Uno de los filósofos modernos más prestigiosos, Bernard Williams, es el autor de este estudio sobre Descartes. En él ha tratado de analizar tanto el proyecto del fundamento del pensamiento de Descartes sobre la certeza como de descubrir los motivos filosóficos de su búsqueda. El proyecto en sí mismo, sus motivos básicos y muchas de las ideas que Descartes manejó en su búsqueda son expuestos a través de un prolongado argumento que es fundamental para definir muchos de los problemas de la filosofía moderna.
Se edita en este volumen la edición definitiva de 1933 con las variantes de la de 1930, de "San Manuel Bueno, mártir", obra maestra de Miguel de Unamuno, considerada como su testamento espiritual. La novela muestra un espacio no descriptivo en el que se asientan los símbolos clave de la dialéctica entre fe y duda, el lago, la montaña, la nieve, la villa sumergida, etc. Don Manuel asume esta lucha y se convierte en mártir en tanto toma sobre sí la duda y la sufre por toda la comunidad que, sumida en el engaño, avanza cohesionada por esa supuesta verdad no cuestionada.
No se puede dudar que la poesía de San Juan de la Cruz es una de las cumbres de la literatura española, lo cual no excluye su enorme valor doctrinal, místico. Esta poesía puede verse como comunicación de experiencias personales cuya expresión, en cualquier caso, se inserta en el quehacer artístico de un período: las pautas literarias y culturales del Renacimiento. El trabajo que Domingo Ynduráin aborda en la presente edición aspira a poner de relieve los procedimientos literarios, el sistema constructivo que hace de las Canciones y las demás composiciones obras de arte válidas para cualquier lector.
«La Celestina» constituye todavía para la crítica literaria una obra abierta a problemas sin resolver, objeto de opiniones irreconciliablemente divididas. El modo tradicional de acercamiento a «La Celestina» ha sido generalmente el del estudio de sus personajes. Esta nueva edición pretende ahondar en cuestiones más espinosas y poco seriamente consideradas, como son el autor, la intención y el género, haciendo hincapié en ese indudable lado cómico de la obra, frecuentemente olvidado por la crítica moderna, que ha preferido dar más importancia a su aspecto trágico.
La culpa la tuvo Marta de Nevares (la Marcia Leonarda del título), aunque también el complaciente fervor de Lope hacia su amada. Marta le pide a Lope que le escriba una novela —ya le había escrito el Fénix versos y comedias— y le compuso "Las fortunas de Diana". Detrás del título de las "Novelas a Marcia Leonarda", se encubre, pues, una intrigante biografía amorosa, con sus partes de risa y sus muecas de llanto y tragedia, en un mosaico de modalidades narrativas (prosa, verso, carta, digresión, monólogo, etc.) y de géneros: "Las fortunas de Diana" participan del "romanzi" de la novela bizantina; "La desdicha por la honra" casa dentro del formato de la novela morisca; "La prudente venganza" estaría dentro de la técnica de los "novellieri" y de "El curioso impertinente" de Cervantes; y las mismas resonancias cervantinas encontramos en "Guzmán el Bravo" dentro del género de caballería.