Tertuliano, San Cipriano y San Agustín.
Los escritos de los tres autores coinciden en el modo de tratar la virtud de la paciencia, y señalan su estrecha relación con virtudes como la humildad, la fortaleza o la caridad.
Es Dios quien primero vive esta virtud, tolerando los pecados e injurias de los hombres. La paciencia reside en Él, y de Él proviene. Jesús, como Hombre y como Dios, enseña a los hombres a ser pacientes con su ejemplo, su Pasión y su muerte en la Cruz.
Los autores incluidos en este libro son:
Tertuliano : nació en Cartago y vivió un tiempo en Roma. Se convirtió al catolicismo por el ejemplo de los mártires, y escribió numerosos libros. Acabó adhiriéndose a la secta montanista y murió fuera de la Iglesia.
San Cipriano : también se convirtió por el testimonio de los cristianos. Fue ordenado sacerdote y más tarde consagrado obispo de Cartago. Escribió obras apologéticas y pastorales. Murió mártir.
San Agustín: influyeron sobre él las oraciones y el ejemplo de su madre, santa Mónica, y el encuentro con san Ambrosio. Fue ordenado presbítero y, años después, obispo de Hipona. Llevó una vida cenobítica y luchó contra sectas heréticas. Escribió numerosos sermones y cartas, apologías y textos sobre moral. Falleció a los 76 años.