Cuando en 1953 se estrenó en París Esperando a Godot, casi nadie sabía quien era Samuel Beckett, salvo, quizá, los que ya lo conocían comoex secretario de otro irlandés, no menos genial, James Joyce. Poraquellas fechas, Beckett tenía escrita ya gran parte de su obraliteraria ; sin embargo, para muchos, pasó a ser «el autor deEsperando a Godot». Se dice que, desde aquella primera puesta enescena -que, realizada por el gran Roger Blin, causó estupefacción yobtuvo tanto éxito- hasta nuestros días, no ha habido año en que, enalgún lugar de nuestro planeta, no se haya representado Esperando aGodot. ­Más de cuarenta años en los escenarios del mundo ! El propioBeckett comentó en cierta ocasión, poco depués de recibir el PremioNobel de Literatura en 1969, que Esperando a Godot era una obra«horriblemente cómica». Sí, todo lo horriblemente cómica que puederesultar, a fin de cuentas, la angustiosa situación límite de dosseres cuya vida y grotesca solidaridad se forjan el la absurda y vanaespera de ese quién sabe qué (o quién) al que llaman Godot...
Edición aumentada con una variante del acto IV para la escena.
A la vez brutal y religiosa, simbolista y romántica, poética y realista, La Anunciación a María es problablemente la obra más emblemática y popular de su autor. Violaine, la chica hermosa y feliz, Pierre de Craon, el genio constructor y doliente, Anne Vercors, el padre sabio y lejano... Estos y otros personajes se graban en la memoria del lector en una obra llena de fuerza y poesía. Un drama «a la vez humano y sobrehumano», en palabras del autor, «representación de todas las pasiones humanas integradas en el plano católico».
«La Anunciación a María es, objetivamente, una de las mejores obras que se hayan escrito en este siglo. [...] En ella está condensado el genio del cristianismo católico». (Luigi Giussani, Mis lecturas)
En este libro, fruto de cuatro años de trabajo por parte del autor, se nos presenta el Chesterton de siempre -el polemista, el escritor y el converso- junto a un Chesterton nuevo, no por ello menos verdadero: el amigo, el amante, el padre, el hermano y, sobre todo, el cristiano.
A partir de sus textos, muchos de ellos inéditos, Joseph Pearce nos acerca, con amenidad y buen hacer, a una de las figuras más enigmáticas y apasionantes de la literatura inglesa y universal, forjando una obra imprescindible para la comprensión del personaje y de la Europa de este siglo. «Pearce ha evitado los errores fácticos y los juicios erróneos cometidos por los primeros biógrafos, y su investigación ha sido meticulosa, con el resultado de que su estudio contiene una gran cantidad de importante material nunca antes publicado» The G.K. Chesterton Study Centre (Londres) «El trabajo más importante sobre Chesterton en los últimos 50 años» Aidan Mackey, Chesterton Literary Estate «Una biografía en su máxima expresión. Pocas veces una biografía me ha dejado sentimentalmente cerca del tema. Pearce escribe una prosa bella, limpia y lucida. Un libro que leeré muchas veces» Walter Hooper, autor de A Guide to C.S. Lewis
La obra de René Girard podría resumirse en «una sola larga argumentación» presidida por dos ideas iluminadoras: el chivo expiatorio y el deseo mimético. A la reconstrucción de ese hilo conductor contribuyen ahora estas conversaciones en las que Girard, siguiendo las etapas de su vida y su obra, profundiza en el pensamiento clave de que la imitación lleva al conflicto pero actúa, al mismo tiempo, como fundamento de toda transmisión cultural. La teoría mimética prueba su fecundidad antropológica y epistemológica en calidad de reflexión sobre el origen de la cultura, el mecanismo del deseo y la violencia y la trascendencia del cristianismo, entendido éste como «toma de conciencia cultural y moral de la naturaleza sacrificial de nuestra sociedad».