¿Puede el eco cobrar fuerza con el tiempo, en vez de languidecer? ¿Qué esconde Hannah Arendt para que, casi cuarenta años después de morir, su voz siga originando huracanes en el mundo contemporáneo? Probablemente una de las fuerzas ocultas que actúan de imán sobre esta autora sea esa «cabezonería intelectual» para intentar razonar lo irrazonable, para robar un poco de luz a la asfixiante oscuridad, para construir puentes entre el pasado y el futuro, aunque la enésima riada de la Historia se los lleve por delante una vez más. También hoy vivimos tiempos de tiniebla. Primero fue la amenaza de un terrorismo global sobre nuestras cabezas, y después nos ha reventado en las manos un sistema económico que creíamos infalible: nuestra seguridad se ha hecho vulnerable. En días como estos, en los que la palabra crisis tatúa nuestra actualidad hasta asfixiarla, no bastan los discursos ideológicos más o menos brillantes. Necesitamos vidas que nos hablen, que nos interpelen, que aporten experiencia vivida a nuestras certezas descalabradas.
El hechizo de la comprensión es la primera biografía de Hannah Arendt publicada originalmente en castellano. Sus páginas intentan ofrecer una historia que merece la pena ser conocida por la pasión histórica, humana e intelectual que encierra. Y busca contar la historia con todos los recursos que la literatura brinda al pensamiento, sin que la técnica de la ficción robe espacio al rigor científico. Viene acompañada por un completísimo anexo de publicaciones de y sobre la pensadora alemana.
«Estamos ante un libro que convierte una historia de gran densidad humana e intelectual en lectura que resulta difícil dejar una vez comenzada. Se trata de una navegación por aguas agitadas, tormentosas a ratos, que se lleva a cabo con sorprendente y suave facilidad. Éste es el caso de una escritora de raza que nos cuenta la vida y nos interpreta la obra de una pensadora que ha descifrado algunos de los enigmas más inquietantes de nuestro tiempo. El resultado es memorable» (del Prólogo de Alejandro Llano)
El compromiso político de Martin Heidegger es un tema recurrente que ha ocasionado ya varias oleadas polémicas entre los filósofos y, últimamente, también en la gran prensa europea. Los tres escritos escogidos en este volumen son los principales documentos, salidos de la pluma de Heidegger, acerca de la fase más controvertida y extraña de su itinerario filosófico: su colaboración con el nazismo.
Esta obra fue proyectada, más que como un libro, como el inicio de un movimiento filosófico continental. Es decir, los autores de las contribuciones tienen conciencia de que la tarea que han asumido es de tal envergadura que no pueden sino cumplirla parcialmente. Los trabajos a todo lo largo y ancho de toda la región latinoamericana sobrepasan a los especialistas de la historia o de temas expuestos en el orden nacional. Cuando debe abordarse la temática tal como lo exige una obra sobre la filosofía latinoamericana, se encuentran dificultades tales como la falta de bibliotecas especializadas en este tema regional, de especialistas que hayan tratado los temas, de que se hayan estudiado suficientemente los asuntos para poder instaurar diversas hipótesis que permitan fecundos debates. Todo comienza entonces por obtener los materiales bibliográficos y temáticos necesarios. Esto no se logra en corto tiempo: exige años de perseverancia en los que los autores se dan cuenta de los límites de la empresa. Por ello, mucho más que el lector, son los mismos editores y autores de esta obra los que tienen conciencia de que solo se ha iniciado la extracción de un precioso metal de una rica mina casi inexplorada en su conjunto.
En este ensayo, inédito hasta ahora en español, J.H. Newman quiere responder a la acusación de escepticismo que le atribuían ciertos intelectuales. Para ello expone su característico modo de entender la razón, de modo que este breve escrito puede considerarse un documento-guía para la comprensión de uno de los conceptos clave de su obra. Newman aparece ante nosotros como un filósofo que trató de comprender la realidad concreta del creyente desde su propia vivencia intelectual, volitiva y emocional. Sin embargo, las intuiciones plasmadas especialmente en este escrito dejan constancia de un trasfondo metafísico sólido, el trasfondo que delata un sistema consistente en el que toda facultad, y señaladamente la razón, tiene su lugar, pero también sus límites.
Publicada en 1921, en un periodo de intensa actividad creativa, “La tía Tula” debe su riqueza e intensidad –como observa José-Carlos Mainer en el prólogo a esta edición– a las contradicciones o a la superposición de los materiales que le dieron origen. A la historia de la mujer que renuncia a una vida propia para hacer el papel de madre de los hijos de una hermana muerta se añaden elementos recurrentes en la obra de Miguel de Unamuno (1864-1936), como la pelea por la fe religiosa, el dilema entre el mérito y el reconocimiento exterior o el histrionismo, la sinceridad de la vida moral y la conciencia del dolor.
Obra de claro sustrato autobiográfico, LA REPETICIÓN (1843) retoma y redondea, al menos en su primera parte, el análisis que hiciera SÖREN KIERKEGAARD (1813-1855) de la compleja relación que sostuvo con su novia Regine Olsen y que tan decisiva resultó a la postre en su trayectoria existencial y filosófica. En efecto, si en «Diario de un seductor» (H 4484) examinaba las artes con que se ganó el afecto de la muchacha y en «Temor y Temblor» (H 4419) el “salto al vacío” que supuso la ruptura de su relación, «La repetición» –obra recompuesta tras llegar a conocimiento de Kierkegaard el nuevo compromiso de la que fuera su amada– consolida y explica la decisión del autor de dejar atrás definitivamente la condición de “hombre estético”, atrapado por el plano terrenal, para comprometerse en un camino de mayor trascendencia. Igualmente en esta colección: «El concepto de la angustia» (H 4473) e «In vino veritas» (H 4494).
En nuestra época domina más la impaciencia por tener que la paciencia de ser. Y sin embargo, aquel que lo «tiene» todo no necesariamente «es» el más importante. En este sentido, aunque la metafísica se interesa por las cuestiones reales, más aún lo hace por la profundidad de nuestros pensamientos y de nuestras decisiones, es decir, por el «ser».
Las páginas de este libro muestran que, incluso en las comunicaciones más anodinas, toda persona se guía por paradigmas propios que suelen pasarnos desapercibidos. El término «ser» expresa tales paradigmas; su sentido revela ante todo la libertad y la diversidad, el don, su acogida y su respuesta. Por otra parte, el «ser» pone de relieve la aceptación de los unos y los otros. Así, la analogía, como tema central de la metafísica, se explica a partir de este marco de la comunicación libre, donde tiene lugar el «ser del lenguaje».
En todo caso, el «ser» no es simple fruto del acuerdo alcanzado entre las personas. Los seres humanos viven juntos porque ello les ha sido dado como don previamente. Los trascendentales de la metafísica (la unidad, la bondad, la verdad, el bien, y la santidad) significan este don y constituyen el «lenguaje del ser».
El presente libro es un penetrante estudio sobre el estado de la humanidad en el mundo contemporáneo que analiza, sobre todo, las cosas que el hombre y la mujer son capaces de hacer. Así pues, se centra en una discusión sobre la labor, el trabajo y la acción –los tres capítulos centrales de la obra— y se refiere tanto a las capacidades humanas cuyo motivo esencial es atender a las necesidades de la vida (comer, beber, vestirse, dormir...) como a la sublimación de éstas en otra más trascendental, la capacidad de ser libre. A la vez análisis histórico y propuesta política de amplio alcance filosófico, La condición humana no sólo es la clave de todas las obras de Hannah Arendt, sino también un texto básico para comprender hacia dónde se dirige la contemporaneidad.