El amor como imperativo de exelencia es un movimiento de fidelidad a sí mismo y a las cosas. Es lo que para Ortega significa la definición platónica del amor como un "deseo de engendrar belleza", la aspiración al ser en plenitud, al ser en forma. Eso es lo que constituye el ideal de cada cosa, y no es exclusivamente nuestro.
Sin duda la figura de Jesús de Nazaret es la más importante e influyente en toda la historia de Occidente y, sin embargo, continúa siendo un gran desconocido. Apelando a fuentes antiguas, tanto a lo contenido en los evangelios canónicos como en los apócrifos, este libro muestra que es un personaje sobre el que, a la luz del rigor de los documentos que nos han llegado, sabemos realmente muy poco, pues dichos textos nos muestran una información contradictoria no solo en lo referido a su vida y hechos sino también a aspectos doctrinales y teológicos. Una obra sorprendente y un referente imprescindible para cualquier lector interesado en conocer el cristianismo y, sobre todo, la enigmática figura de Jesús de Nazaret.