Este libro recoge las ponencias del coloquio celebrado en Estrasburgo en octubre de 1999 y que reunió a prestigiados especialistas de la talla de Roberto Blancarte y Alain Touraine. El coloquio fue organizado por el Centro de Sociología de las Religiones y de Ética Social de la Universidad Marc Bloch de Estrasburgo y por la Comisión de Estudios de Historia de la Iglesia en América Latina
Los platos que cocinamos y comemos a diario contienen todos los ingredientes de nuestro pasado y nuestro presente: nuestra identidad, nuestro lugar en la sociedad y el lugar de nuestra sociedad en el mundo. El prestigioso historiador de origen español Felipe Fernández-Armesto, profesor en la Universidad de Oxford y autor de la magistral obra Civilizaciones, nos ofrece esta fascinante Historia de la comida, que aborda este suculento tema desde la perspectiva de la cultura, la sociología, la gastronomía y la relación con el entorno; en suma, una historia global que abarca más de medio millón de años.
A modo de hilo conductor, Fernández-Armesto distingue ocho grandes revoluciones en la historia de la comida, desde que la aparición de la cocina separó el camino de la humanidad del de otras especies animales, hasta la más reciente, cuando la industrialización ha transformado el modo en que la comida se obtiene, se consume y se imagina, pasando por el desarrollo del pastoreo, la invención de la agricultura o el aumento de las desigualdades, que hizo de la comida un indicador social. También descubriremos las semejanzas entre vegetarianos y caníbales, qué gustos compartían Luis XIV y Duke Ellington y qué une la cocina del microondas con la de los hombres prehistóricos. Un recorrido absorbente por uno de los temas constantes de la historia humana, que justifica la sentencia de «somos lo que comemos».
El título responde a la convicción de que el servicio a los fines del quehacer universitario debe comprometer a todo el cuerpo social, y no sólo al Estado.
Coincidiendo con la crisis financiera y el debate en torno al capitalismo, Reinhard Marx, arzobispo de Munich y Freising, que comparte apellido con el padre del comunismo, lanza este libro con el mismo título que hizo famoso a su homónimo.
Estas coincidencias no significan que no critique abiertamente a Karl Marx en este tratado. Sin embargo, sí considera que es importante familiarizarse con la obra de Marx para entender las teorías del capitalismo y el mercantilismo, pero le considera, en parte, culpable de las atrocidades que se cometieron en el siglo XX en nombre del comunismo.