El largo ensayo de Sigmund Freud (1856-1939) sobre “Moisés y la religión monoteísta" fue comenzado en vísperas del “Anschluss” de la indefensa Austria por Hitler y concluido en el destierro londinense. Los cuatro “Escritos sobre judaísmo y antisemitismo” que completan el volumen son un testimonio de las actitudes públicas del fundador del psicoanálisis frente al “problema judío”. La idea de un Dios único, el rechazo del ceremonial mágico y la acentuación de los preceptos éticos constituyen, a juicio de Freud, el núcleo característico de la religión judía. La capacidad del pueblo judío para mantenerse unido tiene su último resorte en las creencias mosaicas, que exaltaron su autoestima. Los motivos más profundos del odio a los judíos se relacionan también con ese peculiar talante del “pueblo elegido”, dispuesto a arrostrar las más crueles persecuciones, seguro de su destino.
Sin lugar a dudas, la FUNDAMENTACIÓN PARA UNA METAFÍSICA DE LAS COSTUMBRES (1785) constituye un texto primordial dentro del pensamiento ético. Ninguna otra obra de IMMANUEL KANT (1724-1804) muestra tanto vigor y grandeza morales, unidos a un fino sentido del detalle psicológico, ni logra definir sus conceptos con un lenguaje tan popular, salpicado de felices imágenes y ejemplos. Aquí se adelantan, de un modo mucho más accesible, las premisas éticas que en 1788 se verían inmortalizadas por la «Crítica de la razón práctica» (H 4411). En esta nueva edición, a cargo de Roberto R. Aramayo, la presente versión castellana queda complementada con un oportuno estudio preliminar, una bibliografía selecta y unos detallados índices.
La filosofía escribió XAVIER ZUBIRI (1898-1983) adopta estructuras muy diversas y puede ser entendida como forma de vida, como doctrina de la vida o como conocimiento. CINCO LECCIONES DE FILOSOFÍA muestra la idea estructural y el objeto formal sobre el que recae ese modo de conocimiento en la obra de cinco pensadores: el ente, para Aristóteles; el objeto fenoménico, para Kant; el hecho científico, para Comte; el dato inmediato de la conciencia, para Bergson; la esencia pura de la conciencia, para Husserl. Si bien estos filósofos no dicen lo mismo, hablan de lo mismo, tanto por su objeto como por la índole de su conocimiento.
Esta edición en dos volúmenes ofrece la recopilación de los 67 Cuentos publicados a lo largo de su vida por Edgar Alan Poe (1809-1849) en la magnífica traducción llevada a cabo por Julio Cortázar. El primer volumen reúne las narraciones dominadas por el terror, la presencia de lo sobrenatural, la preocupación metafísica y el gusto por el análisis, mientras que el segundo recoge las exploraciones sobre el pasado y el futuro, los bellos relatos contemplativos que encierran la filosofía de Poe sobre el paisaje, la serie de estampas grotescas y los cuentos de carácter satírico.
Esta edición en dos volúmenes ofrece la recopilación de los 67 Cuentos publicados a lo largo de su vida por Edgar Alan Poe (1809-1849) en la magnífica traducción llevada a cabo por Julio Cortázar. El primer volumen reúne las narraciones dominadas por el terror, la presencia de lo sobrenatural, la preocupación metafísica y el gusto por el análisis, mientras que el segundo recoge las exploraciones sobre el pasado y el futuro, los bellos relatos contemplativos que encierran la filosofía de Poe sobre el paisaje, la serie de estampas grotescas y los cuentos de carácter satírico.
Por expreso deseo del autor, no está permitido que la editorial aporte en su material promocional ningún tipo de texto adicional, información biográfica, cita o reseña relacionados con esta obra. El lector interesado podrá, no obstante, encontrar abundante información al respecto en internet.
Por su colosal ambición, que habría de destinarla a quedar inacabada, por su carácter de obra cumbre de su autor y por la influencia que, de un modo u otro, ha ejercido en la historia del mundo, El capital suele ser una obra más citada que leída, más imaginada que estudiada y, por supuesto, objeto de las más variadas manipulaciones, interpretaciones y descalificaciones. La presente antología a cargo de César Rendueles selecciona lo fundamental de esta obra clave y anima a acercarse a ella con una perspectiva nueva, desprovista de prejuicios que permita valorar en su justa e importante medida la aportación de Karl Marx al debate económico. Selección de César Rendueles
Ante los males sociales o daños públicos, lo habitual es limitar sus dimensiones al mal que se comete y al que se padece. El agresor y su víctima, no hay otros protagonistas. ¿Hará falta tachar esa mirada, además de simplista, de interesada? Así lo cree Aurelio Arteta al ofrecer estas reflexiones que tienen a la sociedad vasca contemporánea como su primera inspiración. A diferencia de los males de naturaleza privada, los públicos no sólo los causan unos pocos y los sufren bastantes, sino que requieren a muchos más que los consientan. Estos son quienes colaboran en aquellos daños mediante su abstención, adquiera ésta la forma de silencio, disimulo o cualquier otra. En realidad, es el modo más abundante de comparecer el mal. Pues cabe esperar que no seamos agentes directos del sufrimiento injusto y más probable resulta que nos toque figurar como sus pacientes. Pero lo seguro es que nos contemos a menudo entre sus espectadores. Y entonces no podrá esquivarse la cuestión de si nuestro conformismo e indiferencia ante los daños que contemplamos nos convierte asimismo en sus cómplices.
Urdida en torno a la situación límite de una treintena de muchachos en una isla desierta, El Señor de las Moscas es una magnífica novela que admite lecturas diferentes e incluso opuestas. En efecto, si algunos pueden ver en esta indagación de William Golding en la condición humana la ilustración de que la agresividad criminal se halla entre los instintos básicos del hombre, otros podrán considerarla como una parábola que cuestiona un tipo de educación represiva que no hace sino incubar explosiones de barbarie prestas a estallar en cuanto los controles se relajan.
Figura capital del pensamiento filosófico de Grecia junto con Platón, su maestro, ARISTÓTELES (384-322 a.C.) fue autor de una vasta obra que abarcó desde la lógica y la metafísica a la biología y las ciencias naturales, pasando por la retórica, la poética, la política y la ética. Conjunto de recomendaciones dirigidas en un principio a la educación de su hijo, su ÉTICA A NICÓMACO -cuya traducción, así como introducción y notas, corren a cargo de José Luis Calvo Martínez- plantea y trata esencialmente la cuestión de cómo debe el ser humano ordenar su conducta para alcanzar la felicidad. Según Aristóteles, además de las virtudes o facultades intelectuales específicas del hombre, existe una capacidad complementaria o virtud moral basada en tres pilares -la naturaleza (physis), la costumbre (ethos) y la razón (lógos)- que debe ser, en definitiva, su pauta de conducta.