Creer a alguien, fiarse de su persona, exige un mínimo de garantías. Nadie puede obligarnos. Si lo hago, es porque considero a esa persona digna de ser creída. Y luego me creeré lo que me diga. Todo acto de fe es fruto de una razonable confianza, y de un razonable ejercicio de la libertad. A los amigos de verdad es fácil creerles. Para creer en Jesucristo es necesario conocer los motivos de los creyentes y decidir con libertad. Partiendo de la confianza humana, el autor muestra el camino de la fe en Jesucristo, cómo encontrarse con Él hoy, y cómo repercute ese encuentro en la propia felicidad.
Alfredo Alonso-Allende (Getxo, 1946) es doctor en Ciencias Químicas y biólogo. Ha sido profesor universitario e investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas. Ha trabajado en la Universidad de Bristol y en la Harvard University de Salzburgo. Fue Premio de Investigación Juan de la Cierva Codorniú. Ha publicado varios libros, entre otros, La amistad del cristiano, en esta misma colección.
La pobreza de espíritu, la primera de ellas, es según el autor la clave de la vida espiritual, de todo camino de santidad y de toda fecundidad. Todas ellas contienen una sabiduría luminosa y libertadora, pero cuesta comprenderlas y practicarlas. En este libro, Jacques Philippe ofrece una sugerente reflexión sobre cada una de ellas, y ayuda a entender cómo contienen toda la novedad del Evangelio, toda su sabiduría y su fuerza para transformar el corazón del hombre y renovar el mundo. Jacques Philippe es miembro de la Comunidad de las Béatitudes, en la que ha desempeñado importantes responsabilidades (consejo general, responsable de los sacerdotes y seminaristas, formación de los pastores). Ordenado sacerdote en 1985, predica retiros en Francia y en el extranjero. Entre sus obras, cabe destacar Tiempo para Dios; La libertad interior; La paz interior; En la escuela del Espíritu Santo; Llamados a la vida; La oración, camino de amor y Si conocieras el don de Dios, todos ellos publicados en Rialp.
Efectos de los sacramentos en el alma, y medios imprescindibles para conservar la gracia de Dios: la oración, la renuncia y los métodos ascéticos.
Conjunto de diez meditaciones, centradas en otros tantos rasgos característicos de la existencia cristiana de hombres y mujeres adultos, profesionales en el amplio sentido de la palabra.
El subrayado realismo alude directamente a la visión correcta de sí mismo y de su entorno que ha de mantener cualquier laico en su lucha por la santidad, por ser fiel a Jesucristo.
Libro quizá particularmente oportuno para ser leído y meditado en días de retiro.
Siguiendo el orden alfabético castellano, el presente libro reúne los comentarios breves del autor sobre algunas palabras hebreas del Antiguo Testamento, indicando matices o detalles de su uso que no suelen captarse a primera vista. Se trata de un pequeño muestrario de vocablos elegidos un poco al azar, quizás no llamativos ni especialmente ricos para la teología o la vida espiritual, pero que pueden ser de gran utilidad para conocer mejor la Palabra de Dios tal como se escribió en los libros bíblicos que resultan más lejanos.
Manuel Iglesias es sacerdote y pertenece a la Compañía de Jesús. Estudió en el Pontificio Instituto Bíblico de Roma, donde también impartió clase. En Madrid trabajó en la revista Reino de Cristo y en gran número de obras apostólicas con una inmensa labor de dirección espiritual. Su prestigiosa y cuidada traducción crítica al español de la Sagrada Biblia, realizada junto a Francisco Cantera, le ha valido un renombre internacional en el campo científico.
«Dos deseos bastante cercanos, como dos alas invisibles, elevan el alma humana por encima del resto de la naturaleza: el deseo de la inmortalidad y el de la justicia» (Soloviev)
Presentación, traducción y notas de Fernando Simón Yarza.
«Las Meditaciones que aquí presento de na selección de los salmos 52 a 150 son pensamientos de un laico, de un cristiano creyente en la Revelación y de un filósofo creyente en la razón; pensamientos que no reivindican competencia alguna y que no aspiran a convencer a nadie, aunque a mí me fueron de ayuda en la apropiación orante de los salmos. Entran en ellos pensamientos de intérpretes anteriores, la tradición de la apropiación cristiana, así como lo que viene a denominarse "estado de la ciencia" En este "meditar día y noche" (salmo 1), uno se encuentra con personas que piensan de modo similar o que, sobre la base de su modo de pensar, están dispuestos, por su parte, a apropiarse de este punto de vista. Lo cual significa que, en realidad, he escrito para mí mismo» [De la Introducción]
Robert Spaemann (Berlín, 1927) es uno de los grandes filósofos alemanes de nuestro tiempo. Estudió Filosofía, Ro­manística, Historia y Teología en Müns­ter, Múnich, París y Friburgo (Suiza). Ha sido profesor en las universidades de Stuttgart, Heidelberg y Múnich, y es doctor honoris causa por las universida­des de Navarra, Friburgo, Santiago de Chile y Catholic University of America (Washington). Es miembro, entre otras instituciones, de la Pontificia Academia para la Vida. Autor de obras traducidas a varios idiomas, entre ellas destacan Feli­cidad y benevolencia (1991) y Personas (2000). Recientemente, han sido tradu­cidos al español sus libros: El rumor in­mortal: la cuestión sobre Dios y la ilusión de la Modernidad (2010); Rousseau: ciu­dadano sin patria (2013), y Sobre Dios y el mundo: una autobiografía dialogada (2014).