La teología actual, imitando el comportamiento de los clásicos, presta un especial interés al tratado sobre los sacramentos en general. Pues es en ellos donde se abre, de generación en generación, el espacio del encuentro con Cristo en la comunión de la Iglesia. Los sacramentos nos dicen que el mensaje de Jesús se arraiga siempre en las relaciones concretas que forjamos en nuestra carne; que es allí donde resuena la confesión de fe y se enuncian sus mandamientos, los cuales se mantienen siempre, por eso, a ras de nuestra ruta terrena. Y así, la clara doctrina y la alta moral de Jesús se presentan, no como horizonte último al que tender asintóticamente, sino como fundamento concreto para edificar la vida, fuera del cual no se tiene en pie nuestro edificio.
José Granados García, DCJM (Madrid 1970) es vicepresidente del Pontificio Instituto Juan Pablo II para estudios sobre el matrimonio y la familia (Universidad Lateranense, Roma), donde enseña como catedrático de teología dogmática del matrimonio y la familia. También colabora como profesor invitado en la Pontificia Universidad Gregoriana. Entre sus publicaciones cabe destacar: Teología del tiempo: ensayo sobre la memoria, la promesa y la fecundidad (2012), Una sola carne en un solo Espíritu: Teología del matrimonio (2014), Eucaristía y divorcio: ¿Hacia un cambio de doctrina? Ensayo sobre la fecundidad de la enseñanza cristiana (2014) y Los signos del samaritano. Sacramentos y misericordia (2015).
La Teología fundamental aquí propuesta se comprende como la disciplina que quiere fundar los principios del conocimiento teológico y, a su vez, justificar la credibilidad de la revelación cristiana para poder «dar respuesta a todo el que os pida razón de vuestra esperanza» (1 Pe 3,15). De hecho, a los cincuenta años de la conclusión del Concilio Vaticano II se puede constatar la necesidad renovada de un talante teológico-fundamental para la teología y para la vida eclesial, particularmente en una Iglesia que, para responder al momento en que vivimos, el papa Francisco la ha urgido a que se sitúe «en salida » y que procure «desarrollar un nuevo discurso de la credibilidad, una original apologética que ayude a crear disposiciones para que el Evangelio sea escuchado por todos» (Evangelii gaudium, 132). Por esto, la palabra final de esta Teología fundamental apunta a la vía del testimonio como paradigma de la credibilidad de la Iglesia y aun de toda la revelación y de su centro y plenitud que es Jesucristo: «el testigo fiel» (Ap 1,5). De ahí que de forma relevante «la credibilidad de la Iglesia pase a través del camino del amor misericordioso y compasivo» (Misericordiae vultus, 10).
Salvador Pié-Ninot (Barcelona, 1941), presbítero, estudió teología en Barcelona y Roma y es catedrático emérito de la Facultad de Teología de Cataluña en Barcelona y de la Pontificia Universidad Gregoriana en Roma. Fue presidente de los Servicios Religiosos de los Juegos Olímpicos de Barcelona de 1992 y ha sido experto en los Sínodos sobre la Palabra de Dios y la nueva Evangelización, así como en los Jubileos del Segundo Milenio y de la Misericordia. Actualmente es presidente de la Fundación Diocesana Blanquerna de la Universitat Ramon Llull y párroco de la Basílica de Santa María del Mar de Barcelona. Entre los numerosos libros que ha publicado destacan: Diccionario de Teología fundamental (32010); Dei Verbum religiose audiens (1999); La Teología fundamental (72009); Eclesiología (32015).
El pecado y la gracia son las dos coordenadas que definen la vida del hombre sobre la tierra. En efecto, ha sido desde el primer momento amado por Dios, ha sido invitado a participar de su vida. Pero a la vez, y desde el comienzo de la historia, ha sido infiel a la amistad que su Creador le ofrecía y ha querido determinar su vida sin referencia a Dios. Pablo ha explicado esta condición del hombre con su conocido paralelismo entre Adán y Cristo. Si a causa de Adán todos los hombres mueren, en Cristo todos son llamados a la vida. Pero este paralelismo siempre a favor de Jesús y de su gracia. Adán, el primer hombre, es figura del que debía venir. En Jesús, Dios Padre ha reconciliado el mundo consigo y nos ha llamado a la filiación divina. Esta invitación a la plenitud de la vida pide también la libre aceptación del hombre.
Luis F. Ladaria, SJ, (Manacor, Mallorca 1944), estudió Teología en la Univ. Pontificia Comillas de Madrid, en la Philosophisch-Theologische Hoctschule St Georgen de Fráncfort M. y en la Univ. Gregoriana de Roma, donde obtuvo el doctorado. Ha enseñado teología dogmática en la Fac. de Teología de la Univ. Pontificia Comillas y es actualmente profesor de la misma disciplina en la Fac. de Teología de la Univ. Gregoriana. En 2008 fue nombrado Arzobispo Secretario de la Cong. para la Doctrina de la Fe y Consultor de la Cong. para los Obispos, y en 2009, Consultor del Pont. Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos y Consultor del Pont. Consejo para la Pastoral de la Salud. Entre sus publicaciones destacan El Espíritu Santo en San Hilario de Poitiers (1977), El Dios vivo y verdadero. El misterio de la Trinidad (42010), Antropologia teologica (52011) y las ediciones de La Trinidad (1986) y el Comentario al Evangelio de san Mateo (2010), ambas de san Hilario de Poitiers.
Si la teología es hablar de Dios, conjugando la búsqueda y el anhelo del hombre con la palabra y la revelación de Dios, el tratado sobre el misterio trinitario constituye su centro y fundamento. Pero no se trata de hablar de un dios cualquiera, ni siquiera de él como Misterio sin más, sino del Dios que se ha revelado en su Hijo y se nos ha dado en el Espíritu. La fe trinitaria no es un enigma indescifrable, un jeroglífico irresoluble, un dogma sinsentido. La teología trinitaria tiene como tarea pensar a fondo esta revelación y comunicación de Dios. ¿Cómo es posible que Dios sin dejar de ser él pueda entrar en el corazón mismo de la vida humana en historia y trascendencia ofreciendo a la realidad mundana la comunión definitiva con él? ¿Cómo es ese Dios desde toda la eternidad para que su revelación histórica sea de esta manera? La teología cristiana responde a estas preguntas afirmando que Dios es aquel que es y ha querido revelarse para siempre como el Dios-con-nosotros: Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Ángel Cordovilla Pérez (Salamanca 1968) es sacerdote. Estudió en Salamanca, Roma y Múnich. Profesor de teología dogmática en la Universidad Pontificia Comillas. Entre sus obras cabe destacar Gloria de Dios y salvación del hombre (Salamanca 1997); Gramática de la encarnación. La teología de Karl Rahner y Hans Urs von Balthasar (Madrid 2004); El ejercicio de la teología (Salamanca 2007); Crisis de Dios y crisis de fe. Volver a lo esencial (Santander 2012).
Jesús de Nazaret fue acreditado por Dios con palabras y milagros, con la resurrección y el don del Espíritu. Su historia, mensaje y destino engendraron la fe en quienes lo reconocieron como Mesías de Israel, Salvador del mundo, Señor de la Iglesia y del cosmos, Hijo de Dios. La cristología es el origen histórico, el fundamento permanente y el principio generador de todos los demás tratados teológicos. Con ella están en pie o caen la fe, la iglesia y la teología. Cristo es el pionero y consumador de la fe; el fundamento, la forma y el futuro del cristianismo. Él es la esperanza del mundo. Este manual de cristología aborda en sus tres partes la cristología bíblica, la histórica y la sistemática. A ellas añade el autor una notable conclusión en que desarrolla conceptos como cristofanía y cristoterapia.
No es de hoy la pregunta sobre cómo debe ser el comportamiento de todos los ciudadanos —gobernantes y gobernados—en los asuntos comunes públicos. Por esa razón, la primera parte de este libro recoge la reflexión milenaria sobre estos temas nacida en el seno de la Iglesia, desde el Nuevo Testamento hasta nuestros días.
Pero estos interrogantes se siguen planteando hoy, cuando la política se ha hecho más compleja dentro de cada Estado y a nivel mundial.
Por eso, este Manual de Moral política tiene dos partes: histórica y sistemática. En la primera aparecen las reflexiones de muchos pensadores y jerarcas de la Iglesia, enmarcadas en el contexto en el que surgieron, con frecuencia en diálogo con otras visiones y con diferencias dentro de la Iglesia. En la segunda se pasa revista a las cuestiones generales que nos planteamos actualmente.
Todo ello en el marco de lo que es la doctrina social de la Iglesia: principios de reflexión, criterios de juicio y orientaciones para la acción
A la homilética se le dedica escasa o nula atención en los planes de estudio de la mayoría de los centros teológicos españoles, pese a las recomendaciones del Concilio Vaticano II y de la Conferencia Episcopal Española.
Esta obra pretende prestar un servicio tanto a los estudiantes de Teología como a los sacerdotes inmersos en el ministerio pastoral. En la introducción se hace un recorrido por las diversas tendencias en la homilética que han aparecido durante el siglo XX y se pergeña una historia de la homilética a lo largo de los siglos.
La primera parte está dedicada a la preparación de la predicación. En primer lugar, la escucha de la Palabra de Dios y la escucha de la comunidad. De esos dos polos surgirá la predicación. En esta tarea se presta atención al papel del predicador y al lenguaje, no olvidando el aspecto práctico de la elaboración de un guión y la ayuda que pueden prestar diversos materiales para la preparación de la homilía.
En la segunda parte se estudian diversos tipos de predicación, con atención especial a la homilía y a las predicaciones en bautizos, bodas y funerales. Se cierra esta parte con una reflexión sobre la predicación desde el punto de vista de la comunicación. Completa la obra un apéndice que presenta un entrenamiento en la expresión oral
En el presente manual se ha puesto especial empeño en ofrecer, en forma concisa y sistemática, pero lo más completa posible, toda la riqueza doctrinal que la Iglesia, desde distintas sensibilidades y en épocas y regiones distantes entre sí, ha ido descubriendo y expresando en su liturgia y por la voz de sus teólogos acerca de los dos primeros sacramentos de la iniciación cristiana. Se ha pretendido así evitar el reduccionismo empobrecedor que durante largos siglos se había instalado en este campo de la teología. Se presta atención preferente, además del momento fundante que representan los tiempos del Nuevo Testamento, al pensamiento de los Santos Padres; se ha procurado recuperar su método mistagógico, fundado en la tipología y el simbolismo litúrgico. Esta obra es fruto de la convicción de que sólo desde una visión integradora se puede abordar con cierta garantía la embrollada problemática originada en nuestros días sobre estos sacramentos.
El hombre, con palabras de Zubiri, «no tiene, consiste en religión», o sea, es religión, religación respecto de lo divino. Lo que uno tiene puede perderlo. Lo que se es, no se deja de serlo mientras se es o existe. De ahí la universalidad del sentido religioso. De ahí que quien no acepta la religión tradicional se incorporará a otra, tal vez a una secta de signo religioso, mágico o ideológico, incluso elaborará su propia religión alternativa, aunque profese no ser religioso, creyente. Aunque el ideal sea la unidad, la experiencia hay y habrá no una, sino muchas religiones. La Historia de las religiones es como el punto de partida de todas las llamadas «ciencias de la religión»: Filosofía de la religión, Sociología de la religión, Psicología de la religión, etc., así como de la recién nacida Teología/s de la religión o religiones. Todas presuponen el conocimiento de las diversas religiones, al menos en sus líneas generales y en sus rasgos individuantes caracterizadores.
Manuel Guerra Gómez ha publicado más de cien artículos sobre temas filológico-teológicos y de historiografía religiosa, y 26 libros, entre ellos: Diccionario enciclopédico de las sectas, 2ª ed. (BAC, 2005), Las sectas y su invasión de mundo hispano: una guía (Eunsa, 2003), Evolución del universo, de la vida y del hombre. ¿El hombre, compuesto de cuerpo físico o material, cuerpo energético o inmaterial y alma espiritual? (Intereconomía, 2009), 100 preguntas clave sobre New Age (Monte Carmelo, 2004), El enigma del hombre, 3ª ed. (Eunsa, 1999), La trama masónica, 4ª ed.(Styria, 2008), Jesucristo y nosotros (Ucam, 2002).
El interés por la moral y la ética es innegable. Es imposible concebir un mundo y una sociedad sin repensar las pautas éticas del comportamiento humano. Esta obra ha sido concebida de forma que pueda prestar un servicio como manual de Teología moral fundamental. La primera parte comprende cuatro capítulos que tratan de ofrecer una fundamentación a su razonamiento. La segunda parte recoge, en otros cinco capítulos, el tratamiento tradicional de las categorías éticas básicas, como el comportamiento responsable, la ley y la conciencia, el pecado, la conversión y la virtud. Al tratamiento tradicional de la moral fundamental se añaden aquí continuas referencias a las ciencias humanas, a la Sagrada Escritura y al magisterio reciente de la Iglesia.
José Román Flecha Andrés (León, 1941). Es licenciado en filosofía por la Univ. de Valencia, en Teología por la Univ. Gregoriana y doctor en Teología por la Academia Alfonsiana de Roma. Profesor en el Seminario de León y catedrático de Teología moral en la Univ. de Salamanca. Miembro del Hastings Cerner for Bioethics, de Nueva York, y de la C. E. para la Defensa de la Vida. Entre sus numerosas obras destacan: Actitudes y comportamiento cristiano (Madrid, 1983); La familia, lugar de evangelización (Madrid, 1983); La pregunta moral ante la eutanasia (Salamanca, 1985); El hombre y sus esperanzas (Santiago de Chile, 1988); El misterio del hombre (Santiago de Chile, 1990); Sed perfectos (Madrid, 1992); Buscadores de Dios, 2 vols. (Madrid 1992-1993).
Ni el espiritualismo descarnado que deja al margen el mundo v la historia del hombre, ni el inmanentismo que distingue a las utopías intrahistóricas traducen fielmente la genuina esperanza cristiana. Lo que singulariza a ésta, y lo que caracteriza, por consiguiente, un verdadero discurso escatológico, es la paradójica imbricación de inmanencia y trascendencia, presente y futuro, ya y todavía no de la salvación que Dios ha acordado en Cristo a toda la humanidad y toda la creación.
Partiendo, pues, de una orientación que insiste en la relación entre este mundo y el mundo futuro, entre compromiso temporal y esperanza teologal, el autor articula su obra en dos grandes partes. En la primera aborda la cuestión del origen, desarrollo y fijación definitiva de las ideas escatológicas en el Antiguo y en el Nuevo Testamento; en la segunda presenta una rigurosa visión sistemática de la escatología cristiana, en su doble aspecto: colectivo (parusía, resurrección de los muertos, nueva creación, vida eterna, muerte eterna) e individual (muerte y purgatorio).
Juan Luis Ruiz de la Peña Solar nació en Vegadeo (Asturias) de 1937 y murió en Oviedo el 27 de septiembre de 1996. Después de cursar estudios eclesiásticos en el Seminario de Oviedo, se doctoró en Teología en la Universidad Gregoriana de Roma en 1970. Fue profesor de Teología en el Seminario de Oviedo yen la Facultad de Teología del Norte de España, y catedrático de Antropología Teológica en la Universidad Pontificia de Salamanca. En su producción literaria destacan las obras siguientes: La otra dimensión. Escatología cristiana (Madrid 1975); Las nuevas antropologías. Un reto a la teología (Santander 1983); La muerte; destino humano y esperanza cristiana (Madrid 1984); Teología de la creación (Santander 1986); Crisis y apología de la fe (Santander 1994)
La presente obra pretende ofrecer una visión sistemática de la eclesiología, católica, conjugando la perspectiva fundamental y la dogmática en su armonía y coherencia recíprocas. Procura situar la reflexión sobre los diversos temas en el contexto de la problemática contemporánea para identificar la postura común de la teología actual a la luz de la revelación, de la tradición y del magisterio. Esta opinión común incluye con nitidez las dimensiones bíblica, ecuménica, misionera y pastoral. La perspectiva de la eclesiología de comunión permite recoger e iluminar la experiencia vivida de la Iglesia, reconocer el protagonismo y la identidad de cada bautizado, valorar de modo equilibrado las diversas realizaciones de la Iglesia. De este modo entronca con las aspiraciones y necesidades de la actual conciencia y sensibilidad eclesial, para descubrir el gozo de la pertenencia a la Iglesia. Desde diversas perspectivas se confiesa la Iglesia una, santa, católica y apostólica, que recibe su identidad y su misión del ministerio del Dios Trinidad que se revela como salvador de un modo privilegiado en la Iglesia.
l derecho del Pueblo de Dios es el primero de dos volúmenes del comentario completo al Código de Derecho Canónico elaborado por profesores de la Universidad Pontificia de Salamanca. En él se abordan los aspectos generales del Derecho que dan título al libro, estudiando el estatuto jurídico común de todos los fieles cristianos y el específico de los laicos, ministros sagrados o clérigos, miembros de los institutos de Vida Consagrada, la configuración de las asociaciones de fieles y las estructuras de gobierno de la Iglesia. El estudio se completa con dos temas necesarios de carácter introductorio: el primero es un interesante recorrido por la Historia del Derecho de la Iglesia, y el segundo está referido a las fuentes del Derecho Canónico y a la persona y su actividad jurídica en la Iglesia.
Aun siendo conscientes de las limitaciones que conlleva elaborar un comentario en el que intervienen varios autores, creemos que este volumen puede servir de referencia no sólo para los estudiantes de facultades, institutos de ciencias religiosas o seminarios, sino para todos aquellos que necesitan una aproximación sintética y rigurosa al Derecho de la Iglesia, o para quienes, en el ejercicio de la misión de apacentar el Pueblo de Dios, precisan una primera orientación en diversos temas de relevancia para la vida de la Iglesia
Con este segundo volumen se completa el comentario al Derecho de la Iglesia elaborado por el grupo de profesores de la Facultad de Derecho Canónico de la Universidad Pontificia de Salamanca. Lleva por título El derecho en la misión de la Iglesia, y en él se abordan los diferentes aspectos de las funciones de enseñar, santificar y regir tal y como vienen recogidos en los libros III al VII del Código de Derecho Canónico.
El primer tema está orientado al estudio de la misión evangelizadora de la Iglesia que se desarrolla tanto ad intra formando la conciencia de los fieles, como ad extra, anunciando el Evangelio al hombre de hoy. Junto a la misión de enseñar, se analiza en el segundo tema la función de santificar a la Iglesia, que se ejerce principalmente por la celebración de la liturgia y de los sacramentos, con una especial referencia al matrimonio canónico. El estudio de la adquisición, posesión y administración de los bienes temporales de la Iglesia, la revisión del Derecho penal y la explicación de las diversas instituciones procesales canónicas completan el estudio. Como conclusión se analizan las relaciones de la Iglesia con las instituciones civiles desde el punto de vista del Derecho público eclesiástico y del Derecho eclesiástico del Estado.
Estamos seguros de que la obra completa va a contribuir muy positivamente no sólo a la formación de los futuros sacerdotes, sino también a la orientación de otros miembros del Pueblo de Dios —pastores, consagrados o laicos— que solicitan un acercamiento más detallado y accesible al Derecho de la Iglesia
La Eucaristía es el sacramento, de los sacramentos de la Iglesia, en el que se centra y contentra la totalidad de la vida cristiana. Por eso, el Vaticano II no duda en llamarla "fuente y cumbre de toda la vida cristiana" (LG 11); "Cumbre a la cual tiende la actividad de la Iglesia y, al mismo tiempo, la fuente de donde mana toda su fuerza" (SC 10). Conscientes de esa centralidad, presentamos este estudio teológico, sistemático y global, con la intención de ayudar a comprender, celebrar y vivir mejor el misterio eucarístico. Nuestro método quiere ser, a la vez: 1) "Unitario", destacando la unidad entre celebración litúrgica y reflexión teológica (logos y símbolo, "lex orandi" y "lex credendi"). 2) "Pascual", porque creemos que la pascua es la clave fundamental para comprender todos los aspectos de la eucaristía. 2) "Mistagógico", valorando lo visible signal y lo referente vital , para penetrar en el contenido y el misterio invisible
La arqueología cristiana no resulta accesible al gran público porque generalmente se piensa que es un tema reservado a los especialistas; pero no debería ser así, porque la arqueología cristiana es de suma importancia a fin de recabar, en aquellos primeros siglos de expansión del Evangelio, modelos de identificación que pueden introducir a los creyentes de hoy en una nueva manera de vivir y experimentar la fe en la perspectiva del Tercer Milenio. Este libro no está destinado a los arqueólogos profesionales, sino a un público más amplio, porque no tiene más pretensión que ser una «mínima aproximación», a través de los vestigios arqueológicos, a la vida de los primeros cristianos, que tantas lecciones pueden dar a los cristianos de hoy sobre cómo se ha de vivir y expresar la propia fe y la propia esperanza; y sobre todo, cómo llevar a cabo la inculturación del mensaje evangélico en las diferentes culturas actuales.
Jesús Álvarez Gómez, misionero claretiano, nació en San Pedro de Trones (León) en 1934. Es doctor en Historia de la Iglesia por la Universidad Gregoriana (Roma) y profesor de Arqueología cristiana en la Facultad de Teología «San Dámaso» de Madrid. Entre sus numerosas publicaciones, cabe destacar Historia de la vida religiosa (3 vols.).
Este volumen presenta los dos últimos siglos de la historia de la Iglesia. Dos siglos apasionantes, difíciles y aparentemente confusos. El Espíritu sigue presente y actuante en vasijas de barro, pero estas son más variadas, complejas y llenas de sentidos diversos que nunca. La época contemporánea ha quedado marcada por la secularización de la sociedad; los principios de la Ilustración y de la revolución francesa fueron impregnando poco a poco las instituciones civiles y las mentes de los pueblos. Las sociedades buscaron nuevos modos de organización, extendiéndose un modelo de política laica que supuso una marginalización y maltrato de la Iglesia. La tradicional compenetración entre trono y altar, único sustento que parecía ser posible para que la Iglesia llevase a cabo su misión, iba resquebrajándose progresivamente. En este contexto, un urgente "aggiornamento" eclesial se fue planteado como un reto ineludible. Se multiplicaron las nuevas congregaciones religiosas, se purificó la liturgia y las manifestaciones de religiosidad popular, los estudios en los seminarios, adquirieron un nivel antes inexistente, cambiaron los métodos pastorales. El Vaticano II manifestó una Iglesia que optaba por la renovación interior y por un nuevo modo de estar presente en la sociedad.
La serie comprende cuatro volúmenes: I: Edad Antigua, por Jesús Álvarez Gómez (SF0025); II: Edad Media, por José Sánchez Herrero (SF0030); III: Edad Moderna, por José García Oro (SF0031); IV: Edad Contemporánea, por Juan María Laboa (SF0027).
Juan María Laboa (Pasajes de San Juan, Guipúzcoa, 1919) es sacerdote. Ha sido profesor en las universidades Complutense, San Pablo y Pontificia de Salamanca. Es catedrático de la Univ. Pontificia Comillas y dirige la revista XX siglos. Entre sus últimas publicaciones cabe destacar: Atlas histórico del cristianismo (1999); Historia de la Iglesia Católica. V: Edad contemporánea (2000); La Iglesia en España (2000).
Seguramente la cuestión moral más debatida en el ámbito académico es la justificación del juicio ético, que centra de lleno la Teología Moral Fundamental. Pero las cuestiones que más preocupan al hombre de la calle se encuentran en el ámbito de la Teología Moral de la Persona. Las relativas al origen y el fin de la vida, así como al respeto que merece, son estudiadas hoy por la Bioética. Otras plantean los eternos interrogantes del amor y la sexualidad.
A estos temas se acerca el presente manual. Elaborado y revisado una y otra vez a lo largo de muchos años, ofrece un resumen de la doctrina cristiana sobre estos temas eternos. Su estudio se acerca con ánimo dialogante a las ciencias humanas, escucha la voz de las tradiciones bíblicas y presta una sincera atención a la doctrina reciente del Magisterio de la Iglesia católica. Sobre esas bases se trata de ofrecer los criterios para la elaboración de un juicio ético sobre el comportamiento humano en relación con la sexualidad. Esta es entendida, en clave personalista, como el lenguaje privilegiado del compromiso del amor.
Lejos de caer en el manido tópico de las restricciones, este manual ofrece, en su parte central y más importante, una cuidada reflexión antropológica sobre los cuatro valores que fundamentan y articulan la moral de la sexualidad: el cuerpo y el placer, el amor y la fecundidad
Adentrarse en su propio misterio ha sido y sigue siendo una preocupación constante del hombre en todos los tiempos. La teología colabora con las demás ciencias antropológicas aportando la respuesta que, desde la palabra revelada, puede darse a la pregunta: ¿Qué es el hombre? En el presente libro abordamos solo el aspecto fundamental. De ahí su título: Antropología teológica fundamental. El hombre es una creatura que ha de ser interpretada dentro del ser y del actuar del mundo. Si las diversas antropologías se limitan a estudiar los datos que suministran la experiencia y la razón humana, la Teología estudia al hombre a la luz de la revelación, con una metodología particular. Tres temas abarca este texto: la creación, el hombre y los seres, ángeles y demonios, que solo desde la fe pueden ser conocidos y que influyen en la vida del hombre por su intervención en el proyecto divino de salvación.
Alejandro Martínez Sierra, SJ, es licenciado en Filosofía por la Univ. Pont. Comillas y doctor en Teología por la Pont. Univ. Gregoriana. Ha explicado diversas asignaturas de Teología, entre ellas la Antropología teológica, en la Univ. de Comillas y en las Facultades de Teología de Burgos, San Cugat del Vallés (Barcelona), Univ. Javeriana de Bogotá y Univ. del Salvador en Buenos Aires. Es miembro de la Pontificia Academia Mariana Internacional (Roma). Entre sus obras cabe señalar: La prueba escriturística de los arrianos, según San Hilario de Poitier (Santander 1965); Antropología teológica (Burgos 1982); María, la Madre del Señor (Madrid 1988); María, camino del hombre (Madrid 1991).
El Concilio Vaticano II manifestó expresamente que la Iglesia era amiga de las bellas artes, relacionadas con la belleza divina, y reconoció que los medios artísticos de comunicación social prestan una valiosa ayuda a la humanidad; por lo que es necesario fomentar y conservar en todas las personas las facultades de contemplación, intuición y admiración que conducen a la sabiduría. El presente manual es una contribución a esa tarea. Conscientes de la amplitud del tema abordamos este reto eligiendo una metodología de compendio, que obliga reducir a lo esencial la crónica de cada capítulo histórico y a omitir muchos nombres que serán conocidos, sin duda, por cualquier lector medianamente culto. Pero tal necesidad no hace que esta «historia» se limite a u enumeración de nombres propios y a una simple descripción de formas y estilos. Intentaremos ahondar en el lenguaje del arte.
Juan Plazaola Artola (San Sebastián, 1919). Ingresó en la Compañía de Jesús en 1936. Es doctor por la Universidad de París (Letras) y por la Complutense (Filosofía). Ha sido profesor de Estética y catedrático de Historia del Arte, así como colaborador en varias revistas especializadas Entre sus múltiples obras cabe destacar: El arte sacro actual. Teoría, panorama, documentos (Madrid 1965) Introducción a la estética (Madrid 1973, Bilbao 21991) Futuro del arte sacro (Bilbao 1973), El arte y el hombre de hoy. Apuntes para una filosofía del arte contemporáneo (Valladolid 1978), Historia y sentido del arte cristiano (Madrid 1996).