La fe cristiana, por remitir a Dios y por confiar radicalmente en el ser humano, reclama y engendra en toda circunstancia y tiempo un logos, una razón, una palabra, un pensar. Este libro es un elogio de la teología, una defensa de la fe que busca la razón y del logos que busca ser creíble.
Sin embargo, este elogio no es ingenuo, sino comprometido. De hecho, el mayor riesgo que corre hoy la teología es dejar de ser lo que ella es. Acuciada por la irrelevancia cultural y no pocas veces eclesial, la teología ha de luchar contra la tentación de renunciar a su identidad y no decir su palabra ante los retos que la sociedad científica y tecnológica plantea a la existencia humana, y a la vida y la misión de la Iglesia.
Es cierto que vivimos un tiempo de cambio y que todavía no tenemos la teología adecuada a la altura de la actual conciencia histórica. Pero antes que aislarse y encerrarse en sí misma, la teología tiene que tener paciencia y volver a descubrir su identidad desde el diálogo abierto y la relación activa con la sociedad y la Iglesia.
Ángel Cordovilla Pérez es profesor de teología dogmática en la Universidad Pontificia Comillas de Madrid.
A pesar de los grandes avances técnicos de las últimas décadas, las cuestiones antropológicas que el ser humano se plantea son las mismas de siempre. Una de las más acuciantes es la que interroga al hombre individual, y a la sociedad en su conjunto, sobre el mal, la violencia, la muerte. Estas cuestiones también están en el interior de la Biblia. Desde sus primeras páginas ofrece respuestas a esas preguntas. La historia de Caín y Abel es un buen ejemplo. Esta monografía realiza un análisis detallado que inicia su recorrido en el texto hebreo de Gn 4,1-16, analiza las primeras traducciones, sigue la pista de la transmisión del pasaje a lo largo de la historia y considera el modo en el que se insertó en el Nuevo Testamento a la luz de la literatura judía intertestamentaria. Por último realiza el estudio de la recepción de la historia de Caín y Abel en el seno de la Iglesia primitiva a través de los textos de sus principales autores. Estos autores partieron de la primera lectura cristiana del pasaje y constituyeron los primeros eslabones en su transmisión en el seno de la comunidad cristiana.
En un contexto cultural fragmentado y plural como el nuestro la presente obra ofrece un compendio sistemático de la fe cristiana, tratando de expresar de una forma fiel, actual y significativa el fundamento y el contenido de esa fe. El objetivo de la teología dogmática es articular y comprender la lógica de la fe, preguntándose por el Cristianismo como un todo, para desde aquí tratar de mostrar cuál es su realidad más específica y singular que la distingue y, a su vez, la pone en relación con otras ciencias humanas y con otras tradiciones religiosas. La síntesis más antigua y normativa para el Cristianismo ha sido el Símbolo de la fe. Desde su estructura trinitaria y bajo el entramado de la historia de la salvación, se van exponiendo desde su lógica interna y su referencia a la totalidad, los contenidos esenciales de los tratados de teología: Creo en Dios Padre (Trinidad y Antropología); Creo en Cristo (Cristología, Soteriología, Mariología); Creo en el Espíritu Santo (Eclesiología, Sacramentos, Escatología y Existencia cristiana), precedidos por la reflexión en torno al acto de creer en la revelación de Dios en la historia testimoniada en la Escritura y la Tradición (Teología fundamental). Esta obra es el fruto del trabajo compartido de los profesores del departamento de Teología Dogmática y Fundamental de la Universidad Pontificia Comillas de Madrid. Para su exposición hemos seguido la fórmula clásica de las tesis que expresan de forma objetiva el contenido esencial que ha de saber un alumno de teología y que debe conocer todo aquel que quiera acercarse a la comprensión del misterio cristiano desde un rigor y una profundidad a la altura de la conciencia histórica y de la vida de la Iglesia.
Escrito en el Año de la Fe, con el fin de dirigirlo inmediatamente a sus diocesanos para que pueda servirles de ayuda, este libro es un comentario a los diversos artículos o párrafos del Credo Apostólico, siguiendo de cerca el Catecismo de la Iglesia Católica. Se trata de una exposición breve, de carácter bíblico y teológico, espiritual y pastoral, que tiene en cuenta la literatura sobre la historia y comentarios del Símbolo de la fe cristiana. Como el propio autor señala, «el Año de la Fe es una oportunidad para conocer y amar más profundamente lo que creemos, para vivir con mayor fidelidad y transmitir con un empeño más decidido el don de la fe que hemos recibido de Dios y compartimos en la Iglesia».
Ricardo Blázquez Pérez (Villanueva del Cam­pillo, Ávila, 1942), actual arzobispo de Valla­dolid, se doctoró en Teología por la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma en 1972. Entre sus numerosas publicaciones destacan: Jesús sí, la Iglesia también (1985), La espe­ranza en Dios no defrauda (2004) e Iglesia, ¿qué dices de Dios? (2007).
Con motivo de los 25 años de su ordenación episcopal, el autor repasa con «memoria agradecida» y con mirada de fe los años vividos en las distintas diócesis en las que ha ejercido su ministerio. Y presenta también sus reflexiones y estudios sobre el Vaticano II y los diversos aspectos de la Nueva Evangelización como un testigo cualificado de la acción pastoral de la Iglesia en España en el último medio siglo, desde su vivencia del Concilio como seminarista en Ávila, hasta el Sínodo sobre la Nueva Evangelización, en el que participó ya como Arzobispo de Valladolid.
El autor está convencido de que el Concilio buscó la renovación de la Iglesia volviendo a sus orígenes y mirando a su misión en nuestro tiempo; ni innovación mecánica ni abstracción de la historia. Y desde ahí traza el camino hasta la Nueva Evangelización. La Iglesia necesita de nuevo en la situación presente, resultado de numerosas transformaciones sociales, culturales y de conciencia, escuchar el mandato misionero del Señor y confiarse al poder del Espíritu Santo, que es el protagonista primero y animador de todos en la evangelización. Id al mundo entero, a todas las regiones y pueblos, a todos los sectores de la humanidad, a todas las edades; unas veces las puertas están abiertas, y otras cerradas o solo entreabiertas; hay experiencia de desierto y añoranza de oasis y de patria.
El medio de evangelización es el amor cristiano, ya que es un amor que pone el corazón de la persona en los labios, actúa en las manos y alienta en los dones. La revelación de Dios ha acontecido en obras y palabras íntimamente unidas. Las obras respaldan las palabras para que no queden huecas, y las palabras explicitan las obras para que no sean mudas y proclamen el Evangelio.
RICARDO BLÁZQUEZ PÉREZ nació en Villanueva del Campillo (Ávila) en 1942. Doctor en Teología por la Universidad Pontificia Gregoriana de Roma, ha sido profesor y decano de la Facultad de Teología de la Universidad Pontificia de Salamanca, así como Vicerrector y Gran Canciller de la misma. En 1988 fue nombrado obispo auxiliar de Santiago de Compostela. En 1992 fue designado obispo de Palencia, y en 1995 obispo de Bilbao. Desde 2010 es Arzobispo de Valladolid.
En la Conferencia Episcopal Española ha desempeñado diversos cargos en distintas Comisiones. En 2005 fue elegido presidente de dicha Conferencia, de la que es Vicepresidente desde 2008.
Entre sus numerosas obras destacamos: La vida cristiana bajo el impulso del espíritu (1998), En el umbral del tercer milenio (1999), El obispo en la Iglesia (2002), La esperanza en Dios no defrauda: consideraciones teológico-pastorales de un obispo (2004), Iglesia, ¿qué dices de Dios? (2007) e Iglesia y Palabra de Dios (2011).
Si la teología es hablar de Dios, conjugando la búsqueda y el anhelo del hombre con la palabra y la revelación de Dios, el tratado sobre el misterio trinitario constituye su centro y fundamento. Pero no se trata de hablar de un dios cualquiera, ni siquiera de él como Misterio sin más, sino del Dios que se ha revelado en su Hijo y se nos ha dado en el Espíritu. La fe trinitaria no es un enigma indescifrable, un jeroglífico irresoluble, un dogma sinsentido. La teología trinitaria tiene como tarea pensar a fondo esta revelación y comunicación de Dios. ¿Cómo es posible que Dios sin dejar de ser él pueda entrar en el corazón mismo de la vida humana en historia y trascendencia ofreciendo a la realidad mundana la comunión definitiva con él? ¿Cómo es ese Dios desde toda la eternidad para que su revelación histórica sea de esta manera? La teología cristiana responde a estas preguntas afirmando que Dios es aquel que es y ha querido revelarse para siempre como el Dios-con-nosotros: Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Ángel Cordovilla Pérez (Salamanca 1968) es sacerdote. Estudió en Salamanca, Roma y Múnich. Profesor de teología dogmática en la Universidad Pontificia Comillas. Entre sus obras cabe destacar Gloria de Dios y salvación del hombre (Salamanca 1997); Gramática de la encarnación. La teología de Karl Rahner y Hans Urs von Balthasar (Madrid 2004); El ejercicio de la teología (Salamanca 2007); Crisis de Dios y crisis de fe. Volver a lo esencial (Santander 2012).
“Hay épocas de odium Dei... en que esta enorme montaña de Dios llega casi a desaparecer del horizonte. Pero al cabo... emerge a sotavento el acantilado de la divinidad”. Con estas palabras de Ortega y Gasset el autor inicia este estudio sobre el conocimiento natural de lo divino: ¿existe Dios?, ¿es posible conocerlo?, ¿qué argumentos hay que demuestren su existencia?, ¿cómo es Dios realmente?.
El autor aborda la creencia y el agnosticismo, proporcionando al lector una síntesis rigurosa y accesible de teología natural.
Miguel Pérez de Laborda (Bilbao, 1963), es doctor en Filosofía y profesor ordinario de Metafísica en la Facultad de Filosofía de la Pontificia Universidad de la Santa Cruz (Roma). Fue ordenado sacerdote en 2004. Ha sido también profesor de Lógica y Filosofía del Lenguaje, y ha dirigido seminarios sobre las razones del ateísmo. Autor de numerosas publicaciones, en Rialp ha publicado El más sabio de los atenienses. Vida y muerte de Sócrates.
La Modernidad ideológica ("más hombre y menos Dios") ha fracasado. Se abre paso una soñadora posmodernidad ("yo decido qué soy, y decido si hay Dios").
¿Es posible despertar a la cultura del "cuanto más humano, más divino"? El sopor desaparece si se reconstruye la creencia desde sus cimientos indispensables: la conciencia, el sentido de la amistad y del sufrimiento y el fulgor del bien.
Rafael Gómez Pérez es doctor en derecho y en filosofía, y profesor de Antropología cultural en la Universidad Complutense (1976-2000). Ha publicado noventa libros de diversas materias, entre los que destacan: filosofía ( Historia básica de la filosofía, El humanismo marxista, Elogio de la bondad ); ética ( Ética empresarial, Deontología jurídica ); antropología ( Iguales y distintos, El desafío cultural, La generación de la protesta ); historia ( Breve historia de la cultura europea ); memorias ( Memorias del Sur, Memorias de muchas patrias ).
Creer en el amor. Posiblemente sea lo que todo hombre desea como luz para su vida. Por eso mismo, es un camino de conocimiento en el que se muestra el amado como aquel que nos promete una vida en plenitud. Esta realidad profundamente humana es la que Dios ha elegido para revelarnos su misterio, de forma que la fe cristiana tiene como objeto el Amor del Padre manifestado en Cristo. Este libro no quiere sino desvelar la riqueza humana y divina de esta dinámica amorosa, con un acento especial en su dimensión epistemológica que pide un estilo teo­lógico con unas características determi­nadas. De este modo, quiere ser una contribución al año de la fe y un des­arrollo de la enorme fecundidad de la doctrina de la Constitución Dei Verbum del Concilio Vaticano II. La compren­sión de la especificidad de la fe en el amor con su fundamento afectivo es un aspecto imprescindible para una teolo­gía adecuada a nuestro tiempo.