirman lo básico de la tradición, ofrecen nuevos datos sobre la edad de san Isidro y desvelan su rostro verdadero. Avanzan en el establecimiento de su modo de vida y del año de su muerte. Publican estudios originales sobre su arca funeraria medieval y sobre el Códice de los milagros. Ofrecen una crónica literaria y gráfica de las celebraciones del Año Santo.
El autor recoge dieciocho ejemplos del siglo XXI de jóvenes de todo el mundo que han sabido vivir y morir con un corazón generoso, con Dios y con los demás.
“Tenemos que atrevernos a ser distintos, a mostrar otros sueños que este mundo no ofrece, a testimoniar la belleza de la generosidad, del servicio, de la pureza, de la fortaleza, del perdón, de la fidelidad a la propia vocación, de la oración, de la lucha por la justicia y el bien común, del amor a los pobres, de la amistad social” (Francisco, Christus vivit, 36).
¿Existen jóvenes así en nuestros días? El autor recoge dieciocho ejemplos del siglo XXI que así lo testimonian, chicos y chicas de todo el mundo que han sabido vivir y morir con un corazón generoso, con Dios y con los demás.
Nada más que la verdad
«Estas páginas contienen un testimonio personal sobre la grandeza de un hombre apacible, de un fino investigador, de un cardenal y de un papa que ha intervenido activamente en la historia de nuestro tiempo. Pero son también un relato de primera mano que intenta proyectar luz sobre algunos aspectos incomprendidos de su pontificado y describir desde dentro el verdadero mundo vaticano» Georg Gänswein «Nadie ha conocido y apoyado más a Benedicto XVI durante todo su pontificado y en la etapa de emérito que su fiel secretario particular, el arzobispo Georg Gänswein. Solo le he pedido una garantía en el transcurso de este trabajo: la de ser totalmente sincero». Saverio Gaeta La que ha existido entre Joseph Ratzinger y Georg Gänswein ha sido una larga y significativa relación de profundo respeto y estima recíproca, desde que, en 2003, el futuro Papa nombró secretario personal al joven sacerdote alemán. Y tras la elección del cardenal Ratzinger como Benedicto XVI, don Georg vivió todavía más constantemente a su lado como su más estrecho colaborador, pero también confidente y consejero, acompañándole durante el pontificado y en el tiempo que siguió a la histórica renuncia del año 2013. Hoy, tras la desaparición del Papa emérito, ha llegado el momento de que el actual prefecto de la Casa pontificia cuente su propia verdad con respecto a las aviesas calumnias y las oscuras maniobras que han intentado, en vano, proyectar sombras sobre el magisterio y sobre las acciones del Pontífice alemán, y de dar a conocer así, por fin, el verdadero rostro de uno de los más grandes protagonistas de los últimos decenios, injustamente denigrado con excesiva frecuencia por los críticos como Panzerkardinal o «Rottweiler de Dios». Un relato auténtico y genuino en el que, ayudado por la experta pluma del vaticanista Saverio Gaeta, monseñor Gänswein propone la autorizada reconstrucción de un particularísimo período de la historia de la Iglesia católica, afrontando asimismo los interrogantes sobre acontecimientos enigmáticos, como el dosier del Vatileaks y los misterios del caso Orlandi, el escándalo de la pedofilia y las relaciones entre el Papa emérito y su sucesor, Francisco. De ahí brota el intenso testimonio sobre la grandeza de un hombre, un cardenal, un Papa que ha intervenido activamente en la historia de nuestro tiempo y que emerge aquí como un faro de competencia teológica, claridad doctrinal y sabiduría profética.
José es el padre que falta en la actualidad. Él mismo acogió, protegió y alimentó al mismo Dios y a su madre, María.
«Comunícase Dios con tantas veras de amor, que no hay afición de madre que con tanta ternura acaricie a su hijo», afirma san Juan de la Cruz. Es este uno de los hilos más poderosos que recorren, de manera furtiva, la obra de nuestro místico: la infinita ternura de Dios-madre. Dicha ternura es la atmósfera que se respira en su prosa y en sus versos. Y a su vez, está íntimamente conectada con otra palabra mágica que es «atención»: clave de la experiencia contemplativa más genuina. Esa que Juan de la Cruz ha condensado en dos palabras seductoras: atención amorosa. La experiencia de Dios no es solo una cuestión de «atención plena» (o mindfulness). Es mucho más. Es atención «amorosa». Es atención a una Presencia. A una Presencia infinita de amor y de vida.
Cristo no vino a llamar a los santos, sino a hacer santos a los débiles, a los torpes y a los pecadores. Por eso los santos no son solo modelos imitables de santidad, sino recordatorios del poder de la gracia de Dios, mayor que cualquier defecto humano.
No pocos santos tuvieron que luchar contra tentaciones muy similares a las que sufrimos hoy. Para ejemplificarlo, Goodier acude a la historia de un mercenario adicto al juego, de un adolescente repudiado por los suyos, de una mujer noble de mala reputación y un noble misionero que ve fracasar muchos de sus esfuerzos, un capellán real que escapa de la horca, un hereje hedonista y mujeriego que llegará a ser uno de los más grandes teólogos de la Iglesia católica, y otras almas imperfectas que se ven perfeccionadas por el dolor y la enfermedad.
Porque no hay nadie tan pecador que no pueda encontrar un pecador mayor entre los santos.
El teólogo suizo Hans Urs von Balthasar (1905-1988) fue un autor muy prolífico, con una obra tan vasta y de contenido tan amplio que no es fácil encontrar, ni en la producción del mismo Balthasar, ni en la literatura sobre él, un texto que exponga de una manera suficientemente completa y global —a la par que sintético y accesible a los lectores que no conocen su obra— las fuentes y la estructura cardinal de su pensamiento. Este libro quiere introducir al lector en el pensamiento teológico de von Balthasar a partir de su Trilogía (Gloria, Teodramática y Teológica), considerada su obra cumbre y que recoge en buena medida su producción anterior. Se trata de mostrar el talante general de su persona y su vida, exponer las líneas esenciales de su pensamiento teológico y ofrecer algunos criterios fundamentales para su lectura y comprensión.
A este volumen le seguirá un segundo (Hans Urs von Balthasar II. Aspectos centrales de su Trilogía), complementario aunque independiente, en el que, en un segundo nivel de profundidad, se expondrán las líneas teológicas centrales de la Trilogía, a fin de dar a conocer las principales aportaciones en las diversas áreas de la ciencia teológica de uno de los autores más relevantes del pensamiento católico del siglo XX.
«Nos encontramos ante una magnífica introducción al pensamiento balthasariano cuyo valor más significativo es otorgar una visión orgánica de toda la obra del pensador suizo» (Del prólogo de Ángel Cordovilla).