Este libro recoge textos de carácter espiritual escritos o pronunciados por monseñor Álvaro del Portillo, especialmente durante sus años al frente del Opus Dei. En el curso de casi cuatro lustros, pronunció numerosas homilías y discursos, escribió 176 cartas pastorales y mantuvo centenares de conversaciones sobre temas de vida espiritual en reuniones con millares de personas, en Roma y durante sus viajes pastorales por el mundo.
Monseñor del Portillo es bien conocido por sus estudios teológicocanónicos sobre la función de los laicos y el ministerio de los sacerdotes en la Iglesia. Estas páginas muestran un aspecto —el de autor espiritual— más desconocido. Una vez que la Iglesia aprobó sus escritos, examinados con ocasión de la apertura de la causa de canonización, y tras haber reconocido oficialmente la heroicidad de sus virtudes, parecía justo poner al alcance del público esta faceta de don Álvaro.
Para leer no basta con conocer las letras y saber el significado de las palabras que forman. También hay que comprender el mensaje que esas palabras transmiten. Y a veces eso resulta difícil, si no se conocen las claves para interpretar todas las referencias que se despliegan en el texto leído. La Biblia es un ejemplo de esa necesidad. El lenguaje de la Biblia encierra muchas sorpresas, muchos mensajes que pueden pasar desapercibidos, precisamente porque desconocemos las claves que nos ayudarían a descifrarlo.
Nadie tan indicado como Francisco Varo, con una larga trayectoria docente como profesor del Antiguo Testamento en la Universidad de Navarra, para ayudar al lector a encontrar la forma de leer la Biblia con una nueva actitud, capaz de comprender la permanencia y la vigencia del mensaje contenido entre sus líneas.
Javier Echevarría, prelado del Opus Dei, nos ofrece un libro para la oración. Tomando como base la Pasión de Cristo, se centra en el huerto de Getsemaní, cuando Jesús, sabedor de lo que ha de acontecer, se recoge en un momento íntimo de oración que sirve de ejemplo para la oración de todos los cristianos. Siguiendo paso a paso los evangelios, Echevarría reconstruye el período de calma que precede a la tormenta de la Pasión.
Javier Echevarría nace en Madrid en 1932. Colabora estrechamente con el beato Josemaría Escrivá desde 1953 hasta el 26 de junio de 1975, fecha en que fallece el fundador del Opus Dei. Ha vivido en Roma momentos decisivos de la historia de la Iglesia, como los años del Concilio Vaticano II, y ha sido testigo de los pontificados de Pío XII, el beato Juan XXIII, Pablo VI, Juan Pablo I y Juan Pablo II. Prelado del Opus Dei desde abril de 1994, tras el fallecimiento de Álvaro del Portillo, es ordenado obispo por Juan Pablo II en enero de 1995. Profundo conocedor de los problemas de los cristianos en el mundo actual y de la situación de la Iglesia en numerosos países del mundo, ha realizado viajes pastorales por los cinco continentes, entablando un diálogo ecuménico con personas de muy diferentes credos y culturas.