Maranatha es un exhaustivo estudio de los rituales funerarios protagonizados por las mujeres en los orígenes del cristianismo. Para Kathleen E. Corley, es en las reuniones de mujeres corrientes para hacer duelo y elevar sus lamentaciones por el Jesús difunto –no en el cerrado círculo de los discípulos varones–, donde debemos investigar los orígenes de las tradiciones de la resurrección.
La literatura cristiana primitiva en general y el Nuevo Testamento en particular contienen numerosas referencias al fenómeno de la posesión por espíritus y variados ejemplos de la práctica exorcista. Aunque en algunos textos se cuestione la autenticidad de ciertos casos de posesión o la honradez de ciertos exorcistas, en ninguno se pone en duda la existencia de espíritus capaces de poseer a las personas, ni de individuos capaces de exorcizarlos.
Espíritus, posesos y exorcistas forman parte de la realidad cultural de la Antigüedad. De igual manera, el fenómeno de la posesión ha tenido un papel central en Jesús, en el movimiento creado por él y en los orígenes del cristianismo.
Este libro quiere contribuir a la exégesis histórica del tema ofreciendo una interpretación social y culturalmente contextualizada de los testimonios existentes sobre la creencia en la posesión espiritual y las prácticas exorcistas en el movimiento de Jesús.
En 1947 tuvo lugar uno de los acontecimientos arqueológicos más importantes para el estudio de la Biblia, el descubrimiento de los manuscritos del mar Muerto en la zona de Qumrán.
Aquel hallazgo supuso un giro radical para el mundo de los estudios bíblicos. Los textos encontrados pertenecían a la biblioteca de una comunidad judía que vivió el contexto social, político y religioso en el que nace el cristianismo, el mismo que conoció Jesús. El descubrimiento de los manuscritos se convirtió así en una de las mayores aportaciones extrabíblicas para conocer el contexto religioso y social en el que vivió Jesús.
"Para comprender los manuscritos del mar Muerto" pretende ser una introducción a los textos de Qumrán desde distintos puntos de vista. Todos los colaboradores de la obra son especialistas en la materia que presentan y en el conocimiento de la literatura de la época. A través de las páginas de este libro, el lector irá descubriendo la riqueza espiritual y teológica de los textos de estos manuscritos, comprenderá la importancia que tienen para el estudio de la Biblia y el conocimiento del mundo en que vivió Jesús, y quedará fascinado por su contenido.
Podría decirse que la Biblia es la historia fragmentaria de un pequeño pueblo del Mediterráneo, que ha combinado algunas de sus tradiciones épicas con las narraciones, a veces míticas, de sus vecinos. Pero ¿es solo eso? ¿Cuál es la clave de su poderoso atractivo?
La Biblia es el libro de los libros. Ha sido y es el más leído y el más traducido del planeta. Expresa cuestiones trascendentes de la existencia humana mientras narra acciones ordinarias con una sencillez y una profundidad extraordinarias.
No basta, por tanto, caminar por el texto: éste exige ser comprendido.
José Morales, sacerdote, es profesor de Teología Dogmática en la Facultad de Teología de la Universidad de Navarra. Es autor de numerosos estudios de Literatura, Teología, Historia y cuestiones islámicas. Entre sus libros, destacan El Islam, La experiencia de Dios, Introducción a la Teología, Jesús de Nazaret, Los santos y santas de Dios, Madre de la Gracia, Fidelidad, El hombre nuevo y Newman (1801-1890).
El proceso de formación y las fechas de escritura de los evangelios siguen siendo cuestiones abiertas entre los estudiosos. En manuales y artículos suele proponerse como fechas de composición los treinta últimos años del primer siglo de nuestra era; pero desde hace décadas algunos estudiosos, apoyándose en sólidas razones, sostienen fechas mucho más tempranas. En la colección Studia Semitica Novi Testamenti apareció hace unos años un libro titulado Cuándo fueron escritos los evangelios, donde se afirmaba la existencia de textos escritos en las primeras comunidades cristianas que servían para la proclamación del Evangelio. Sus autores llegaron a esta conclusión después de un minucioso estudio filológico de algunos pasajes de las cartas paulinas, especialmente de 2Corintios. El presente trabajo continúa esta línea de investigación: los autores estudian varios pasajes evangélicos que aluden de forma más o menos explícita a la existencia de libros sagrados cristianos desde los comienzos del cristianismo. El punto de partida, como en las obras precedentes de esta colección, son las anomalías del griego actual, que se intentan esclarecer apelando al origen semítico de la tradición evangélica. En la segunda parte de la obra se estudia 1Cor 14, que versa sobre el ejercicio del don de lenguas y la profecía en la comunidad cristiana de Corinto. Este capítulo, junto a otros textos de menor importancia, ha llamado siempre la atención de los movimientos carismáticos y pentecostales, que lo han considerado como su manifiesto; se sirven precisamente de él para legitimar las prácticas insólitas que desarrollan en sus encuentros. Este texto paulino, como reconocen los estudiosos, está lleno de dificultades. Por un lado, Pablo no ofrece descripción detallada de la naturaleza y práctica de estos dones espirituales; debido a esta ignorancia algunas de sus expresiones resultan enigmáticas. Por otro, el Apóstol escribe un griego difícil, en ocasiones oscuro, haciendo que su pensamiento no resulta fácilmente comprensible. El esfuerzo de los estudiosos por conocer mejor la realidad de dichos dones encuentra en el recurso al sustrato semítico un buen aliado. En efecto, el lector se sorprenderá de la luz que aporta el estudio filológico bilingüe para clarificar la naturaleza y el ejercicio del don de lenguas y la profecía en el cristianismo naciente.
"Masora. La transmisión de la tradición de la Biblia Hebrea" es la primera monografía en lengua española dedicada a la Masora. El libro nace ante la creciente demanda de incorporar la Masora al estudio de la Biblia. Esta obra proporciona los medios y la metodología necesarios para descifrar las noticias masoréticas de los principales manuscritos bíblicos de tradición tiberiense (Cairo, Alepo, Leningrado) y del M1 de la Universidad Complutense de Madrid, así como de tratados masoréticos independientes.
Entre otras novedades, el libro ofrece la descripción pormenorizada de los materiales imprescindibles para trabajar una noticia masorética y su utilización, y presenta un protocolo en el que se fijan los pasos que deben seguirse para entender e interpretar la Masora. Todo ello aplicado a casos concretos y con propuestas de nuevas noticias para que el lector afronte en solitario su estudio.
Las fuertes transformaciones de nuestra cultura hacen que sea imperativo repensar la actitud cristiana sobre el placer. Este desafío afecta no sólo a la credibilidad del cristianismo, sino al camino de humanización de los fieles. En este desafío, es totalmente pertinente interrogar a los textos fundadores, pues la literatura puede promover una mirada nueva a algunos problemas humanos ligados a la experiencia del placer; a saber, el problema del reconocimiento, la alteridad, la dominación y el poder.
Mike van Treek opta sin prejuicios por una exégesis resueltamente moderna que reacondiciona las herramientas de lectura ya existentes para adaptarse mejor al texto bíblico, en lugar de plegar este último a instrumentos prefabricados. Propone así una metodología nueva, de la cual sacarán beneficios todos aquellos que se inspiren en ella para realizar estudios de temas antropológicos en la Biblia hebrea.
En lo que concierne a la temática del placer, aunque este estudio no pretende examinar todos los detalles de ella, constituye una contribución de calidad que coloca balizas firmes a partir de las cuales será posible releer otros relatos veterotestamentarios, pero también la poesía, con la ayuda de los innovadores enfoques propuestos por este libro.
Conviene saludar esta obra que, para ser una «obra de la juventud», no hace menos gala de madurez en su manera de abrir vías inéditas (André Wénin).
Se conoce con el nombre de «apócrifos» todos aquellos textos que por una razón u otra no han sido incluidos a lo largo del tiempo entre los libros sagrados canónicos del judaísmo y el cristianismo, cuyo establecimiento definitivo culminó (por lo que concierne a la Iglesia católica) en el Concilio de Trento (1546). De índole sumamente variada, narran desde vidas y episodios de los más diversos personajes de ambos testamentos hasta textos sapienciales. No pocas veces versan sobre etapas o puntos oscuros de la vida de Jesús y sus discípulos, no se pliegan a la doctrina oficial y son rechazados como «heréticos». APÓCRIFOS DEL ANTIGUO Y DEL NUEVO TESTAMENTO es una antología a cargo de ANTONIO PIÑERO, destacado especialista en este tema, que reúne los más sustanciales y controvertidos de ellos. La introducción, a cargo del propio Piñero, aclara de forma ejemplar la problemática que suscitan estos textos, así como el justo lugar que se les debe asignar, principalmente como elementos válidos para la historia de la teología y de las ideas religiosas, así como para la historia de la iconografía y de la literatura cristianas.
Los salmos son oraciones poéticas. El creyente desgrana su existencia ante Dios a lo largo de ciento cincuenta poemas. En ellos tiene cabida la amplia gama de sentimientos humanos, desde el dolor más profundo. hasta el gozo más intenso. Israel supo orar con los salmos; es decir, captó en este «repertorio oficial de oraciones» las palabras con las que un padre enseña a su hijo, se apropió de ellas y se dirigió a Dios sin ficción ni fingimiento.
Jesús oró con los salmos. La Iglesia heredó de Israel esta antología de oraciones. Con ellas ha orado desde sus orígenes y aun hoy continúa orando auténticamente: se dirige a Dios mediante su santa palabra, dirigida al Padre, por medio del Señor, en la unidad del Espíritu.
El presente libro es el resultado de una nueva traducción del texto hebreo, cuya finalidad es ayudar al cristiano de hoy a orar cristianamente con estas oraciones poéticas seculares.