Esta obra es uno de los textos más populares del gran teólogo Romano Guardini. Fue publicada por primera vez en 1922, aunque la primera edición completa vio la luz once años más tarde, en 1933. La publicación de Los signos sagrados debemos enmarcarla en la docencia pastoral del teólogo de Maguncia. Se trata de su actividad con los jóvenes universitarios en el castillo de Rothenfels, auténtico centro evangelizador desde 1920 y que, durante veinte años, fue la tribuna desde la cual Guardini formó en la vida cristiana a las jóvenes generaciones, a partir de sus diálogos sobre el sentido teológico y espiritual de la sagrada liturgia.
El profesor Guardini (1885-1968) es una figura compleja. A pesar de haber nacido en Verona (Italia), desarrolló toda su labor pastoral y magisterial en Alemania. Ordenado sacerdote en 1910 en Maguncia (su diócesis), pronto empezó su labor tanto en el campo de la pastoral con la juventud como en el universitario. No se puede decir de él que fuera un liturgista, pero pocos como él han despertado en muchos el interés por la liturgia, para conocerla en su sentido más profundo, y por la celebración de la misma, a fin de vivirla como corazón de la vida cristiana. Este cuaderno reúne una trilogía de textos: sobre el domingo (cómo nos enfrentamos hoy con el mandato de santificar las fiestas), sobre la oración (unos ejemplos sobre qué nos mueve a rezar y cómo) y sobre el sentido de la liturgia (para ver cómo entendía la liturgia Guardini y como quería que fuera entendida).
Este Cuaderno es el n. 100. Y recupera -deliberada y gustosamente- este texto del hondo profeta del revivir litúrgico del siglo XX, Romano Guardini. El ayer y el hoy, en él se unen. Un texto indispensable en cualquier biblioteca litúrgica
Obra escrita a manera de "ensayo", desde la cual Guardini nos ayuda a erflexionar sobre la naturaleza simbólica de la liturgia y nos incita a valorar cómo en el acontecer del culto podemos experimentar la realidad santa de Dios.