El sacrificio está en el origen de la cultura humana. El griego queda a oscuras, los vedas se acercan a su desvelamiento, pero sólo el cristianismo lo pone en evidencia y lo desamortiza. Y, con esta acción desmitificadora, deja también en evidencia la hipocresía de todas las nuevas formas míticas de encubrimiento de las violencias humanas, que justifican crímenes sacrificiales interminables en aras de la paz o de objetivos supuestamente humanistas.
Un libro breve, pero definitivo como piedra angular del edificio girardiano, pues el sacrificio no es un tema cualquiera de la antropología o de la teología: es el tema humano por excelencia.
Quien pretende hoy vivir en sociedad necesita dar razón de lo que piensa, argumentar. La discusión acalorada paraliza a quien discute, dificultando la búsqueda honrada de soluciones y certezas.
El filósofo Higinio Marín reflexiona en esta ocasión sobre variados asuntos de interés público: costumbres y cambios culturales, ideas en ascenso e ideas en declive, prejuicios y prácticas políticas. Invita a la lectura pausada, al debate sereno y a la discrepancia sin hostilidades: un magnífico camino para la higiene intelectual.
Higinio Marín es profesor de Antropología Filosófica en la UCH-CEU, del Instituto Pontificio Juan Pablo II de Valencia, del Instituto de Filosofía Edith Stein de Granada y del Fundesem Business School de Alicante. Es autor de numerosas publicaciones, entre las que cabe destacar Teoría de la cordura y de los hábitos del corazón (2010) y El hombre y sus alrededores. Estudios de filosofía del hombre y de la cultura (2013).
En esta obra, Claude Lévi-Strauss expone y lleva a la práctica el método estructural a cuyo desarrollo va íntimamente unido su nombre. Al abordar los grandes problemas de la antropología social -de las reglas del parentesco y del matrimonio a la prohibición del incesto y la exogamia, pasando por los ritos y prácticas de la magia-, el texto analiza los problemas metodológicos que plantea el estructuralismo, y define e ilustra la ambición del autor respecto a plantear un verdadero análisis científico de los fenómenos humanos sin traicionarlos, es decir, sin hacerles perder nada de su riqueza ni de los sutiles matices derivados de su diversidad. De ahí que, junto a aspectos de la realidad social -tan complejos que el observador debe contentarse con describirlos-, haya otros que el análisis estructural logra alcanzar y cuya regularidad pone de manifiesto. De este modo, la etnografía -ayudada por la historia, la lingüística, la sociología, la psicología y el psicoanálisis-contribuye a introducir métodos rigurosos al amparo de los cuales quizás un día las ciencias humanas logren la categoría de ciencias de pleno derecho.
Claude Lévi-Strauss
Bruselas, 28 de Noviembre de 1908 | París, 30 de Octubre de 2009
Claude Lévi-Strauss (Bruselas, 28 de noviembre de 1908 – París, 30 de octubre de 2009) realizó sus estudios de Derecho y Filosofía en la Sorbona. Después de la Segunda Guerra Mundial, se trasladó a EEUU donde impartió clases en la New School for Social Research de Nueva York. El libro Las estructuras elementales de parentesco fue una de sus primeras obras en 1949, resultando instantáneamente reconocida como una de las más importantes de la antropología. En 1955 publicó la célebre Tristes tópicos, basado en su experiencia etnográfica en Brasil entre 1935 y 1939.
Era Doctor Honoris Causa en las universidades de Bruselas, Oxford, Chicago, Stirling, Upsal, Montreal...
En línea con Horizonte vertical, que lo precedió, Absoluto relativo se pone como segundo volumen de la serie y centra la reflexión antropológica en la relación entre «naturaleza humana» y «persona humana». Una reflexión no solo necesaria para esclarecer la igual y universal dignidad de todos los seres humanos en la singular e irrepetible individualidad de las personas, sino también para hacer frente a algunos problemas antropológicos en relación con la fe católica.
Ramón Lucas Lucas es profesor de Antropología filosófica y Bioética en la Facultad de Filosofía de la Universidad Gregoriana de Roma y en otras instituciones académicas. Sus publicaciones en estas áreas son numerosas. En la BAC ha publicado Antropología y problemas bioéticos (22005) y Horizonte vertical (2010).
Ensayo de teología sistemática. Dios se comunica con el hombre de una manera privilegiada en Jesucristo, pero también a través de otras mediaciones segundas como la Iglesia. En estas últimas lo hace de manera paradójica.
El primer tomo de esta obra afrontó la cuestión de la revelación de Dios en la modernidad; en el segundo tomo se presentó el itinerario seguido por el Verbo de Dios desde el comienzo de los tiempos hasta hacerse carne en Jesús (II/1).
En esta última entrega, el autor prolonga su reflexión a través de la historia de la Iglesia estudiando las siguientes cuestiones candentes de la misma: su reestructuración, unidad y diversidad, defección de los fieles, escasez de clero, promoción del laicado, autoridad y reparto de responsabilidades, unión de las iglesias, relaciones con las otras religiones, teología del pluralismo religioso…
La preocupación por el futuro de la Iglesia invita a recuperar la inspiración del humanismo evangélico a fin de volver a entrar en comunión con un mundo que se cierra a la llamada de la fe.
Persona y acción es la obra cumbre del pensamiento filosófico de Karol Wojtyla y uno de los textos antropológicos decisivos del siglo XX. Brillante, profundo, original, innovador, poderoso, está, sin duda, destinado a hacerse un hueco entre los grandes clásicos.
Su novedosa concepción de la antropología, la penetración de sus reflexiones en las que se trasluce una rica experiencia vital, la precisión con que acuña conceptos originales, la respuesta a inquietudes seculares sobre el hombre y, sobre todo, el modo genial en que concilia desde una perspectiva personalista la filosofía del ser y de la conciencia, el tomismo y la fenomenología, la convierten en una obra de referencia insoslayable para todo aquel que quiera hacer filosofía caminando sobre hombros de gigantes.
Esta versión ofrece, por primera vez, una versión en español traducida directamente del texto original polaco y, además, de la tercera y definitiva edición de 1994.
Edición de Juan Manuel Burgos y Rafael Mora
Invitación… «Nunca en la historia de la humanidad se han acumulado tantos y tan variados conocimientos sobre el hombre y probablemente nunca se haya ignorado tanto lo que el hombre es». Afirmaciones similares, repetidas por las mejores mentes de los últimos cien años, se encuentran en el origen de este libro. La Invitación que encabeza su título señala la atmósfera de amabilidad en que pretende moverse. Se nos invita a conocer al ser humano —varón y mujer—, proponiendo de forma sencilla y amena los principios imprescindibles para que cada uno llegue a saber quién es y pueda más fácilmente alcanzar la felicidad. Con la ilusión añadida de que la lectura de estas páginas invite a su vez a profundizar en el conocimiento del hombre y a hacer partícipes a los parientes, amigos y colegas del saber así adquirido.
El darwinismo supuso un cambio definitivo en la compresión del ser humano, aunque como teoría científica no implica renunciar a una concepción singular de la especie humana. Somos animales, pero animales bio-culturales, dotados de autoconciencia y libertad, de la capacidad y necesidad de completar con nuestras decisiones lo que la naturaleza nos ha dado, y de poder plantearnos el sentido de nuestra existencia y abrirnos a la pregunta por el fundamento de todo lo que hay.
Trata de cada uno de nosotros. Ofrece una fundamentación inicial acerca del ser, dirigida a todo lector interesado en plantearse preguntas, o encontrar respuestas, sobre las razones últimas de la vida humana. El lugar que ocupan los sentimientos en nuestra existencia; la fundamentación de nuestro carácter digno; qué y cuáles son los valores; cómo saber apreciar lo importante, lo bello, lo serio, sin mezclarlo con lo que no es; qué es la libertad y cómo se mejora; por qué no ser escéptico y cómo acceder y aceptar la verdad; si caben los amigos, cómo y hasta qué punto; si el amor es una quimera; si la felicidad también, o por el contrario, cabe ser feliz y afirmar la vida a pesar de la presencia del dolor, de la traición, de la muerte. Por qué no ser individualista, la importancia del diálogo, la presencia del misterio y de lo religioso en nuestra existencia, el sentido de todo eso…
Se trata de “aprender a ver al hombre con nuestros propios ojos”. O, por lo menos, se trata de intentarlo, de no renunciar a priori a la aventura de pensar. Pensar el ser del hombre desde la perspectiva de lo que “puede llegar a ser”(a eso llamamos excelencia) puede parecer un atrevimiento, más aún en estos tiempos en que casi nadie sabe lo que eso significa, en que se renuncia a la belleza de un reto por miedo a perder la mediocridad de una existencia plana pero acomodada. Aún así, casi todo el mundo desearía ir a más. Nuestro propósito es, cuando menos, plantear algunas inquietudes que ayuden a lanzarse a ese proyecto.
La solidaridad, la dignidad de la persona humana, los derechos del hombre... son valores que se han introducido en nuestra cultura gracias al personalismo. En esta obra se realiza por primera vez una síntesis completa y concisa de todos los aspectos de esta filosofía.
Hoy damos por descontado la vigencia social de valores como la solidaridad, la dignidad de la persona humana, los derechos del hombre, etc. Pero no siempre ha sido así. Estos valores se han incorporado a la cultura europea gracias en parte a la aportación de una corriente filosófica relativamente poco conocida: el personalismo, a la que pertenecen autores como Maritain, Mounier, Karol Wojtyla, von Hildebrand, Gabriel Marcel, Romano Guardini o Julián Marías. En esta obra se realiza por primera vez una síntesis completa y concisa de todos los aspectos de esta filosofía: orígenes culturales e históricos, principales representantes, tesis fundamentales, corrientes más destacadas, aportación al pensamiento contemporáneo, etc. Estamos, por tanto, ante una aportación cultural original y novedosa y también ante una guía práctica y accesible para todos los interesados en esta corriente filosófica.
Sólo Jesucristo nos trae a Dios. Él es Dios-hombre, Dios con nosotros. Y eso es precisamente lo que necesitamos. Necesitamos de la lejanía de Dios, de su divina distancia, como centro y medida de nuestra vida. Y necesitamos a la vez de su cercanía para entender que lo divino no anula lo humano sino que lo lleva a su plenitud. Mirando a Cristo conocemos quién es Dios y hasta dónde llega su amor por nosotros, referencia y fundamento de nuestra existencia. Este libro estudia la centralidad de Cristo en el pensamiento antropológico de Romano Guardini. La fuerza y la grandeza del pensamiento de Guardini –y su riesgo– nacen del reto que con tanta seriedad se planteó: pensar toda la existencia humana desde Cristo recuperando así un pensamiento unitario e integral. Este reto choca con una cultura tan acostumbrada a «pensar sin Dios»; una cultura que, en gran parte, considera una ingenuidad y una falta de madurez crítica cualquier referencia objetiva a lo trascendente. Para salir de la crisis del pensamiento moderno a que ha llevado este abandono de Dios, se necesita un reencuentro del conocimiento con la revelación. Sólo pensando en unión vital con la fe, conseguiremos una visión unitaria y total de la existencia humana: del hombre, de la naturaleza y de la cultura. Poner a Cristo en el centro del pensamiento humano, para aprender a «mirar por sus ojos» y contemplar desde ahí la realidad