En la Palabra de Dios reside una sabiduría que da sentido a la vida humana y que abre ya en este mundo el horizonte de la eternidad. Sin embargo, es una sabiduría oculta, porque frecuentemente la tenemos postergada y apenas nos acordamos de ella. Esta sabiduría nos dice que Dios habita en lo más profundo de nuestro ser (pues somos su imagen y semejanza) y es más íntimo y próximo a nosotros que nosotros mismos, en palabras de San Agustín. Este libro pretende ser una invitación a descubrir una sabiduría evidente que los hombres hemos ocultado, una invitación a saborear el conocimiento y el amor de Dios y a dejarse llenar por Él para que su Palabra ilumine y transforme nuestra vida; por eso, es también una invitación a hacer que la lectura diaria de la Palabra de Dios se convierta en un hábito.
Joaquim Mesegier García (Sabadell, Barcelona, 1962), sacerdote y pá-rroco, es doctor en Teología por la Facultad de Teología de Cataluña y completó estudios en el Instituto Patrístico Augustinianum de Roma. Ha sido profesor en el Instituto de Ciencias Religiosas y en el Instituto Superior de Liturgia de Barcelona.
Los Consejos evangélicos o Directorio es el texto más meditado y orado de Carlos de Foucauld, el gran testigo del evangelio que, a comienzos del siglo XX, se consagró por entero a los tuaregs, estudiando su lengua y sus costumbres, y procurando su bien material y espiritual. Después de haber constatado que su deseo en vida de fundar una congregación religiosa era difícil de materializar, quiso lanzar con estos Consejos evangélicos o Directorio un movimiento misionero «profético» para los nuevos tiempos que nos toca vivir, que englobara tanto a obispos, sacerdotes, religiosos, religiosas como a laicos unidos por el lazo espiritual de la «comunión de los santos». Para realizar este proyecto que él mismo encabezó en vida, nos pide, a todos los que queremos seguir sus huellas, leer y releer, orar y meditar, por lo menos una vez al año, estos Consejos evangélicos, que nos remiten a nuestro muy querido y amado Señor Jesús de Nazaret.
José Luis Vázquez Borau (Barcelona 1946) es Doctor en Filosofía, Licenciado en Teología Moral y Master en Ciencias Bíblicas por la Universidad de Friburgo (Suiza). Dirige el Centro Horeb para el Estudio y Encuentro de las Religiones y es autor de cuarenta ensayos sobre Filosofía, Religión y semblanzas de personajes.
«¿Qué sería del mundo si no fuese por los religiosos?» Esta frase de Santa Teresa de Jesús, recogida en la exhortación Vita consecrata, es todo un reto, porque la aportación insustituible de la vida consagrada a la trasformación del mundo pide de ella una permanente fidelidad a Cristo, a la Iglesia, al propio Instituto y al hombre de hoy. Respondiendo a la necesidad de explicitar mejor su identidad su vocación y su misión específica en la Iglesia Vita consecrata ofreció en su día una reflexión teológica sumamente valiosa. Siguiendo el texto de esta exhortación y respondiendo a su deseo, el presente libro, escrito desde el interior de la propia vida consagrada, en estilo coloquial y personal brinda una amplia visión de la misma a la luz de la Palabra de Dios y con la ayuda de la sólida enseñanza eclesial y magisterial. El autor pertenece desde los años setenta a la Orden Dominicana. Sus sucesivos destinos le han permitido trabajar en diversos campos pastorales, desde el académico y parroquial al misionero y juvenil. Su actual cometido, en el área de la espiritualidad, tiene como destinatarios a laicos, sacerdotes y diversas órdenes y congregaciones religiosas.
Ésta es una de las obras maestras de espiritualidad de nuestra época. Es un compendio preciso y profundo, pero accesible, de las principales fases que las almas suelen atravesar en su relación con Dios.
Esta obra vio la luz, por primera vez, en 1938, fruto del saber enciclopédico del autor, de su experiencia personal y pastoral en la vida interior y de veinte años de docencia sobre esta materia, y fue una de las obras que más contribuyó a fundar la teología espiritual como disciplina plenamente teológica.
El fin de este primer volumen es establecer con rigor la tesis por él sostenida de la necesidad moral de la contemplación infusa de los misterios de la fe para alcanzar la santidad, al menos en la mayoría. La obra está compuesta de dos volúmenes. El primero contiene dos de las cinco partes de la obra: ´Las fuentes de la vida interior y su fin´, donde se ponen las bases de la vida interior y ´La purificación del alma de los principiantes´, que trata, sobre todo, de los temas de la ascesis cristiana.
Ésta es una de las obras maestras de espiritualidad de nuestra época. Es un compendio preciso y profundo, pero accesible, de las principales fases que las almas suelen atravesar en su relación con Dios.
Esta obra vio la luz, por primera vez, en 1938, fruto del saber enciclopédico del autor, de su experiencia personal y pastoral en la vida interior y de veinte años de docencia sobre esta materia, y fue una de las obras que más contribuyó a fundar la teología espiritual como disciplina plenamente teológica.
Este segundo volumen trata de los temas más especializados que se refieren a las almas más adelantadas en el camino espiritual, iniciando con la tercera parte de la obra, ´Los progresos del alma guiada por la luz del Espíritu Santo´; hasta llegar al estado ´De la unión de las almas perfectas con Dios´ en el que se practica la heroicidad de las virtudes teologales y morales y se recibe la contemplación infusa. Concluye con la parte quinta, que trata ´De las gracias extraordinarias´, donde se explica el sentido y el valor relativo que hay que atribuir a fenómenos especiales como las visiones, los éxtasis y otros semejantes.
Cosas de curas” significa a veces algo reservado a una clase especial de personas y, en cualquier caso, algo que está fuera de las posibilidades de la gente normal. Otras veces es una expresión ofensiva: “Cosas de curas” quiere decir cosas de subdesarrollados, o bien algo complicado, abstruso... Pero siempre se trata de algo que no pertenece a la esfera de los intereses de las personas comunes.
Más grave aún es cuando esta expresión se aplica al mensaje de Jesús. Para muchos el evangelio es “Cosas de curas”, algo reservado a los especialistas, que no merece la pena conocer.
También bastantes creyentes consideran que muchas partes del evangelio están dirigidas a categorías particulares de personas y que lo poco que queda y les afecta contiene sólo fórmulas que creer y preceptos que observar.
Pero la “Buena Noticia” es para todos.
Todo el evangelio es para todos.
El mensaje de amor incondicional por parte de Dios se dirige a todos los hombres. No es una propuesta para los curas, sino también para los laicos; lo mismo para los santos que para los pecadores, igual para los justos que para los inmorales y los despreciados. Nadie está excluido de la invitación a la plenitud de vida que hace Jesús
Cuando un conjunto de expertos en un autor o tema vertebra todo su mensaje en unos "puntos fuertes" de interés y avala, luego, cada uno de esos "puntos" con textos seleccionados y hasta meditados, sólo entonces brota una obra como ést
Mons. Juan del Río Martín, obispo de Asidonia-Jerez, reúne en estas páginas los comentarios radiofónicos semanales que, durante sus cinco primeros años al frente de la diócesis, ha «regalado» a los oyentes de Cope-Jerez. Siempre al hilo de la actualidad eclesial y social, sus intervenciones a través de las ondas son breves y directas, pero llenas de frescura, espontaneidad y claridad de ideas. No se trata de textos meramente doctrinales, morales o espirituales, sino que su objetivo fundamental es servir de ayuda a sus oyentes para que vivan «con toda ilusión e intensidad», estimularnos a vivir «coro gozo y esperanza la existencia cristiana en su diálogo con el mundo». Como el propio Juan del Río reconoce, las ondas le han servido «como un púlpito, plaza o areópago» desde donde predicar los valores del Reino de Dios y, de paso, contribuir a crear una «Iglesia más atrayente» que empeñe todo su esfuerzo en edificar «una sociedad más humana, justa y pacífica».
Monseñor Óscar Romero es un emblema de la teología de la liberación y personifica el cambio de la iglesia latinoamericana en favor de los más pobres. Su profética condena de la injusticia lo enfrentó con los ricos y poderosos y lo convirtió en blanco de sus enemistades hasta que el 24 de marzo de 1980 fue asesinado a tiros durante una eucaristía.
El autor de este título, el jesuita Martin Maier, conocedor del movimiento de la teología de la liberación y del legado de Óscar Romero, describe su camino haciendo especial hincapié en la evolución de sus pensamientos y actitudes. Maier muestra cómo la unidad de mística y política, tal como la vivía Romero, puede ser hoy una fuente de inspiración para trabajar por un mundo más justo.
Lo más importante del libro es que me ha recordado y evocado lo más hondo de monseñor Romero y lo que hoy puede seguir humanizando en un mundo que necesita rumbo y esperanza: el amor –sin componendas- a los pobres de este mundo.
Jon Sobrino
Todo el magisterio de la primera Doctora de la Iglesia a través de sus escritos. Vida. Camino de perfección. Castillo interior. Fundaciones. Relaciones. Conceptos. Exclamaciones. Constituciones. Modo de visitar. Poesías...
Louis de Wohl nos ofrece uno de los santos más populares, admirados y queridos de todos los tiempos. El escenario de la acción nos traslada desde Asís a Roma, a Sicilia, a las arenas de Egipto.
Asís y Perugia están en guerra. Entre los oficiales de las tropas de Asís hay un joven desenfadado y alegre llamado Francisco Bernardone. La ciudad de Asís pierde la guerra, pero en realidad, en medio de la batalla, tiene lugar una gran victoria para el mundo: otro oficial joven, Roger, Conde de Vandria, salva la vida de Francisco. Desde la movida juventud de Francisco hasta la magnífica escena de su muerte, todo este relato está llevado con el contrapunto de la historia de Roger de Vandria, escéptico y materialista, que se percata casi demasiado tarde de que todas sus hazañas, a lo largo de una lealtad de años hacia su rey y señor, no significan prácticamente nada comparadas con el gesto heroico que evitó la muerte a su amigo Francisco.
Es una historia que hierve de acción y de caracteres finamente dibujados: santa Clara, de belleza delicada; el rey de Sicilia y Emperador del Sacro Imperio, Federico; el sultán Al-Kamil; el papa Inocencio III... El escenario de la acción nos traslada desde Asís a Roma, a Sicilia, a las arenas de Egipto.
Una vez más, Louis de Wohl nos deleita con su conocida habilidad, del mismo modo que lo hace con otros libros suyos: La luz apacible, El árbol viviente, El Oriente en llamas, La lanza, etc.
Louis de Wohl (1903-1961) es uno de los grandes escritores de novela histórica del siglo XX. Nació en Berlín, de padre húngaro y madre austriaca, ambos católicos. Desde muy pequeño se sintió inclinado a la literatura y en poco tiempo realizó una carrera fulgurante en Alemania, publicando más de 30 novelas de aventuras y suspense de las que 16 fueron llevadas al cine. Sin embargo, en 1935, y ante la llegada de Hitler al poder, decidió iniciar una nueva vida en Inglaterra. Participó en la Segunda Guerra Mundial y, al finalizar el conflicto, se trasladó a Estados Unidos reorientando su vocación literaria con una perspectiva cristiana. Consciente de la influencia que Hitler había tenido, al haberse convertido en el modelo de millones de personas, decidió proponer modelos atractivos y llenos de valores a sus contemporáneos. Ahí arranca su brillantísima producción novelística sobre cristianos de personalidad poderosa y profundamente inmersos en las luchas y avatares de su época. La luz apacible (sobre santo Tomás, escrita por encargo de Pío XII), El Oriente en llamas (sobre S. Francisco Javier), El mendigo alegre (sobre S. Francisco de Asís), Corazón inquieto (sobre S. Agustín) o Fundada sobre roca (una historia de la Iglesia) son algunas de sus numerosas obras maestras. Todas ellas están publicadas en Ediciones Palabra.