Sinopsis: El siglo IV de nuestra era conoció una de las mayores crisis doctrinales que han tenido lugar en la historia de la Iglesia: la crisis arriana, que tuvo su origen en Alejandría. Por esta razón, la vida y la obra de san Atanasio (295 - h. 373), como obispo y como escritor, estuvo caracterizada en gran medida por su oposición doctrinal al arrianismo, lo cual le valió el destierro en cinco ocasiones. Los Discursos contra los arrianos –su obra dogmática más importante– destacan por la riqueza de información que encontramos en ellos y por el análisis preciso de la doctrina arriana, que Atanasio rebate punto por punto, para demostrar la plena divinidad del Hijo, idéntica a la del Padre, según la fe definida en el Concilio de Nicea. El tono de la discusión es firme y decidido –en algunos momentos incluso apasionado– y ha de entenderse a la luz de las circunstancias históricas y eclesiásticas que nuestro obispo tuvo que vivir. Estos Discursos contribuyeron significativamente a la reflexión teológica posterior sobre la Trinidad que llevaron a cabo los Padres capadocios y san Agustín. La presente traducción es la primera edición íntegra de la obra que se publica en lengua castellana.
Nei tre testi, Atanasio risponde punto per punto alla dottrina eretica di Ario e si dedica ad un esame puntuale della Thalia, la principale opera dogmatica di Ario.
Viva testimonianza del Concilio di Nicea, difensore del Magistero contro l'eresia ariana.
Il percorso per l'enunciazione dello Spirito Santo nel Simbolo Niceno-Costantinopolitano.
Lo Spirito Santo "è il Signore e da la vita, e procede dal Padre; con il Padre e il Figlio è adorato e glorificato, e ha parlato per mezzo dei profeti" (Simbolo Niceno-Costantinopolitano). Questo pronunciamento fu preparato dall'opera di numerosi Padri: fra essi spicca Atanasio d'Alessandria che, nelle sue lettere a Serapione affronta per primo la questione.
Sinopsis: La "Encarnación del Verbo" forma la segunda parte de una obra más amplia que incluye también el tratado "Contra los paganos" (publicado en esta colección con el nº 19), y que Atanasio escribió durante su primer destierro en los años 335-337.
Dirigido a un mundo todavía sin evangelizar, el tratado apunta a lo esencial, presentando una exposición orgánica de la fe cristiana, que asume como punto de referencia la manifestación del Verbo en la carne.
El Verbo -dice en síntesis Atanasio- se ha revelado en un cuerpo para restituir al hombre, creado de la nada y formado a imagen de Dios, la incorruptibilidad y el conocimiento del Padre. Es decir, que mediante su cuerpo, el Verbo paga la deuda del hombre pecador y vence la muerte, volviendo a reconquistar el don de la inmortalidad que transmite a todo el género humano.
Se trata de un escrito profundo y vigoroso, que tuvo una gran difusión en la antigüedad y que todavía hoy sigue siendo de gran actualidad.