Il testo, proposto in una nuova edizione coedita con Jaca Book, è un classico della teologia del Novecento. Hans Urs von Balthasar vi esprime i fondamenti della dottrina cristiana.
Introduzione e commento alla Enciclica Redemptoris Mater di Giovanni Paolo II.
Raccolta di meditazioni sul cristianesimo.
Tratta da una collezione di regole monastiche curate dal teologo di Basilea, questa introduzione alle regole di san Basilio risulta un sostegno alla convinzione che tutti i cristiani sono chiamati alla santità.
Lo scopo di queste brevi meditazioni è chiaro per il lettore: si tratta di liberare il rosario da una specie di ristrettezza e alimentarlo con la pienezza dell’idea e dell’opera salvifica di Dio per il mondo.
L’essenza e l’azione di Maria in tutto questo è la mediazione: tra Dio e il mondo, tra Cristo e la Chiesa, tra spirito e carne….Ella si trova a tutti i crocevia, per indicare la strada.
Hans Urs von Balthasar nació en Lucerna (Suiza) en 1905. Realizó estudios de música, filología germánica y filosofía en Viena, Berlín y Zurich. En 1929 entró en la Compañía de Jesús. En su formación teológica son decisivas las relaciones con Erich Przywara y Karl Barth, pero sobre todo destacan dos encuentros en particular: con Henri de Lubac, su maestro en teología, y con Adrienne von Speyr, junto a la que comenzó una experiencia de vida religiosa centrada en una visión trinitaria de la vida cristiana y en una presencia activa en el mundo. Al mismo tiempo funda y dirige la editorial Johannes Verlag, que se propone publicar los escritos de los Padres de la Iglesia y de algunos teólogos que situaron como centro de su reflexión a Cristo. Su pensamiento teológico está dominado por la idea de que sólo el amor es creíble. Sobre este fundamento von Balthasar construyó su vasta obra teológica cuya forma más acabada se encuentra en la trilogía Gloria, Teodramática y Teológica. En reconocimiento a su persona como punto de referencia para toda la teología católica, fue nombrado cardenal por el papa Juan Pablo II pocos días antes de su muerte, acaecida el 26 de junio de 1988.
Hans Urs von Balthasar nació en Lucerna (Suiza) en 1905. Realizó estudios de música, filología germánica y filosofía en Viena, Berlín y Zurich. En 1929 entró en la Compañía de Jesús. En su formación teológica son decisivas las relaciones con Erich Przywara y Karl Barth, pero sobre todo destacan dos encuentros en particular: con Henri de Lubac, su maestro en teología, y con Adrienne von Speyr, junto a la que comenzó una experiencia de vida religiosa centrada en una visión trinitaria de la vida cristiana y en una presencia activa en el mundo. Al mismo tiempo funda y dirige la editorial Johannes Verlag, que se propone publicar los escritos de los Padres de la Iglesia y de algunos teólogos que situaron como centro de su reflexión a Cristo. Su pensamiento teológico está dominado por la idea de que sólo el amor es creíble. Sobre este fundamento von Balthasar construyó su vasta obra teológica cuya forma más acabada se encuentra en la trilogía Gloria, Teodramática y Teológica. En reconocimiento a su persona como punto de referencia para toda la teología católica, fue nombrado cardenal por el papa Juan Pablo II pocos días antes de su muerte, acaecida el 26 de junio de 1988.
Massimo il Confessore (580-662) è il teologo che porta a sintesi e pienezza l'opera dei padri della Chiesa. Dopo un'accurata e brillante carriera a Bisanzio si fece monaco a Crisopoli, l'attuale Scutari. Successivamente si trasferì in Africa, dove contrastò la dottrina dell'unica volontà e dell'unica energia in Cristo, prese parte al Concilio lateranense del 649 che si oppose al monotelismo sostenuto dall'imperatore che fece esiliare papa Martino e arrestare Massimo. Von Balthasar ha scritto quest'opera formulando l'interpretazione più convincente del pensiero di Massimo e comprendendo che egli è il pensatore capace di offire in sintesi il meglio del pensiero patristico, preservando la cristologia di Nicea e Calcedonia.
Uno dei massimi teologi del XX secolo esamina la profonda esperienza spirituale d’una giovane suora carmelitana (1880 – 1906) e i riflessi che il suo pensiero ebbe sulla fede cattolica.
Pur essendo meno conosciuta di Teresa di Lisieux, Elisabetta della SS.Trinità è stata definita «la Maestra del raccoglimento e della contemplazione».