Publicados unitariamente en 1920 bajo el título de TRES NOVELAS EJEMPLARES Y UN PRÓLOGO, los admirables relatos que forman este volumen -«Dos madres», «El marqués de Lumbría» y «Nada menos que todo un hombre»- fueron escritos por Miguel de Unamuno (1864-1936) en la segunda década del siglo xx. Precedidos por un prólogo en el cual el autor resume sus ideas básicas sobre la teoría del relato y la creación de personajes, se caracterizan por la exploración del mundo interior, la escasez de los elementos descriptivos, el desarrollo interno de la trama en un tiempo psicológico y la importancia de los diálogos, rasgos que comparte, como apunta en la introducción al volumen Demetrio Estébanez Calderón, con las corrientes expresionistas vigentes en la época.
Redactado por NICOLÁS MAQUIAVELO (1469-1527) en 1513, cuando se hallaba en el ostracismo a causa del triunfante retorno al poder de los Médicis, EL PRÍNCIPE ha pasado a la historia del pensamiento por constituir el arranque de la reflexión teórica sobre los orígenes del poder y la estructura del mismo. En medio de las exhortaciones moralizadoras, los encubrimientos retóricos y las justificaciones ideológicas, la contraposición entre la «fortuna» y la «virtud», capital en la obra, es una de las articulaciones conceptuales mediante las que comienza la política a abrirse paso como saber científico y como práctica sometida a pautas de regularidad.
Con el paso de los siglos, la destacada actividad pública que TOMÁS MORO (1478-1535) ejerció en su época y que acabó llevándole al patíbulo por su enfrentamiento con Enrique VIII ha perdido importancia en favor de su dimensión como renovador del humanismo cristiano y de su labor intelectual y literaria. UTOPÍA es un hito clásico del Renacimiento y de la evolución de las ideas políticas. La presente versión, a cargo de Pedro Rodríguez Santidrián, toma como base las ediciones publicadas en 1518 en Basilea, que incluyen la correspondencia cruzada sobre la obra, así como el mapa idealizado de Utopía y el alfabeto de la lengua utopiana.
Teherán, mediados del siglo xix, la corte del sha atraviesa por momentos convulsos entre conjuras e intrigas de palacio. Todo bajo la atenta mirada de la reina madre. En medio de este tenso ambiente sobreviene un hecho que va a alterar aún más los difíciles equilibrios del poder: la súbita e inesperada aparición de una mujer cuyas ideas, consideradas subversivas y heréticas, recorren todo el país como la pólvora. Bahiyyih Nakhjavani nos cuenta en La mujer que leía demasiado la historia, trascendida por la ficción, de la poetisa y teóloga iraní Tahirih Qurratu’l-Ayn. Inteligente, hermosa, erudita y dotada de una gran elocuencia, fue la primera mujer en su época y en su país que proclamó la dignidad femenina, proponiéndose alfabetizar a las mujeres y atreviéndose a quitarse el velo. Puso en riesgo su vida, enfrentándose a los poderes seculares y religiosos a los que acorraló con sus conocimientos de los textos sagrados. Fascinante tanto para sus seguidores como para sus detractores, admirada por diplomáticos y viajeros que escribieron sobre ella, fue condenada por su rebeldía y murió estrangulada en Teherán, en 1852. Acabó convirtiéndose en leyenda. Con una prosa brillante y atractiva, Bahiyyih Nakhjavani entrecruza sutilmente en esta narración los hilos de la historia, la religión, el arte y la condición femenina. A través del marco de una novela histórica, la autora britanoiraní aborda un tema tan universal y de tan máxima actualidad como es el de la libertad de expresión y los derechos de la mujer en contraposición a los poderes políticos y a los dogmas religiosos. La mujer que leía demasiado es un homenaje al valor y ejemplo de Tahirih Qurratu’l-Ayn y al de todas las mujeres que siguieron y siguen su ejemplo en aquellas tierras.
De entre los textos indianos, la BREVÍSIMA RELACIÓN DE LA DESTRUICIÓN DE LAS INDIAS, del padre BARTOLOMÉ DE LAS CASAS, es con diferencia la obra más conocida y difundida. Abordar esta obra requiere huir del anacronismo y demostrar la vigencia de sus ideas, pues más allá de su contenido, que dio origen a la “leyenda negra” contra España, sus páginas, que desvelan los abusos sufridos por el universo indígena de la mano del mundo blanco, inciden aún en una cuestión sin resolver. La edición de esta obra de referencia ineludible para el continente americano ha corrido a cargo de Trinidad Barrera.
Publicado por primera vez en 1844, EL CONCEPTO DE LA ANGUSTIA es quizá el libro más conocido del danés SÖREN KIERKEGAARD (1813-1855), y en él se articulan algunos de los conceptos en los que se apoya el existencialismo cristiano. La angustia se relaciona con el pecado y con la libertad. Engendrada por la nada, alimentada por la impaciencia, surgida como «realidad de la libertad en cuanto posibilidad», la angustia es «el vértigo de la libertad» y al mismo tiempo un medio de salvación que conduce a la fe, a la verdad que años antes de escribir este libro el autor, en su diario íntimo, confesaba buscar como sentido definitivo de su existencia: «Es preciso encontrar una verdad, y la verdad es para mí hallar la idea por la que esté dispuesto a vivir y morir». Del mismo autor, en esta colección: «Temor y Temblor» (H 4419).
Pocos libros, y menos aún tratándose de poesía, han alcanzado la difusión de Veinte poemas de amor y una canción desesperada. Expresión de sentimientos universales y siempre vivos, de una diversidad de expresiones amorosas, esta obra de Pablo Neruda, pese a haberse convertido con el paso del tiempo en una obra clásica, conserva intacta, como afirma certeramente Jorge Edwards en el prólogo que la antecede, «su magia secreta, contagiosa y peligrosa».
El malestar en la cultura, trabajo en el que Sigmund Freud (1856-1939) sentó que nuestra especie ha pagado por el progreso el elevado precio de sacrificar la vida instintiva y reprimir la espontaneidad, es, como señala Carlos Gómez en su introducción al mismo, uno de los ensayos con más amplias repercusiones en el pensamiento del siglo xx. Completan este volumen otros textos freudianos fundamentales, como son «Sobre la conquista del fuego», «Consideraciones de actualidad sobre la guerra y la muerte» y los seis ensayos destinados a ser publicados bajo el rótulo genérico de «Metapsicología», entre los que se halla el célebre «La aflicción y la melancolía».
Se conoce con el nombre de «apócrifos» todos aquellos textos que por una razón u otra no han sido incluidos a lo largo del tiempo entre los libros sagrados canónicos del judaísmo y el cristianismo, cuyo establecimiento definitivo culminó (por lo que concierne a la Iglesia católica) en el Concilio de Trento (1546). De índole sumamente variada, narran desde vidas y episodios de los más diversos personajes de ambos testamentos hasta textos sapienciales. No pocas veces versan sobre etapas o puntos oscuros de la vida de Jesús y sus discípulos, no se pliegan a la doctrina oficial y son rechazados como «heréticos». APÓCRIFOS DEL ANTIGUO Y DEL NUEVO TESTAMENTO es una antología a cargo de ANTONIO PIÑERO, destacado especialista en este tema, que reúne los más sustanciales y controvertidos de ellos. La introducción, a cargo del propio Piñero, aclara de forma ejemplar la problemática que suscitan estos textos, así como el justo lugar que se les debe asignar, principalmente como elementos válidos para la historia de la teología y de las ideas religiosas, así como para la historia de la iconografía y de la literatura cristianas.