Este Atlas de Filosofía resume la historia del pensamiento filosófico a través de sus representantes más importantes, acercando al lector a los problemas fundamentales de la filosofía y las maneras de darles respuesta, así como a sus métodos y terminología. La propia concepción del Atlas aporta gran claridad, pero impone una selección y una periodización precisas, por lo que se hace hincapié en la descripción concisa de las ideas y los conceptos fundamentales de cada filósofo o escuela. Por lo que respecta a la representación de ideas filosóficas en forma de gráficos y dibujos, abre un terreno inexplorado y novedoso. Las páginas ilustradas tienen la función de aclarar, completar o resumir los textos a fin de facilitar su comprensión y suscitar la reflexión por parte del lector.
En un diálogo continuo con la tradición filosófica, Zubiri va página a página describiendo el acto de la intelección humana y desmontando el cúmulo de hipótesis y teorías que subyacen al llamado «problema del conocimiento». Zubiri consigue descubrir, mediante el recurso a un procedimiento puramente descriptivo, en qué consiste el acto humano por excelencia, la intelección. La intelección humana, dice Zubiri, no es una síntesis trascendental, sino algo más simple a la vez que más radical, la mera actualización de lo real en la inteligencia sentiente.
El hombre vive en un mundo físico y en un mundo humano, el de la convivencia. Pero no todo en este mundo es personal, sino en gran parte social o meramente psíquico. Hay formas de convivencia en las que los hombres funcionan y se encuentran rigurosamente como personas. Este libro intenta trazar el mapa del mundo personal, con su argumento, su historia, su dramatismo. Un mundo que no puede ser solamente descriptivo, sino narrativo. La enumeración de sus capítulos muestra su contenido:
La condición personal de la vida humana
Persona masculina y femenina
Génesis de la persona
El dramatismo de lo personal
El descubrimiento de la persona
Relieve del mundo personal
Las fronteras
Los amigos
El núcleo personal de las experiencias
El amor personal
La instalación en el mundo personal
Trayectorias
El fondo de la persona.
Compendio de los héroes barojianos que hacen de la acción el eje de su existencia, ZALACAÍN EL AVENTURERO (1909) se caracteriza por su voluntad enérgica, desprovista de motivaciones ideológicas, su amor por el peligro y su capacidad para salir triunfador en la lucha contra la adversidad y el destino. Situada en el marco histórico de la última guerra carlista, en ella las aventuras se suceden con rapidez cinematográfica y prevalecen de largo sobre las teorías y la reflexión. De capital importancia en la visión del mundo de su protagonista es el viejo Tellagorri, vagabundo astuto y vividor, antisocial y anarquista, quien le transmite su amor por la naturaleza y le enseña a ser fuerte por encima de todo. Como contrapunto a Martín Zalacaín, Pío Baroja (1872-1956) alza el odio enfermizo que le profesa Carlos Ohando, débil vástago de una familia hidalga, carlista fanático y sombrío, que envidia en su enemigo la fuerza y el éxito que a él le están vedados.
El protagonista de LAS INQUIETUDES DE SHANTI ANDÍA (1911) va recopilando, en su vejez desengañada, los fragmentos de un diario escrito en diferentes épocas de su vida. Por él conocemos su infancia en el pueblecito vasco de Lúzaro, su juventud soñadora en tierras gaditanas, sus venturas y desventuras como capitán de fragata, y sobre todo la fascinación por su tío Juan de Aguirre, trasunto de antiguos marinos vascos y verdadero héroe de la novela, cuya vida aventurera está plagada de pintorescas peripecias. Desde la conciencia de una vida malgastada, Shanti Andía muestra una nostalgia inmensa por el mar de antaño, que recorrían hombres llenos de impulso viril y de anhelo de aventura, siempre en conflicto con la sociedad convencional. Como en otras de sus obras, Pío Baroja (1872-1956), que tuvo en cuenta sus recuerdos familiares, conjuga magistralmente en esta obra a la vez hermosa y apasionante, la acción con los acentos líricos e íntimos.
Libro publicado en 1905, CANTOS DE VIDA Y ESPERANZA, los cisnes y otros poemas representa la cima y síntesis de la obra lírica de Rubén Darío (1867-1916). En esta obra canónica, el poeta nicaragüense reorientó una escritura que, sin abandonar los mundos de «Azul» y «Prosas profanas» (L 5325), da espacio a la irrupción impetuosa de lo personal en su poesía: sentimientos de culpa y también gozosos, pesares y temores, atracción por el eros y anhelo de espiritualidad se unen a reflexiones sobre la cultura, la historia y la defensa de lo americano y lo hispánico, amenazado en la confluencia de los siglos xix y xx por poderosas fuerzas como Estados Unidos. La edición del texto corre a cargo de José Carlos Rovira, quien proporciona de forma aparte al lector interesado un amplio comentario que recorre sentidos, contextos y situaciones que el tiempo ha podido distanciar, pero que siguen siendo poéticamente imprescindibles.
Si a veces parece que un nombre está predestinado a relacionarse con un episodio sangriento o heroico, no es éste el caso de Kosovo, cuyo inocente y apacible significado ­«campo de mirlos»­ se compadece mal con la que es recurrentemente y desde hace seis siglos una de las heridas más delicadas de los Balcanes y, por extensión, del continente europeo. Recreación fascinante de la batalla en que, el 28 de junio de 1389, una coalición cristiana integrada por serbios, albaneses y rumanos, fue aniquilada por el ejército del sultán Murad, abriendo el territorio al poder otomano, TRES CANTOS FÚNEBRES POR KOSOVO es un libro imprescindible para comprender el drama de los Balcanes, al mismo tiempo que una llamada al recuerdo de la nobleza de su cultura.
Abogado durante un breve periodo de tiempo en su juventud, luego avispado periodista de tribunales y finalmente escritor de éxito, GASTON LEROUX (1868-1929) es autor de las que
son sin duda algunas de las obras más populares de la literatura francesa. Entre ellas destaca EL MISTERIO DEL CUARTO AMARILLO (1907), clásico de la literatura policiaca y de intriga, en la que su protagonista, el periodista Rouletabille ­perteneciente a la estirpe del Dupin de Poe y el Holmes de Conan Doyle­, se ve enfrentado al reto de despejar un enigma
aparentemente irresoluble, como es el de un crimen y la posterior huida del criminal en el interior de una estancia inaccesible.
Resumen de la obra fundamental de JOHN LOCKE (1632-1704), el COMPENDIO DEL ENSAYO SOBRE EL ENTENDIMIENTO HUMANO sintetiza las ideas fundamentales del trabajo publicado con este título en 1689 y que habría de procurarle un lugar destacado en el ámbito de la filosofía. En el «Ensayo» se examinan la naturaleza y los límites del conocimiento humano. Para ello se atiende al origen y los modos «en que llegan a nosotros todas las ideas que nuestro entendimiento emplea al pensar» y, en contraposición con Descartes, se afirma descubrir que todo nuestro conocimiento depende de la experiencia y que, por tanto, no hay verdades innatas accesibles mediante el intelecto. Locke es, con matices, el padre fundador del empirismo británico clásico. Otras obras de John Locke en esta colección: «Ensayo y Carta sobre la tolerancia» (H 4408) y «Segundo Tratado sobre el Gobierno Civil» (H 4415).