Jesucristo es el único sacerdote en sentido propio. El sacerdocio cristiano, tanto el común de todos los fieles como el ministerial, es la participación por gracia en Su sacerdocio. Por eso, solo la mirada al sacerdocio de Cristo hace visible el significado existencial y espiritual del ser cristiano y del ser sacerdote.
Basándose en los testimonios de la Escritura y la tradición, así como en la fe de la Iglesia, los capítulos de esta obra analizan la teología del sacerdocio y responden a planteamientos, interrogantes y desafíos actuales. Muestran el significado del ministerio presbiteral de la Iglesia y en la Iglesia, y ofrecen impulsos alentadores para una vida sacerdotal plena y fructífera en el mundo de hoy.
Actualmente es necesario destacar «cuatro rasgos característicos de la esencia del sacerdote: este debe ser un hombre de Dios, y ello quiere decir: un hombre de oración. Debe ser amigo, mensajero y representante de Cristo. Al mismo tiempo ha de ser una persona que comparta la alegría y la esperanza, los miedos y las preocupaciones de los seres humanos y que verdaderamente se consuma por sus amigos. Por último, tiene que ser también un hombre de Iglesia, signado por el sentire ecclesiam, por el sentir en y con la Iglesia. De ahí que deba estar asimismo dispuesto a dar ocasionalmente la cara por la Iglesia. Estos cuatro rasgos distintivos pueden resumirse en una frase: la existencia sacerdotal es una existencia testimonial» (Walter Kasper).
GEORGE AUGUSTIN, catedrático de teología dogmática y fundamental, y director del Instituto de Teología, Ecumenismo y Espiritualidad «Cardenal Walter Kasper», acompaña espiritualmente a sacerdotes en la diócesis de Rottemburgo-Stuttgart. Entre sus obras publicadas en Sal Terrae destacamos Llamados a la alegría: el gozo de ser sacerdote y El desafío de la nueva evangelización.
El cardenal WALTER KASPER es Presidente emérito del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos. La Editorial Sal Terrae está publicando su Obra Completa, de la que ya han visto la luz dos volúmenes: El Evangelio de Jesucristo y Jesús el Cristo.
El cardenal KURT KOCH, Presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, ha publicado en Sal Terrae, como colaborador, El problema de Dios, hoy, y como editor, La liturgia como centro de la vida cristiana.
ANDREAS WOLLBOLD es profesor de teología pastoral de la Facultad de Teología Católica de la Ludwig-Maximilians-Universität, Múnich.
Con respecto a la espiritualidad ignaciana y jesuítica, el P. Ignacio Iglesias (1925-2009) representa uno de sus impulsores más decisivos y eficaces en el ámbito de lengua castellana y, por extensión, en toda la Compañía. Sus ocupaciones como hombre de gobierno, primero, y su infatigable labor apostólica después no le permitieron elaborar sistemáticamente su magisterio, pero sí esparcirlo en forma de innumerables artículos y algunos libros. Este tomo de la Colección «Manresa», de la que fue iniciador, pretende recoger lo mejor de esa sabiduría dispersa que él nos legó. Pretende ser, al mismo tiempo, un homenaje vivo a su memoria y un estímulo para los estudiosos de san Ignacio que vienen tras él.
Los artículos recogidos en este libro, 23 exactamente, están organizados en torno a tres ejes: «Ejercicios espirituales», «Mundo y misión en Ignacio de Loyola» y «El carisma ignaciano hoy». El último de ellos está dedicado a la memoria del P. Arrupe, con quien Ignacio Iglesias trabajó muy estrechamente durante más de nueve años. Le siguen, como complemento necesario, una bibliografía lo más exhaustiva posible de los escritos de Ignacio Iglesias y, finalmente, un apartado con la procedencia bibliográfica de cada capítulo.
La pregunta del título es acumulativa y presupone otras: ¿en qué consiste la Formación Permanente? ¿La estamos viviendo de algún modo? ¿Nos interesa, simplemente, o la consideramos indispensable? ¿Pensamos que es posible en las circunstancias actuales? ¿Podemos crecer durante toda la vida? ¿Creemos en ella como individuos y como institución?
Tales dudas recurrentes están en el origen del presente volumen. Este no pretende afrontarlas todas, pero al menos estarán presentes, con la esperanza de provocar alguna duda, alguna respuesta y, tal vez, alguna resolución decidida.
Estas páginas tienen la finalidad de exponer el verdadero sentido de la Formación Permanente, su razón de ser y su función esencial, porque hoy se tiene la sensación de que estamos todavía lejos de haberla comprendido en su totalidad y, sin embargo, es un «serio deber moral» del que depende la fidelidad a la vocación.
«Cencini corta el asunto por lo sano: ¡Formación permanente o frustración permanente! Considero que un libro como este es de urgente necesidad. Estoy seguro de que será útil a muchos» (tomado del «Prólogo», de monseñor Francesco Lambiasi).
AMEDEO CENCINI, religioso canosiano, es profesor de las universidades Salesiana y Gregoriana de Roma y autor de numerosos trabajos de psicología aplicada a la vida cristiana y de formación para la vida religiosa. En Sal Terrae ha publicado Fraternidad en camino. Hacia la alteridad / Alguien te llama. Carta a un joven que no sabe que es llamado / Relacionarse para compartir. El futuro de la Vida Consagrada / Virginidad y celibato, hoy. Por una sexualidad pascual / La alegría, sal de la vida cristiana.
Entre los destinatarios de la evangelización hay que incluir a los propios cristianos. Solo unos cristianos evangelizados estarán capacitados para transmitir el evangelio y, por consiguiente, para evangelizar a los demás; solo una Iglesia evangelizada podrá ser una Iglesia evangelizadora, obediente al Señor del Evangelio.
La forma o el estilo con que el cristiano está en compañía de los hombres es determinante: del «cómo» depende la misma fe, porque no es posible anunciar a un Jesús que narra a Dios con mansedumbre, humildad y misericordia, y hacerlo con un estilo arrogante, con intransigencia o incluso con actitudes que pertenecen más bien a la militancia mundana. Y precisamente para salvaguardar el estilo cristiano es necesario también resistir a la tentación de hacerse valer y alardear de fuerza numérica. La fe no es cuestión de número, sino de convicción profunda y de grandeza de alma, de capacidad de no temer al otro, al diferente, sino de saber escucharle con dulzura, discernimiento y respeto. Del estilo de los cristianos en el mundo depende la escucha del Evangelio y su acogida como buena o mala comunicación y, por consiguiente, como buena o mala noticia.
ENZO BIANCHI (1943), fundador y prior de la comunidad monástica de Bose, es autor de numerosos textos sobre la espiritualidad cristiana y sobre la gran Tradición de la Iglesia, que han sido escritos teniendo siempre en cuenta el mundo y la cultura actuales. La Editorial Sal Terrae ha publicado, además de su «bestseller» Por qué orar, cómo orar, otras dos obras suyas: Jesús y las bienaventuranzas y Una lucha por la vida.
Con motivo de los 25 años de su ordenación episcopal, el autor repasa con «memoria agradecida» y con mirada de fe los años vividos en las distintas diócesis en las que ha ejercido su ministerio. Y presenta también sus reflexiones y estudios sobre el Vaticano II y los diversos aspectos de la Nueva Evangelización como un testigo cualificado de la acción pastoral de la Iglesia en España en el último medio siglo, desde su vivencia del Concilio como seminarista en Ávila, hasta el Sínodo sobre la Nueva Evangelización, en el que participó ya como Arzobispo de Valladolid.
El autor está convencido de que el Concilio buscó la renovación de la Iglesia volviendo a sus orígenes y mirando a su misión en nuestro tiempo; ni innovación mecánica ni abstracción de la historia. Y desde ahí traza el camino hasta la Nueva Evangelización. La Iglesia necesita de nuevo en la situación presente, resultado de numerosas transformaciones sociales, culturales y de conciencia, escuchar el mandato misionero del Señor y confiarse al poder del Espíritu Santo, que es el protagonista primero y animador de todos en la evangelización. Id al mundo entero, a todas las regiones y pueblos, a todos los sectores de la humanidad, a todas las edades; unas veces las puertas están abiertas, y otras cerradas o solo entreabiertas; hay experiencia de desierto y añoranza de oasis y de patria.
El medio de evangelización es el amor cristiano, ya que es un amor que pone el corazón de la persona en los labios, actúa en las manos y alienta en los dones. La revelación de Dios ha acontecido en obras y palabras íntimamente unidas. Las obras respaldan las palabras para que no queden huecas, y las palabras explicitan las obras para que no sean mudas y proclamen el Evangelio.
RICARDO BLÁZQUEZ PÉREZ nació en Villanueva del Campillo (Ávila) en 1942. Doctor en Teología por la Universidad Pontificia Gregoriana de Roma, ha sido profesor y decano de la Facultad de Teología de la Universidad Pontificia de Salamanca, así como Vicerrector y Gran Canciller de la misma. En 1988 fue nombrado obispo auxiliar de Santiago de Compostela. En 1992 fue designado obispo de Palencia, y en 1995 obispo de Bilbao. Desde 2010 es Arzobispo de Valladolid.
En la Conferencia Episcopal Española ha desempeñado diversos cargos en distintas Comisiones. En 2005 fue elegido presidente de dicha Conferencia, de la que es Vicepresidente desde 2008.
Entre sus numerosas obras destacamos: La vida cristiana bajo el impulso del espíritu (1998), En el umbral del tercer milenio (1999), El obispo en la Iglesia (2002), La esperanza en Dios no defrauda: consideraciones teológico-pastorales de un obispo (2004), Iglesia, ¿qué dices de Dios? (2007) e Iglesia y Palabra de Dios (2011).
Tenía diecisiete años en aquel lejano año de 1944 en que decidió dejarlo todo para consagrarse en cuerpo y alma a la Compañía de Jesús, que acabaría llevándole a convertirse en sacerdote, teólogo y cardenal de la diócesis más grande de Europa. Esta y muchas otras cosas nos refiere el vaticanista Andrea Tornielli en esta semblanza, en absoluto hagiográfica, que retrata la parábola humana, espiritual e institucional de la vida de una de las figuras más carismáticas de la Iglesia católica posconciliar.
Cardenal de la atención a los últimos y la acogida a los inmigrantes, del ecumenismo y la confrontación con otras religiones, Martini fue también un hombre atento a las instituciones y a la ética pública, capaz de increpar a políticos de derechas y de izquierdas y de denunciar con años de anticipación la corrupción de Tangentopoli. Biblista de fama internacional, no desdeñó indagar las cuestiones más complejas: desde el final de la vida hasta la fecundación artificial, desde el celibato de los sacerdotes hasta la acogida pastoral de los divorciados y los homosexuales, desde la escuela católica hasta la libertad de educación...
Señalado por la prensa como «papable», adujo como impedimento para acceder al solio pontificio la enfermedad de Parkinson, ya en fase avanzada, reafirmando su deseo de dedicarse a sus antiguas pasiones: Jerusalén y el estudio de las Sagradas Escrituras.
Entre bastidores emerge en estas páginas la vida de un hombre que fue capaz de marcar de modo significativo la sociedad italiana y el catolicismo en los años de la secularización y la crisis de los creyentes y que en su última entrevista afirmó: «La Iglesia lleva un retraso de 200 años».
¿Qué me sienta bien cuando las cosas no me van tan bien? ¿Qué me ayuda cuando surgen en mí sentimientos negativos, cuando experimento decepciones o incluso recibo ofensas? ¿Dónde encuentro remedios para mi alma, a veces desorientada o triste?
Anselm Grün se sabe unido a la tradición y habla, además, desde su experiencia personal: «Lo que le hace bien al cuerpo, le hace bien igualmente al alma. Lo que importa en nuestra vida es tener el comportamiento debido con el cuerpo y con el alma, cuidar del uno y de la otra. No se requieren para ello técnicas complicadas como las que hoy se recomiendan a menudo en los manuales de consulta. Se trata, más bien, de cultivar la sensibilidad hacia el cuerpo y hacia el alma. Cuando presto atención a mi cuerpo, estoy mostrando un profundo respeto a mi alma».
Ocupan el centro del libro realidades absolutamente sencillas: placer y lágrimas, amigos, sueño y baños..., y también la oración.
Anselm Grün ha complementado los «siete consuelos» de que habla ya Tomás de Aquino con experiencias que han tenido importancia en su vida: escuchar música, caminar, leer o jugar, o también la deliciosa satisfacción que puede ir asociada a un vaso de vino. La felicidad no está en algún lugar indeterminado. Está en el centro de nuestra vida.
ANSELM GRÜN, doctor en teología y administrador de la abadía de Münsterschwarzach, es uno de los maestros espirituales más apreciados en la actualidad. Las ediciones de sus libros, traducidos a más de veinte idiomas, alcanzan millones de ejemplares. Sal Terrae, que ha publicado una sesentena de obras suyas, es su editorial de referencia en lengua española.
La liturgia es el centro de la vida cristiana. Pero ¿hasta qué punto está capacitado para ella el hombre moderno y qué forma de liturgia es hoy la adecuada y puede ser celebrada con espíritu viviente para glorificación de Dios y salvación de los hombres?
«La liturgia es la cumbre a la cual tiende la actividad de la Iglesia y, al mismo tiempo, la fuente de donde mana toda su fuerza» (SC 10). Quien desee experimentar de nuevo el carácter fundamental y decisivo de la liturgia, de acuerdo con estas palabras del concilio Vaticano II, debe adquirir una y otra vez clara conciencia de las cuestiones centrales de la liturgia desde sus perspectivas teológicas y espirituales. Los autores de este volumen ofrecen una visión iluminadora de la amplitud y las múltiples facetas de la liturgia. Señalan perspectivas en el actual debate sobre su reforma e indican caminos para su renovación, revitalización y ahondamiento.
«Lo que necesitamos es una reforma de nuestras reformas litúrgicas que vaya hasta el fondo, una renovada cultura litúrgica sacramental en la que la liturgia sea epifanía, en la que se alcance la experiencia de la infinita excelsitud y la ilimitada fascinación del Dios santo en los momentos de quietud, contemplación y escucha, adoración y alabanza» (Walter Kasper).
GEORGE AUGUSTIN, sacerdote palotino y doctor en teología, dirige el Instituto de Teología, Ecumenismo y Espiritualidad «Cardenal Walter Kasper», centro vinculado a la Escuela Superior de Filosofía y Teología de Vallendar (Alemania), donde es profesor de teología fundamental y dogmática. Además, acompaña espiritualmente a sacerdotes en la diócesis de Rottemburgo-Stuttgart. En la Editorial Sal Terrae ha publicado sus libros: Llamados a la alegría: el gozo de ser sacerdote y, como editor, El desafío de la nueva evangelización y El problema de Dios, hoy.
ALBERT GERHARDS. Doctor en teología, Profesor de liturgia en la Facultad de Teología Católica de la Universidad de Bonn.
WINFRIED HAUNERLAND. Doctor en teología, Profesor de liturgia en la Facultad de Teología Católica de la Ludwig-Maximilians-Universität (Múnich).
WALTER KASPER. Cardenal, Presidente emérito del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos (Roma).
KURT KOCH. Cardenal, Presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos (Roma).
El credo es el resumen más solemne y autorizado de los contenidos de la fe de la Iglesia, que se recita en pie en los momentos solemnes de la liturgia, como son el bautismo y la celebración de la eucaristía. Este año de la fe convocado por el papa Benedicto XVI nos invita de modo explícito a conocerlo mejor y a comprender y asimilar su contenido, para enriquecimiento personal y para poderlo presentar y explicar a otras personas: «Habrá que intensificar la reflexión sobre la fe para ayudar a todos los creyentes en Cristo a que su adhesión al Evangelio sea más consciente y vigorosa, sobre todo en un momento de profundo cambio como el que la humanidad está viviendo ... Deseamos que este Año suscite en todo creyente la aspiración a confesar la fe con plenitud y renovada convicción, con confianza y esperanza» (BENEDICTO XVI, Porta fidei, 8 y 9).
Este libro nace, precisamente, con motivo de este año de la fe. Cuatro profesores de la Facultad de Teología de la Universidad Comillas (Madrid) pronunciaron sendas conferencias dirigidas al público en general en torno al credo. La estructura del libro es muy clara: se comienza por clarificar en qué consiste creer, para, a continuación, desplegar el contenido fundamental de cada uno de los artículos del credo: creo en Dios Padre, creo en Jesucristo, creo en el Espíritu Santo, creo en la Iglesia... La intención de los autores ha sido proporcionar una ayuda para entender y gustar el credo.
ÁNGEL CORDOVILLA PÉREZ es profesor de teología dogmática en la Universidad Pontificia Comillas. Doctorado en la Universidad Gregoriana con una tesis sobre K. Rahner y H.U. von Balthasar, es autor de El misterio de Dios trinitario. Dios-con-nosotros (Madrid 2012) y Crisis de Dios y crisis de fe. Volver a lo esencial (Santander 2012).
NURYA MARTÍNEZ-GAYOL, ACI, es profesora de teología dogmática en la Universidad Pontificia Comillas. Doctorada en la Universidad Gregoriana con una tesis sobre la Gloria de Dios en San Ignacio, es autora de Los excesos del amor (Madrid 2012).
PEDRO RODRÍGUEZ PANIZO es profesor de teología fundamental en la Universidad Pontificia Comillas. Se doctoró en la Universidad Gregoriana con una tesis sobre R.C. Zaehner y es autor de Hacia una teología del cine (Santander 2001) y Disonancia acorde (Madrid 2007).
GABINO URÍBARRI BILBAO, SJ, profesor de teología dogmática y decano de la Facultad de Teología de la Universidad Pontificia Comillas, se doctoró en esta universidad con una tesis sobre controversias trinitarias en los siglos II y III. Es autor deLa singular humanidad de Jesucristo (Madrid 2008).