D. Grasso, estudia en esta obra un tema vivo y actual, los carismas en la Iglesia: su acepción bíblica, su naturaleza y finalidad y su permanencia a lo largo de los siglos, desde Pablo, a quien se debe4 el término, hasta el momento actual. Carisma es un don especial concedido por el Espíritu para el bien común, como el del apostolado, la profecía, obrar milagros o hablar lenguas. Con ellos se encontró Pablo en Corinto, produciéndole con el tiempo no pocos sinsabores por los abusos a que dieron lugar. Por eso transcurren en penumbra hasta el gran papa Juan el Concilio. Al renacer la eclesiología y con ella la realidad del pueblo de Dios, se crea un nuevo espíritu carismático que ha hecho vibrar las más íntimas fibras de la comunidad cristiana.
En este libro se ofrece un serio estudio del tema y sus consecuencias prácticas y pastorales.
En este tomo se han reunido cuatro meditaciones de Guardini que tienen como centro la persona de Jesús – reflejado en los Evangelios -, como su aspecto divino tan
visible en los escritos paulinos y de San Juan. En sus análisis el autor conjuga con audacia y novedad los aspectos psicológicos y la exégesis, para penetrar con mayor profundidad en la figura de Jesús.
En el mundo moderno Guardini ha sabido como pocos destacar la necesidad de la contemplación para conseguir una vida humana a plenitud. Dentro de la espiritualidad contemporánea, el autor supera las simples devociones y vuelve a las grandes fuentes de la vida del espíritu: la liturgia, la Sagrada Escritura y la fe como medios para el trato personal con Jesucristo. Este volumen contiene una serie de reflexiones sobre la oración, en concreto sobre la oración dominical y los Salmos. Por otra parte incluye una colección de “oraciones teológicas” que hacen referencia a los puntos esenciales de nuestra fe con el fin de interiorizarlos en la vida diaria.
La piedad popular y el sentimiento religioso del pueblo que se inicia en el siglo XII, van al mismo tiempo ligados y desligados del culto litúrgico oficial. Lo que Maldonado describe y estudia en este libro es el proceso que siguió la Piedad entre los siglos XII al XIV: la figura mayestática de Cristo (Christus Rex) va cediendo paso al Jesús doliente más emotivo, que cuenta a su lado con María y los Santos. De esta transformación le interesa al autor su repercusión en el presente, ya que lo que nació entonces sigue vivo en nuestros días.
Las bienaventuranzas son esencialmente autobiográficas, Jesús las vive y las proclama. En ellas nos habla, ante todo, de sí mismo: Nos revela sus propios criterios, su mentalidad, su escala de valores y sus actitudes vitales. Las bienaventuranzas constituyen su verdadera radiografía. Jesús es su autor y su contenido: el Mensajero y el Mensaje. Y "la vida religiosa es el seguimiento radical de las bienaventuranzas". (Juan Pablo II)
EL AUTOR
Severino-María Alonso
(+) Misionero Claretiano (1933-2009). Doctor en Teología. Diplomado en Espiritualidad y Mariología. Catedrático de Teología de la Vida Consagrada en el Instituto Teológico de Vida Religiosa, de Madrid. Profesor en la Escuela “Regina Apostolorum”. Director de “Vida Religiosa” (1980-1986). Director del ITVR (1981-1987). Ha escrito innumerables libros y artículos sobre Teología de la vida consagrada y Teología de la vida espiritual cristiana. Toda su vida estuvo dedicada a profundizar en la teología de la Vida Consagrada, para presentarla a sus oyentes y lectores con la mayor competencia posible. En sus escritos se puede apreciar el profundo respiro de fresca novedad que el Concilio Vaticano II aportó a Iglesia y a la vida religiosa en ella.