Si le pudieras hacer una pregunta al Papa Francisco, ¿qué le preguntarías?
Los niños, igual que los adultos, tienen preguntas e inquietudes, pero raramente se les da la oportunidad de manifestar lo que les preocupa y de hacer las grandes preguntas que se encuentran en lo profundo de su corazón. En Querido Papa Francisco, el Papa Francisco les da esa oportunidad y celebra su profunda espiritualidad, respondiendo directamente a las preguntas de niños de todo el mundo. Algunas son divertidas, otras son serias. Y algunas discretamente te romperán el corazón. Pero todas vienen de niños que merecen conocer y sentir el amor incondicional de Dios.
El día 22 de mayo de 1965, la Congregación General 31 de la Compañía de Jesús eligió al P. Pedro Arrupe Gondra como vigésimo octavo Prepósito General de la Compañía. Comenzaba ese día un generalato enormemente fecundo para la Compañía y para la Iglesia, inmersa entonces en las sesiones finales del Concilio Vaticano II. Entre las aportaciones del P. Arrupe, una de las más significativas fue su relectura del carisma ignaciano, en profunda fidelidad al mismo y con una acusada sensibilidad hacia los tiempos nuevos.
Este libro recoge cinco documentos clave de la síntesis del carisma ignaciano hecha por el P. Arrupe: «Inspiración trinitaria del carisma ignaciano», «La misión apostólica, clave del carisma ignaciano», «Servir solo al Señor y a la Iglesia, su esposa», «El modo nuestro de proceder» y «Arraigados y cimentados en la caridad». Además del texto mismo de los escritos arrupianos, las introducciones, esquemas, notas e índices complementan el texto y hacen accesibles las reflexiones del P. Arrupe para la oración y meditación personal y comunitaria, el estudio e investigación, y como posible punto de partida de renovadas lecturas del carisma ignaciano para nuevos tiempos y nuevas generaciones.
Este libro es un merecido homenaje al P. Arrupe al cumplirse el cincuenta aniversario de su elección como General de la Compañía de Jesús; el homenaje será completo si consigue estimular a numerosas personas, inspiradas en el carisma ignaciano y por la persona del P. Arrupe, para hacer del sensus Christi su propio modo de ser y proceder.
Darío Mollá Llácer, SJ (Alcoy, 1949), después de desempeñar distintos servicios en la Compañía de Jesús en educación, acción social, formación y gobierno, se ha dedicado en estos años a reflexionar sobre la espiritualidad ignaciana. Sus obras más significativas al respecto son: Horizontes de vida. Vivir a la ignaciana (Cristianismo y Justicia, 2009), Espiritualidad para educadores (Mensajero, 2010), Espiritualidad en la acción social (Mensajero, 2011).
Entre los escritos de san Ignacio, las Constituciones ocupan el segundo lugar en importancia, después de los Ejercicios Espirituales. El impacto que las Constituciones siguen teniendo en los procesos de admisión, formación, organización, conservación y envío (misión) de las formas de vida apostólica no se puede estimar suficientemente: revolucionaron la vida religiosa medieval y la introdujeron en la Edad Moderna.
El presente libro permite acceder directamente a lo nuclear de la experiencia espiritual de Jorge Mario Bergoglio, el papa Francisco, primer papa jesuita de la historia. En él podemos encontrar las claves que configuran el hacer y el creer de un hombre profundamente marcado por la espiritualidad ignaciana.
Con su característico estilo directo desgrana el Papa en estas reflexiones sus convicciones sobre los Ejercicios Espirituales: el magis, los deseos, la creatividad, el conocimiento de sí mismo, la Primera semana, el discernimiento… y los aplica a la vida apostólica, concretándolos en su experiencia de vida en la Compañía de Jesús, pero con afirmaciones válidas para todos los cristianos, en las que se pueden reconocer los temas que están marcando su papado.
Es este un libro clave para entender al papa Francisco, pues en él se recogen meditaciones propuestas en tandas de Ejercicios, en retiros o en reuniones de temática espiritual dirigidas a jesuitas y religiosos, durante su tiempo como Provincial de la Compañía de Jesús. A través de ellas descubrimos un hombre enraizado profundamente en la espiritualidad ignaciana y volcado en la misión, y podemos acceder a su modo de entender el servicio de la autoridad.
El hombre es un ser tentado; para humanizarse, debe renunciar a los sueños y a las ilusiones de omnipotencia, debe aprender el arte de la resistencia en el espacio de la libertad y, por consiguiente, ser consciente de la prueba como experiencia esencial a su libertad: ¡sin tentación no hay libertad!
Enzo Bianchi analiza las tentaciones a las que se enfrentó Jesús, para descubrir su esencia y mostrar lo que tienen de común con las que nos salen al encuentro a nosotros.
Para los latinos, sabiduría (sapientia) guarda relación con saborear (sapere). Para los romanos, sabio es quien es capaz de saborearse a sí mismo, quien se gusta, quien está reconciliado consigo mismo y con su vida, quien vive en armonía con su propio yo. Sabio es también quien está en condiciones de saborear las cosas, quien reconoce su verdadero sabor.
Iluminados con esta perspectiva, presentamos este libro que reúne lo mejor del pensamiento sapiencial de Anselm Grün e ilustra a través de algunos términos principales su búsqueda del sentido del todo. De este modo se hace patente y reconocible no solo la gran riqueza, sino también la coherencia interior del pensamiento que encierran sus textos. Son tan profundamente espirituales como cercanos a la vida
Todo el mundo quiere ser feliz y, a ser posible, de inmediato y para siempre. Despacio, despacio, recomienda Anselm Grün. La verdadera felicidad no se alcanza por medio de las prisas y el ajetreo. No es una meta hacia la que hay que abrirse paso. Se trata más bien de un regalo. No la encontramos en este o aquel lugar, sino en nosotros mismos, en medio de la vida diaria. Es más que un placer; es alegría de vivir. Solo el olvido de nosotros mismos nos hace felices: amar y ser amados, vivir con sosiego y serenidad, no aferrarnos a nada, estar atentos a lo que nos rodea, sentirnos agradecidos por lo que nos acontece. Esta es la avenida que conduce a la felicidad.
Este libro pretende hablar de la verdad del dolor, pero no como podría hacerlo un filósofo, sino más bien un creyente cristiano. En efecto, la referencia continua que mantendremos entre nuestras manos, la estrella polar en que se fijarán nuestros ojos será siempre la Palabra de Dios. Esta Palabra no nos revela de manera integral el misterio del dolor, no hace desaparecer por completo las tinieblas ni cancela el drama, pero si abre resquicios luminosos y, sobre todo, confía el sufrimiento y el mal a Otro que está con nosotros, pero que está también por encima de nosotros.
He aquí una de las primeras experiencias de Ejercicios Espirituales a la luz de la Palabra de Dios propuestos a un grupo de obispos de la región de Emilia (Italia) por el entonces «simplemente» padre Carlo Maria Martini. A diferencia de otros ejercicios sobre los Evangelios, aquí se hace una referencia menos constante al texto de los Ejercicios ignacianos, y están más dirigidos a profundizar en las exigencias del verdadero seguimiento de Jesús nuestro Señor, siguiendo el itinerario del apóstol, del discípulo y del catecúmeno, bien ilustrado por el Evangelio de Marcos.
Gran parte de la experiencia recibida del Espíritu para la lenta configuración del carisma ignaciano se contiene en las Constituciones de la Compañía de Jesús. Es todavía un texto en el que hay que seguir profundizando para ir enriqueciendo nuestra comprensión de la espiritualidad ignaciana. No es tarea fácil. El P. André de Jaer, SJ nos ofrece un libro que integra el conocimiento histórico y el rigor textual junto con la rica experiencia de haber acompañado numerosos procesos personales de crecimiento en Cristo según la propuesta del Instituto de la Compañía de Jesús. En un lenguaje claro y directo y en un tono «sapiencial» se comenta toda la sabiduría del maestro Ignacio para ayudar a formar el sujeto ignaciano más apto para trabajar en la Viña del Señor.